PPK y otros 5 presidentes de AL que no terminaron sus mandatos por acusaciones de corrupción
La historia se repite una y otra vez.
Los casos de presidentes que renuncian, escapan de sus países o son destituidos por escándalos de corrupción han sido frecuentes en las últimas dos décadas en América Latina.
Solo en los últimos cincos años, han caído tres jefes de Estados en la región por estos motivos.
El caso más reciente tuvo lugar el miércoles, cuando el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, se vio obligado a dimitir tras una sucesión de acusaciones de corrupción y sobornos.
Aquí te contamos algunos de los casos más sonados de presidentes latinoamericanos que perdieron el cargo por acusaciones de corrupción en lo que va de siglo XXI.
1- Pedro Pablo Kuczynski (Perú)
El presidente peruano dimitió en medio del escándalo de compra de votos de parlamentarios que sacudió al país desde inicios de esta semana.
Fue el punto culminante de una larga sucesión de acusaciones que tuvo uno de sus capítulos principales en diciembre pasado, cuando el Congreso peruano votó en contra de la destitución del gobernante.
En esa ocasión Kuczynski -a quien acusa de haber recibido sobornos de la constructora brasileña Odebrecht- se salvó de perder su cargo, pero otra votación de vacancia le esperaba este jueves.
Su renuncia se precipitó después de que se publicaran unos videos y audios que mostraban a Kenji Fujimori y otros congresistas intentando supuestamente comprar el voto de algunos parlamentarios para evitar la destitución del mandatario en el Congreso.
En diciembre pasado Odebrecht, que está acusada de pagar sobornos en varios países de América Latina, informó al Congreso peruano que pagó US$4,8 millones a dos firmas de asesoría vinculadas a Kuczysnki.
El mandatario niega todas los señalamientos en su contra.
2- Dilma Rousseff (Brasil)
La sucesora de Luiz Inacio Lula de Silva (ahora también acusado de corrupción durante su mandato) fue elegida para la presidencia de Brasil en 2010 y fue reelegida cuatro años después.
Pero en el primer año de su segundo mandato, las cosas comenzaron a torcerse.
El Congreso le inició un largo proceso de impeachment o juicio político por presuntos delitos “de responsabilidad”.
La acusación central en su contra fue que violó normas fiscales, maquillando el déficit de su gobierno.
La denuncia aludió en particular a lo que en Brasil se denominan “pedaladas fiscales”, que implican el uso de fondos de bancos públicos para cubrir programas de responsabilidad del gobierno.
Ocho meses y 17 días después de su inicio, el proceso de impeachment contra Dilma Rousseff llegó a su fin en agosto de 2016 y la mandataria fue destituida.
3- Otto Pérez Molina (Guatemala)
Llegó a la presidencia de Guatemala en enero de 2012 y tres años después se vio obligado a renunciar luego de que el Congreso le retirara su inmunidad y un fiscal ordenara su detención.
Los delitos que se le atribuyen son asociación ilícita, cohecho pasivo y fraude a la Superintendencia de Administración Tributaria, en un caso conocido como “La Línea”.
De acuerdo con las investigaciones, se cobraron sobornos a empresarios y usuarios de distintas aduanas del país a cambio de modificar lo que los importadores debían pagar al fisco.
También dimitió la entonces vicepresidenta, Roxana Baldetti, por “motivos personales”, aunque luego fue encarcelada por el mismo escándalo de corrupción, que implicó a más de 40 funcionarios del gobierno.
Pérez Molina -quien negó los cargos en su contra- se encuentra en prisión a la espera de ser juzgado.
4- Lucio Gutiérrez (Ecuador)
Comenzó su mandato en enero de 2003 y en abril de 2005 huyó a Colombia luego de que una corte de Quito ordenara su detención.
Las acusaciones de corrupción en su contra comenzaron con la filtración de un caso de desaparición de armas de los cuarteles que, supuestamente, habían sido vendidas a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia.
Luego siguieron otras de sobreprecio y desvío de productos destinados a comunidades indígenas y cuestionamientos por haber utilizado recursos públicos en apoyo del partido de gobierno y sus candidatos durante las elecciones seccionales de Ecuador de 2004.
Las protestas contra su gobierno se hicieron crecientes y los militares finalmente cercaron el palacio de gobierno y Gutiérrez se vio precisado a huir en un helicóptero.
5- Gonzalo Sánchez de Lozada (Bolivia)
Gobernó Bolivia por dos periodos: primero de 1993 a 1997 y luego de agosto de 2002 hasta octubre de 2003, cuando huyó a Estados Unidos tras una revueltas que se dieron en llamar la Guerra del Gas.
El inicio de su mandato se vio estremecido por un intento de aumento de los impuestos, denuncias de enriquecimiento ilícito y el uso de la política en beneficio de sus negocios.
Dos años después, las presuntas intenciones de exportar gas boliviano por puertos chilenos a la costa oeste de Estados Unidos, México y Chile fue la chispa quemó el polvorín de su gobierno.
Tras su huida a Estados Unidos, el fiscal general de Bolivia alegó que Sánchez de Lozada había sustraído de manera ilegal alrededor de US$22 millones de las arcas del gobierno.
El expresidente afronta actualmente una demanda civil en Estados Unidos por las muertes ocurridas durante las protestas de 2003.
6- Alberto Fujimori (Perú)
Fue el primer presidente peruano en perder el puesto por un caso de corrupción.
Dimitió por fax desde Japón, donde se asiló por años para evitar ser juzgado por la justicia peruana.
Sin embargo, el Congreso no aceptó su renuncia y votó su destitución.
El escándalo de corrupción se conoció tras la publicación de unas grabaciones conocidas como “vladivideos”, una colección de videos caseros elaborados por Vladimiro Montesinos, hombre cercado a Fujimori, que mostraban supuestos intentos de soborno a dirigentes políticos, empresas, medios de comunicación y gobiernos locales.
Durante una visita a Chile en 2009 Fujimori fue encarcelado y luego extraditado a Perú, donde fue condenado a 25 años de cárcel.
El exmandatario fue indultado por Kuczynski en diciembre pasado por “razones humanitarias”.