La “marea roja” de Trump y el pajarito de Elon

Donald Trump no quiso ocultar su eterno optimismo que se hace ataque a medida que avanza en sus incontrolables infoverborreas, más ahora que ha recuperado su cuenta en twitter y se sabe que Elon está con él en su frenesí de volver a la Casa Blanca. El camino, sin embargo, para el republicano no había estado plagado de rosas. No es que no se cumplió su profecía, esa que el martes (por anteayer) el país se envolvería en una “marea roja”. Lo que quería decir el del jopo amarillo era cantar victoria anticipadamente. No ocurrió, pero la elección de medio mandato en los Estados Unidos deja abierta como las presidenciales en Brasil, una nube contaminante de polarización en la que ni él ni Elon, creían al pie de la letra. El lunes Elon insinuó que liberó al pajarito azul de su cautiverio que le costó 44.000 millones de los verdes y pidió votar a Trump. Que se entienda como parezca, pero el mensaje es tan claro como la luz del sol.

En la Cámara de Representantes el marcador hasta aquí está tan reñido como esto: 189 azules (demócratas) vs. 207 rojos (republicanos) de los 435 que componen ese cuerpo legislativo, faltando escrutar 39% de los votos. En el Senado la contienda es más apretada, tanto que hay tal división en algunos estados que volverán a concurrir a las urnas de aquí a dos meses: 48 blues vs. 49 reds, con el 97% escrutado.

El comportamiento de la mass media

Como siempre los mass media controlados en su mayoría por los blue se niegan a ceder terreno. Expían titulares expugnables como: “Los demócratas frustran las aspiraciones de una vuelta triunfal de Trump”. O la definición del principal analista político del New York Times, Nate Cohn: “Esta no es la noche que los Republicanos querían”. Le faltó decir que no dejó de ser una de terror para el presidente Biden.

Lo que no dicen está en la piel del electorado. Con tanta caca derramada contra Trump enfrentando imputaciones por todo y por nada; unas fabricadas (como la de las cajas en su residencia de Mar-a-Lago de las que apenas se sabe que contenían misteriosos informes sobre la seguridad nuclear (?) un cuento) y otras tan o más graves que esa, el resultado electoral –decisivo por la carrera a la Casa Blanca de 2024-, es una derrota para los blues.