Twitter se ha convertido en el último enemigo de Chris Evans. Pero ¿quién es esta mujer de nombre y apellido anglófono? En realidad, se trata de Olga Peters, un nombre que tampoco dice nada, salvo al observar su árbol genealógico: es la nieta del mismísimo Joseph Stalin. Ahora se ha convertido en una de las personas más odiadas por el Partido Comunista ruso. Y todo por unas fotos publicadas hace algo más de un año.

Sería en 2015 cuando Evans iba a colgar una serie de fotos en su perfil de Facebook. Estas imágenes eran realmente polémicas por su propio estilo: aparece con la cabeza rapada, con pinturas de guerra en la cara y su ropa rasgada. A su estética se suma su agresiva pose, que acompaña con dos armas -una que empuña y otra que guarda en la cintura-, además de unas esposas y un oso de peluche que cuelgan de su pantalón.

Pese a que estas fotografías tienen más de un año de antigüedad, la polémica se ha reavivado después de que recientemente varios usuarios se hayan encargado de lanzarlas a través de Twitter. Esta situación ha provocado la indignación del Partido Comunista ruso, que ha anunciado que en su próxima reunión pedirán que deje de "deshonrar el nombre de su gran abuelo". La polémica con la nieta de Stalin está servida.

Chris Evans es la hija de Svetlana Alilúyeva, la única hija -reconocida- de Stalin, que cambió de nombre y adoptó el apellido de su madre tras su muerte. Ya esta 'huida' fue polémica en su época, pues desde su exilio se dedicó a criticar los excesos cometidos por el régimen soviético. Algunos años después, su nieta siguió el mismo camino que ya parecía olvidado, tras asegurar en 'Paris Match' que la familia de su madre "fue eliminada por los Stalin".

Tras la publicación de sus últimas y polémicas fotografías, el Partido Comunista se ha indignado, con varias críticas hacia Evans: "En la próxima reunión del Politburó emitiremos una carta abierta, demandando a la nieta de Stalin que se abstenga de la imagen extravagante y deje de deshonrar el nombre de su gran abuelo. Chris Evans, en vez de escandalizar al público con su imagen salvaje, debe unirse a la lucha contra el imperialismo norteamericano", afirmó a 'Sputnik'.

De hecho, se ha levantado tanto revuelo con estas fotografías que incluso desde algunos focos se apunta que sería otra persona, y no la nieta de Stalin quien se encuentra tras esa extravagante imagen. Sin embargo, los tatuajes de su cuerpo la delatan, confirmando que efectivamente es ella. El lío está servido, después de las polémicas imágenes en las redes sociales de Chris Evans, la nieta de Stalin.