Culminado el Master 1000 de Roma los deportistas se alistan para competir sobre la tierra batida de Roland Garros.
El Master 1000 de Roma terminó con la victoria del alemán Alexander Zverev ruso de padre, pero alemán de nacimiento, desde que su padre decidió saltar el muro. El tenista (alemán) que no está entre los mejores del circuito se llevó el torneo romano y no daba de contento trasladando las lágrimas a su mentor y lavándose la cara con cierta hipocresía. “Yo no lloró, llora él” disparó mientras en las gradas el padre del tenista celebraba con una inconfundible sonrisa que nada tenía que ver con el llanto que le atribuyó el ganador besando el trofeo.
Sea como fuere Zverev se llevó el título en Roma derrotando holgadamente al chileno Nicolás Jarry 6-4, 7-5. En realidad, el 1000 de Roma fue una sana demostración de lo bien que está el tenis de la nación latinoamericana, que no deja de ser buena noticia ante tanta descomposición política y económica que se escucha a diario por la región latinoamericana; menos mal el deporte le saca pecho a Chile. Otro chileno, Alejandro Tabilo, eliminó al N° 1 del deporte blanco Novak Djokovic, apenas comenzar el torneo con un apabullante 6-2, 6-3.
Roland Garros
Lo que se viene ahora son palabras mayores, el Roland Garros parisino que en formato moda, descolgó fotografías de los –dizque- dos más grandes del tenis de la era abierta: el español Nadal y el suizo Federer posando para una campaña de Louis Button, no dice mucho de quién es quién en el tenis, pero en la moda de las cuentas escarlatas. Ninguno de los dos más grandes, a cuenta de una magnificas fotografías ha renunciado a aceptar que se quedó en la cuenta 22 de torneos Grand Slam´s que en su mayoría 24 le corresponden al tenista serbio Novak Djokovic.
Sin importar tanto los Alpes que el ladrillo, se viene un atípico Roland Garros con problemas de cadera (Sinner), de articulaciones (Alcaraz) y de desencuentros (Djokovic). El torneo arranca el próximo 26 de mayo.