Remesas a América Latina llegaron a $US 60.000 millones
Los envíos de dinero bajaron 1% en el 2013, en comparación con los realizados en 2012.
Las remesas enviadas a los países de Latinoamérica y el Caribe por sus emigrantes alcanzaron en el 2013 los 60.000 millones de dólares, un leve descenso de 1 por ciento respecto a las del 2012. Paraguay, Ecuador y México fueron los países que registraron retrocesos notables.
Manuel Orozco, autor principal de un informe sobre el tema elaborado por la organización Diálogo Interamericano, destacó que “esta disminución no tiene que representar necesariamente malas noticias” y señaló que en algunos casos, como Paraguay, reflejan “una mejora de la economía local”.
El reporte, que se presenta anualmente, divide a los países de América Latina y el Caribe en tres grupos en función de las remesas enviadas por sus emigrantes. Según datos del Banco Mundial (BM), se calcula que en la actualidad cerca de 26 millones de latinoamericanos trabajan fuera de sus países, la gran mayoría en Estados Unidos.
En primer lugar, ubica a los países cuyos datos muestran una caída, con Paraguay a la cabeza, seguido por Ecuador y Perú.
En estos, se hace especial hincapié en la mejora de las economías locales frente a las dificultades que enfrentan España y Argentina, naciones que acogen gran cantidad de migrantes, y que está provocando que algunos hayan decidido regresar a sus países de origen.
El caso de México, que es el principal receptor de remesas del continente con 21.000 millones de dólares y que también ha visto la reducción de los envíos, responde a “las continuas deportaciones desde Estados Unidos y al declive en los ingresos entre los emigrantes mexicanos indocumentados”.
De hecho, Orozco destacó que el 80 por ciento de los indocumentados en Estados Unidos tiene ingresos menores que 25.000 dólares al año. México es el cuarto receptor global de remesas internacionales, solo por detrás de India, China y Filipinas.
El segundo grupo es de los que han experimentado una “modesta alza” en las remesas, por debajo de 2,5 por ciento, que está conformado por Colombia, Jamaica, República Dominicana y El Salvador, donde tres “factores interactúan: la baja migración, las crecientes deportaciones y el comportamiento del país de acogida”.
Por último, y en tercer lugar, los que registran una “notable alza”, la mayoría de ellos en Centroamérica: Honduras, Guatemala, Nicaragua, Costa Rica, así como Bolivia y Haití, donde se han visto crecientes niveles migratorios.
Como clave de cara al 2014, los investigadores recalcaron la evolución de la propuesta de reforma del sistema migratorio en Estados Unidos que podría mejorar las condiciones laborales y financieras de los más de 11 millones de personas que, se calcula, viven indocumentados en el país.
Orozco explicó, además, que existe una tendencia al alza en la migración “intrarregional” y los consiguientes envíos de remesas internas, con Brasil como “principal imán” en el Cono Sur.
Desde un punto de vista global, Dilip Ratha, gerente de la Unidad de Migración y Remesas del BM, destacó el potencial de cara al desarrollo de estas remesas y urgió a las entidades financieras abaratar y facilitar el acceso a estos servicios.
El costo global de los envíos de remesas se ha mantenido estable en los últimos años, con una cifra media de algo menos de 9 por ciento.