Evo Morales ofrece todas las facilidades al agro
Ambiciosas perspectivas del Gobierno, ausencias y protesta de activistas en contra de los transgénicos resumen la primera jornada de la cumbre del agro, inaugurada ayer en Santa Cruz por el presidente Evo Morales, quien ofreció cambiar leyes o mejorar tecnologías para elevar el PIB agrícola de 4.500 millones de dólares anuales hasta los 10.000 millones en los próximos cinco años.
Hubo ausencia de sectores productivos. De 120 representantes, la mitad pertenecía a la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO) y la otra a organizaciones sociales. El debate para relanzar al agro como uno de los pilares de la economía se organizó en cinco mesas y, aunque se impuso la agenda de la CAO, se puede prever que las conclusiones tendrán componentes tanto técnicos como políticos.
Para el vicepresidente Álvaro García, en la cumbre hay coincidencias y diferencias, pero remarcó que el evento apunta a lograr consensos, propuestas concretas y acercamientos.
Según el presidente de la CAO, Julio Roda, el de ayer fue un día histórico porque a partir del debate se podrá voltear la página de la agropecuaria en el país. Prácticamente, la mayor parte de la agenda presentada por los subsectores que integran esta organización es la base del análisis y debate en las cinco mesas de trabajo.
Por su parte, Rodolfo Machaca, ejecutivo de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb) que lidera el llamado Pacto de Unidad, dijo que de la cumbre saldrá un nuevo pacto agrario en el cual los pequeños productores propondrán políticas diferenciadas en virtud a la diversidad cultural y que, de manera incluyente, beneficien a todos los que se dedican al trabajo de la tierra.
Evento selectivo
En términos de asistencia, finalmente se cumplió lo que había adelantado hace tres semanas la ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Nemesia Achacollo, quien dijo que se iba a limitar la participación a 50 participantes de la CAO y otros 50 del Pacto de Unidad.
El salón Chiquitano de Fexpocruz, con capacidad para 1.500 personas y donde se realiza el encuentro, se dividió con cortinas en dos y para la apertura sólo se pusieron 200 sillas en la parte delantera. La trasera fue habilitada como comedor.
Las 200 sillas fueron todas ocupadas por los acreditados y por ejecutivos, técnicos y personal de apoyo de varios ministerios, viceministerios, de la ABT y el INRA. Era bastante notorio que, al margen de productores paceños, chuquisaqueños, tarijeños y benianos, no estuvieron en la cumbre representantes de otras regiones.
La CAO estuvo representada por los 18 subsectores productivos que la componen y además se sumó la delegación de la Confederación de Ganaderos de Bolivia (Congabol), en su mayoría directivos benianos. Un ejecutivo de esa instancia señaló que, aunque no estaban presentes, otros grandes sectores productivos de Cochabamba, como los avícolas, y de Chuquisaca habían trabajado previamente en la confección de propuestas.
Por parte del Pacto de Unidad, que aglutina a los pequeños y medianos productores de occidente, se entregaron pases para las confederaciones, asociaciones, pueblos indígenas, mujeres campesinas y otras organizaciones, en su mayoría afines al partido de gobierno.
En la puerta única de ingreso al salón Chiquitano hubo un inusitado control a los asistentes. Incluso los acreditados tuvieron que soportar una requisa minuciosa de los encargados de seguridad y, a pesar de la insistencia de la prensa, nadie quiso dar la lista ni la cantidad exacta de las personas que asistieron a la primera sesión de la cumbre.
Finalmente, antes de cerrar la primera jornada, afuera de Fexpocruz un grupo que se identificó como un colectivo urbano de defensa de medio ambiente protestó contra el uso de transgénicos, que es uno de los temas controversiales del debate.
Hubo muchos petardos y gritos a voz en cuello, pero no fue necesaria la intervención policial.
EVO LLAMA A CEPB
La Paz | Abi
El presidente Evo Morales pidió ayer al Ministerio de la Presidencia organizar un encuentro con la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) para pedir a ese sector que acompañe el crecimiento económico del país con una inversión de 3.000 a 4.000 millones de dólares.
Según Morales, la inversión pública para este año asciende a 7.700 millones de dólares, monto que requiere un acompañamiento de al menos 3.000 millones de dólares de inversión privada para fortalecer el crecimiento nacional.
“Algunos malos (empresarios) privados se quejan de la seguridad jurídica. Sin embargo, en las reuniones que yo tengo con algunos empresarios que quieren invertir, no se quejan (…)”, dijo.