Al menos 10 corresponsales extranjeros acudieron a Bolivia para la cobertura de los acontecimientos del pasado miércoles. Las reglas se establecieron para que ninguno excediera la entrevista más allá de los 10 minutos, tiempo insuficiente para cualquier entrevista. Algunos en contacto con dat0s señalaron que observaron un presidente muy tranquilo que no ha dejado de alentar la tesis del “golpe de Estado” apuntando a Evo Morales y a enemigos externos e internos interesados en profundizar la crisis económica. Por su lado el ministro de Gobierno declaró a El País de España que él hubiera querido que los hechos del pasado miércoles hubieran servido para unir al MAS. Morales entretanto este domingo se ha encargado de hacer demostraciones de fuerza posesionando la versión del “auto golpe” y hasta se disculpó de los gobiernos que habían expresado su apoyo a Arce por la “intentona golpista”. El líder del MIR, el expresidente Paz Zamora, en un contacto con la prensa peruana aseguró que en Bolivia no hay democracia y llamó a los líderes latinoamericanos a no caer en la trampa de pronunciarse para defender la versión del “golpe”.
El New York Times, referente del periodismo norteamericano, no ha dedicado una sola noticia a los sucesos del miércoles pasado en Bolivia. Una de las versiones que tomaron cuerpo en la prensa local a partir de los despachos de la prensa internacional (éste de RT) ha sido lo señalado por el mismo Arce de que detrás del “golpe” hay intereses económicos lo que derivó inmediatamente consultas sobre el litio como recurso económico de interés mundial.
No queda claro ante esta declaración es si Arce se refería a factores de interés externos o si su análisis sobre el caso se trata más bien una formula interna de distracción apuntando nuevamente a los sectores de la derecha.
Arce dijo que la economía está demostrando grandes avances y que eso desata apetitos externos e internos. “Enemigos nacionales y extranjeros no quieren que avancemos porque se van a afectar sus intereses”. Sobre la postulación de Morales como candidato a las elecciones de 2025 a pesar de estar prescrito constitucionalmente, Arce eludió una respuesta concreta a la corresponsal de la Folha de Sao Paolo, se limitó a decir que “esa decisión es un deseo de él que actúa como dueño del instrumento político de las organizaciones sociales que decidirán quién representará al MAS en el proceso”.