Los Rolex de Boluarte

El escándalo de los relojes golpea a la presidenta de Perú.

La casa de la presidenta de Perú Dina Boluarte fue objeto de un operativo el sábado 30 para encontrar una colección de 15 relojes de lujo, que no estaban incluidos en su cuenta de resultados. El operativo fiscal, reavivó la historia de corrupción de Perú, país que ya tiene su quinto jefe de Estado en seis años. Denominado “Rolexgate”, el nuevo escándalo nacional golpeó a la actual presidenta del país, Dina Boluarte. Decenas de agentes invadieron su casa y registraron el Palacio de Gobierno en busca de una colección de 15 relojes de lujo de Boluarte, que supuestamente habían sido omitidos en sus declaraciones de renta.

Sin embargo, en la sorpresiva operación no se encontraron los tres modelos Rolex Datejust 36 y un modelo Day-Date, según informó la emisora ​​peruana La Encerrona. El valor pagado por los artículos de lujo puede variar: el primero cuesta entre 14.000 a 20.000 dólares; el segundo alrededor de 18.000 dólares – en total, por lo tanto, la colección valdría al menos 60.000 dólares.

Aunque se notó la ausencia de los cuatro Rolex, se encontraron ocho relojes de otras marcas, como Bulova, Fossil, Michael Kors y Swarovski, la mayoría en oro. Estaban guardados en una caja de metal, dentro de una cómoda en la habitación de la mandataria, según el informe de búsqueda.

“En la diligencia mencionada no fue localizada ni realizada la entrega de los relojes Rolex por parte del presidente de la República, a pesar de haber sido solicitada. Sin embargo, se obtuvieron otros elementos de interés para la investigación”, agrega el comunicado del Ministerio Público peruano. “Finalmente, es importante resaltar que la presidenta de la República fue citada formalmente para exhibir los relojes Rolex y rendir testimonio el viernes 5 de abril de 2024, tal como lo solicitó la defensa.

La versión de Boluarte

Ante el revuelo político, la líder peruana, que lleva poco más de un año en el poder, solicitó que se le tome declaración para “esclarecer lo antes posible los hechos investigados”. La mandataria argumentó que los objetos de lujo fueron adquiridos a lo largo de sus años de trabajo y negó irregularidades. Cuando los agentes le preguntaron sobre el paradero de los Rolex, Boluarte habría respondido: “Si quieres, búscalos”, según informó el programa de televisión Cuarto Poder, basándose en registros de la Fiscalía.

Tras derribar las puertas de su residencia, definió el registro como “arbitrario, desproporcionado y abusivo”. El Ministerio Público respondió a las críticas afirmando que el procedimiento “fue realizado por orden del Tribunal Supremo de Instrucción Preparatoria de la Corte Suprema de Justicia de la República”, con el fin de descartar que la “intervención fuera ilegítima, inconstitucional y abusiva”.

No es la primera vez, sin embargo, que Boluarte se encuentra en el punto de mira por motivos desagradables. Fue acusada de enriquecimiento ilícito durante la Presidencia -cargo al que fue ascendida en diciembre de 2022, cuando era vicepresidenta de Pedro Castillo y el entonces presidente fue destituido por el Congreso peruano-, además de haber presentado denuncias por financiamiento ilícito de campaña, influencia tráfico y plagio. El patrimonio de la mandataria también se triplicó en los últimos tres años, pasando de aproximadamente 44.000 dólares a 161.400.