Impiden acceso al contrato entre la FAB y LaMia

A 14 días del accidente que dejó 71 personas fallecidas, se desconoce el tenor del contrato entre LaMia y la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) para la prestación de servicios de mantenimiento de los tres aviones de la aerolínea, debido a que Juzgado Civil Comercial Número 13 que ve el caso dijo que es un documento privado.

La empresa LaMia arrendó las tres aeronaves del venezolano Ricardo Albacete, que intentó operar con una línea aérea del mismo nombre en Venezuela y en Brasil sin éxito. La nave siniestrada recibió servicio de mantenimiento de la FAB.

Sin embargo, a la fecha no se sabe el tenor del contrato para la reparación de las aeronaves. La FAB sólo se limitó a informar que recibieron servicio de mantenimiento de tipo C que está relacionado con las horas vuelo del avión y el manual de las aeronaves.

De las tres aeronaves que en 2014 llegaron a la FAB para recibir servicios de mantenimiento, solo la CP2933 consiguió el certificado de aeronavegabilidad por parte de la dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), mientras que los otros dos aviones (CP 2997 y CP 2998) permanecen en el hangar de esa institución militar.

Según la explicación brindada por el gerente general del servicio de mantenimiento de la FAB, Jaime Soria, de los dos aviones que están en el hangar de esa institución militar, sólo el CP 2998 recibió el servicio de mantenimiento “C” y está listo para operar, pero su tren está vencido, motivo por el que no consiguió el certificado de aeronavegabilidad.

El presidente de la empresa venezolana Línea Aérea Mérida Internacional de Aviación (LaMia), Ricardo Albacete, aseguró en una declaración anterior, durante una entrevista televisiva, que no es accionista ni empleado de LaMia Bolivia y que sólo se limitaban a arrendar los aviones que mantuvieron el mismo nombre de la aerolínea venezolana para no perder la pintura de las aeronaves.

LaMia comenzó a operar desde el aeropuerto Alberto Carnevali de Mérida (Venezuela) y dio el salto a Bolivia en 2014 con los aviones de Albacete, potentes, de cuatro turbinas y preparados para aterrizar en pistas cortas, lo que resulta perfecto para acoger vuelos chárter.

Según la FAB, existe un proceso legal pendiente iniciado por esa instancia para que LaMia pague una deuda que supera los 498 mil bolivianos.

El Juzgado Civil Comercial Número 13 de Cochabamba, donde reside el caso, sólo se limitó a informar que se trata de una demanda de emplazamiento para el reconocimiento de firmas entre el entonces gerente general del Servicio de Mantenimiento Aéreo Nº 2 de la FAB, coronel Alfredo Cuellar Mercado y el representante legal de LaMia, Gustavo Vargas Gamboa.

Cuando este medio intentó acceder a la carpeta completa del caso en esa instancia judicial, informaron que se trata de un proceso entre particulares, por lo que no podían ventilar información a otras personas fuera del caso. Mientras que el comandante de la FAB, Celier Aparicio, sostuvo que, aunque no tenían problema en facilitar el documento, la parte legal de esa institución le aconsejó no brindar mayores detalles al respecto debido al proceso de investigación pendiente.

SOBRE LOS AVIONES

Tras una inspección en el hangar de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) en Cochabamba, una comisión departamental de fiscales dispuso el precintado de las dos aeronaves de la compañía LaMia, con fines investigativos y posiblemente para que puedan ser utilizadas en el pago de las indemnizaciones.

La primera, de marca AVRO RJ 85 con número de serie E-2370 y matrícula CP 2997, tiene una capacidad para 95 pasajeros, tres tripulantes y cuenta con cuatro motores. El segundo avión, marca AVRO RJ 85 con número de serie E-2350 y matrícula CP 2998, con las mismas características de la anterior.