¿Cuánto crecerán las economías latinoamericanas en 2013?
(…)Los pronósticos económicos suelen fallar, pero cuando ya pasaron ocho meses del año, las predicciones de bancos y consultoras van ajustándose más a la realidad de lo que ha sucedido en ese tiempo. Por eso, considero útil repasar las proyecciones que estas entidades hacen sobre las principales variables económicas para 2013. Recojo para ello el informe del 19 de agosto de la consultora británica Consensus Economics, que recopila los datos de bancos y consultoras y elabora promedios. Veamos primero los vaticinios sobre el crecimiento del PIB:
Crecimiento del PBI en 2013
País Porcentaje
Paraguay 11,1
Panamá 8,1
Perú 5,6
Bolivia 5,1
Chile 4,2
Colombia 3,9
Nicaragua 3,9
Uruguay 3,7
Costa Rica 3,5
Ecuador 3,5
Argentina 3,3
Guatemala 3,2
Honduras 3
México 2,5
Rep. Dominicana 2,4
Brasil 2,2
El Salvador 1,6
Venezuela -0,1
Lo primero que hay que aclarar es que el pronóstico de México ya ha quedado viejo. Con posterioridad al reporte de Consensus Economics, el Banco Central mexicano rebajó su perspectiva de expansión al 1,8%, con lo que después también los operadores del mercado adecuaron su previsión a ese número. Al parecer, perdieron algo del optimismo que había construido sobre México a partir de la caída de la estrella de Brasil en el mundo financiero, protestas sociales mediante. Pero las manifestaciones también han llegado ahora a las calles mexicanas. También a las colombianas. Pues ya no hay grandes economías latinoamericanas que estén libres de ellas, ya sean las gobernadas por la derecha o por el progresismo.
Al 19 de agosto, solo una de las firmas consultadas por Consensus Economics preveía un crecimiento del 1,8% para México, Vector Casa de Bolsa. Las demás eran más optimistas e incluso la consultora Bulltick hablaba de un 3,2%. En cuanto a los organismos multilaterales, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) preveía un 2,8% y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el 2,9%. Tiempo pasado. Pese a la recuperación de la economía de EE UU, factores internos de México, como el recorte en la obra pública, explican el menor crecimiento al esperado.
De la tabla también hay que aclarar que el dato de Argentina es difícil de interpretar, pues algunas firmas pronostican el número que el Gobierno informará oficialmente, en general sobreestimado, y otras, en cambio, predicen el crecimiento real de la economía. Así es que el 3,3% tal vez sería menor si no hubiese conflicto con las estadísticas públicas argentinas. Por ejemplo, Bulltick prevé un 5,5%, pero seguramente esté refiriéndose al cálculo oficial. Por el contrario, la consultora Econviews vaticina un 1,5%, con lo que se refiere a lo que ella considera como expansión real del PIB argentino. La CEPAL predice un 3,5%. La economía argentina, al igual que la del resto de Sudamérica, depende más de la evolución de una China un poco desacelerada y su consiguiente impacto algo negativo en el precio de las materias primas, mientras que México y Centroamérica están más atados al devenir de EE UU y su demanda de manufacturas. Además influyen factores internos: en el caso de Argentina, la economía está mejor que en 2012 porque Brasil también crece más, aunque no tanto como en el pasado reciente, pero también porque este año no ha habido una sequía que dañe la agricultura, como en el año anterior, y ha crecido la obra pública y un programa de fomento de la vivienda.
También debemos contextualizar el desorbitante crecimiento de Paraguay. No es que la economía de este país, uno de los más pobres de Sudamérica, esté protagonizando el tan ansiado despegue. Sucede que el año pasado se contrajo el 1,2% por una sequía y, como en 2013 el clima se ha normalizado, la cosecha y, por tanto, el PIB crecen de forma notable con respecto al crítico 2012.
El país que no aparece en la tabla es Cuba porque su economía no es analizada por bancos y consultoras. La CEPAL, en cambio, lo hace y vaticina una expansión del 3%.
Hechas estas aclaraciones, veamos, más allá de los promedios, quiénes son los más optimistas y pesimistas sobre el crecimiento de las otras principales economías latinoamericanas. En Brasil, algunos sostenían que la expansión llegaría al 2,5%: son las consultoras LCA y Datalynk y el banco Morgan Stanley. Y eso que ese vaticino fue previo a que el viernes pasado se informara una sorprendente expansión del 3,3% en el segundo trimestre. De todos modos, algunos datos de sectores como el del motor en el tercer trimestre dan señales de que ese ritmo no está manteniéndose. El más pesimista sobre Brasil era el banco HSBC, con un 1,9%. El FMI y la CEPAL coinciden en un 2,5%, mientras que la Corporación Andina de Fomento (CAF) baraja un 2,2%. Brasil no es tan dependiente de los precios de los productos básicos como el resto de Sudamérica (en menor medida, Colombia y sobre todo Argentina conservan algo de industria). Factores internos han contribuido a la desaceleración de los últimos años, como los altos tipos de interés o la apreciación del real, que contrasta con su actual devaluación.
En el minero Chile, la más optimista es la consultora Gemines, que pronostica un crecimiento del 4,6% en 2013, igual que la CEPAL. El más cauto es el banco JP Morgan Chase, con un 3,8%. El Banco Central chileno rebajó este miércoles la próyección de crecimiento a entre el 4% y el 4,5%.
En la petrolera Venezuela, la consultora Azpurua, García-Palacios & Velázquez vaticina una expansión del 1,5%. Es decir, prevé una recuperación después de la devaluación y caída económica de principios de año. Por el contrario, el banco Barclays Capital predice una contracción del 1,4%. La CAF, cuya sede está en Caracas, se refiere a una bajada del PIB del 0,3%, pero la CEPAL confía en un crecimiento del 1%. Aquí también el bajo crecimiento se explica en parte por los resultados de la política económica local.
En Colombia, Barclays espera una expansión del 4,2%, el pronóstico más alto para este país. En el otro extremo, JP Morgan Chase prevé un 3,3%. La CEPAL habla de un 4%.
Por último, en el minero Perú, el Centro de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Autónoma de Madrid coincide el Instituto Peruano de Economía en un vaticinio que llega al 6%. En cambio, Barclays lo rebaja al 5%. La CAF prevé un 5,4% y la CEPAL, un 5,9%.
Pero como la variable del PIB no es la única importante para analizar la evolución de una economía, en los próximos días nos adentraremos en otras más.