Yamabol: Un lugar dedicado a la música
La Paz tiene desde abril un edificio “Kando”. Los representantes de la afamada marca de instrumentos musicales Yamaha de Japón cuentan los origenes de Yamabol en Bolivia.
La historia de Yamabol es la historia de la música de su crecimiento y su evolución. En La Paz, pioneros de la representación de la marca, la familia Hada se empeñó en lograr la conjugación entre música y tradición. En 1959 los padres de Mirna y Mario Hada recibieron de manos del entonces presidente de la compañía de instrumentos musicales Nippon Gakki, que con los años se convirtió en Yamaha Corporation Japón, el encargo para hacerse cargo de la representación de la marca en Bolivia. En el almacén de la calle Yanacocha, donde aún funciona una de las tiendas de la compañía, que mantiene exclusividad en Bolivia, se iniciaron las primeras ventas de la afamada marca de instrumentos reconocida a nivel mundial.
55 años después, gracias a la noble y sana perseverancia de los Hada en hacer crecer la representación y el negocio, acaban de plasmar uno de sus más grandes sueños que ha sido dotar a la ciudad de La Paz con una tienda en la que además de la conjunción de música y tradición, reúne lo último en tecnología de alta gama con una variedad de productos de música que la sitúan entre las más sofisticadas tiendas especializadas de la región. Excelencia y calidad, dos palabras que definen con claridad cuando uno visita cada uno de los pisos del edificio al que los Hada le han puesto por nombre Kando. Son cinco pisos en los que los amantes de la música apreciarán lo último y más avanzado de la tecnología y el cuidado de un lugar que ha sido diseñado para que la instrumentazación adquiera un sonido de excelencia.
Yamaha ha crecido hasta convertirse en el mayor fabricante de instrumentos musicales en el mundo (incluyendo; pianos, tambores, guitarras, bajos, instrumentos de viento-madera y viento metal, percusión sinfónica, violines, violas, violonchelos, y sintetizadores), además de un fabricante líder de productos audiovisuales, periféricos y otros artículos de informática,
La estructura de esta genuina obra de arte de la arquitectura y el diseño está ubicada en la calle Claudio Aliaga esq. René Moreno del barrio de San Miguel, zona sur de La Paz. Ha sido construida como lo explican sus anfitriones con un sentimiento de satisfacción algo que llena y transmite. La expresión nipona Kando sincretiza la grandeza de la palabra. El edificio de dos alas alberga la más completa variedad de instrumentos Yamaha y las marcas que con el tiempo fueron absorbidas por la fábrica. Otros productos del grupo presente en la tienda son Steimberg, Audio casero, Audio Technica, audio para instalaciones y marcas, Remo, Köning & Meyer, Hohner.
Cada piso del Edificio “Kando” está distribuido con un exquisito sentido de orden. En la planta baja toda la variedad de instrumentos musicales, los de percusión, los de viento y cuerda, además de accesorios de la tecnología Yamaha y equipos Steimberg están perfectamente distribuidos en sus espacios abiertos o separados por vitrinas que permiten la observación.
El mezannine ha sido orientado para los equipos de sonido, microfonía, audio técnica, sistemas sensurround que indistintamente de las opciones pueden ser instalados en bancos, boutiques, cafeterías, empresas y por supuesto para distintos escenarios en los que se requiera calidad acústica. Dos ingenieros de sonidos se encargan del estudio y el montaje de los aparatos, además del mantenimiento de cada uno de estos sistemas tecnológicos.
La familia Hada cuido los detalles e ingenieros y arquitectos cumplieron las exigencias. No existe un solo ambiente que no éste aislado con materiales nobles que lo hacen exento de los ruidos ajenos. Explican que se cuidaron todos y cada uno de los detalles para aislar el edificio: pisos, techos, puertas y ventanas, todos sus ambientes con el mismo concepto. La sorpresa queda reservada para los pisos de la planta alta en la que se han montado salones exclusivos para conciertos y un Centro de Música donde los interesados pueden acercarse a una experiencia diferente con la música. Aulas para la formación completa en teclado, guitarra eléctrica y acústica; piano, canto, violín y batería. Y para cerrar la nota Mirna Hada se atreve a decirlo en voz alta sin salir del perfil bajo que es su característica. “Este es un edificio dedicado a la música”.