Las costillas de los tres soldados detenidos en Chile

Por  Jhon Arandia

La polémica detención de los tres soldados bolivianos en Chile debe traernos a una definitiva reflexión de como se ha manejado el tema, de su verdadera dimensión y de realmente porque sucedió.

Primero la figura de los tres soldados, convertidos hoy a la fuerza, políticamente, en un show de masas, en héroes bolivianos.

¿Qué hicieron para merecer ese título?  ¿Hacerse atrapar por el enemigo?  Si, es eso lo primero que enseñan en los cuartele, la humillación que significa dejarse atrapar. Emocionados seguramente por cumplir una misión no se dieron cuenta de la “raya” que divide el territorio boliviano del chileno y de cómo los superiores los metieron en la boca del lobo.

Fueron persiguiendo contrabando y resultan “héroes del mar”, de ese mar que solo les “permitieron ver” desde un auto cuando obtuvieron su libertad domiciliaria. Ahora están comprometidos no solo a no volver un año a Chile, sino a estar en todos los 23 de Marzo en los actos centrales.

Chile cuida sus fronteras, de ello debemos aprender, pero llevó el tema a límites que mandaron al tacho su calidad de diplomacia, de valoración de los hechos y armó un show innecesario, injustificado para las características del mismo. Casi se le sale de sus manos el abuso psicológico que cometieron a los tres soldados, quedándonos  la duda si fue como venganza a los discursos del presidente Evo.

Las autoridades chilenas intentaron utilizar infructuosamente la defensa de su soberanía, reflejando lo más parecido a una vendetta, creyendo seguro que en algo subiría un Sebastián Piñera que está sumido en la impopularidad.

Las autoridades bolivianas calificaron el actuar chileno de político y se ocuparon de repetir el mismo error. Un proceder chileno exagerado y tres soldados héroes del mar en Bolivia. Es de elogiar que el gobierno nos los dejara solos y que producto de aquello los soldados denotaran una fuerza inquebrantable, pero aquí acaba todo?

¿Dónde están los superiores que ordenaron a estos soldados ir hasta ese lugar? O que simplemente los soltaron sin más condiciones. Primero, una sola arma para detener a varios contrabandistas que, se sabe, podrían estar armados hasta los dientes. Segundo, si bien no hay una raya dibujada para decir “hasta aquí es Bolivia” la contante pobreza franciscana de las condiciones de nuestros puestos militares en la frontera no pudo proveerles de alguna forma de ubicación más allá del ojo de vista de cómo volver. Entonces, hay responsables de más alto rango que no podrán decir que no hay condiciones para haber cometido semejante irresponsabilidad con los soldados. Pero estos se escondieron detrás de los actos de recibimiento, de las medallas y las flores.

Pero esto ahora si termina aquí, con el abuso Chileno, con héroes creados para intentar levantar el civismo boliviano y  tratar de ocultar responsabilidades del hecho  y seguramente con el deseo de procesar acá también a los carabineros chilenos que detuvieron a los nuestros soldados. Todo a costillas de 3 soldados bolivianos que formaran parte de un par de 23 de Marzos y que luego quedarán en el olvido en su valentía de cumplir una misión con sus propias manos.

COMPLEMENTACION: Días después de terminar de escribir esta columna, el Ministerio de Defensa ha comenzado a dotar de decenas de GPS  a unidades militares en la frontera, lo que ratifica lo aquí expresado, pero además con la satisfacción de que comienza a hacerse lo que tiene que hacerse, por fin.