Julio Novillo. El extraño potencial de un hombre nacido para triunfar
Como si algo sobrenatural atravesará la mente de los cruceños contagiados por un ritmo inusitado que ubica Santa Cruz entre las ciudades que más crecen en el continente. Las migraciones han tomado un curso sorprendente. Se calcula que hasta el año 2030 duplicará su población. Alrededor de 80.000 personas se trasladan a Santa Cruz cada año apostando por su desarrollo. Ese motor ya no puede parar. Un progreso que no parece tener límites ni fecha de vencimiento.
Llegamos a las oficinas de Julio Novillo, responsable de la planificación de la ´Nueva Santa Cruz´. Uno de los más grandes empresarios de la construcción de Bolivia apunta la órbita de beneficios por los que trabaja hace 23 años. “Esta oficina ya no estará aquí en dos años porque nos trasladaremos a la ´Nueva Santa Cruz´”, afirma. Una ciudad de sus sueños; ha superado todas las pruebas y está a punto de iniciar el periplo de convertirse en la primera ciudad integrada del Continente. Parques, plazas, edificaciones de alto nivel, servicios de transporte y conexiones modernas son apenas algunos beneficios que este hombre sentado a mi izquierda ha pensado para convertir Santa Cruz en uno de los polos de desarrollo más avanzados. Una ciudad de la que todos hablan en voz alta. No hay nada que ocultar. Este ritmo frenético ha contagiado a todos.
Julio Novillo es el nombre que todos pronuncian en voz alta. “Si para Julio para todo”, dicen algunos empresarios con los que conversamos, trazando el perfil de un hombre de extracción humilde nacido en Comarapa. El rumor que menciona su nombre crece y enseña que los desafíos son posibles. Julio Novillo está alegrando la vida de miles de personas. Ya no hay camino de retorno. Él explica este desarrollo por etapas. Cuando con escasos 21 años, recién salido bachiller, comenzó a percibir las “necesidades insatisfechas” de la gente que acudía a las oficinas de la Junta de Vecinos para resolver un loteamiento, una intervención o buscando convertirse en propietario de una pequeña parcela donde construir su vivienda.
“La ciudad crecía de manera desordenada, sin planificación a puro asentamiento”, afirma. Hasta que se le ocurrió desarrollar proyectos populares para gente de escasos recursos. “Básicamente fue la interpretación de una necesidad. A partir de entonces no solo nosotros sino el resto de las empresas que se dedican a proyectos de desarrollo inmobiliario eliminamos los problemas de avasallamientos; se podría decir que ya no se escucha nada parecido en Santa Cruz”.
¿Esa interpretación de una necesidad que menciona lo ha llevado a sitiales de mucha expectativa? Los grandes proyectos en el mundo se los hace en base a la interpretación de las necesidades de la gente; darles una satisfacción y resolverles el tema de la vivienda. Los grandes proyectos son esos, si uno cubre las necesidades de la gente resulta un negocio bueno para todos porque participa la gente, el Estado y nosotros como empresa; no solo se resuelve un problema de vivienda sino que se gestiona la autocapitalización de cada individuo. Los lotes que les vendíamos a nuestros clientes en dos, tres o cuatro mil dólares en varios proyectos, son lotes que ahora no cuestan menos de 20 mil. Antes de que la gente acabe de pagar su crédito su lote cuesta cinco a seis veces más de lo que pagó. Esa persona ya tiene una garantía para recurrir a una institución financiera.
¿De qué universo de personas estamos hablando?
En este momento tenemos más de 100 mil clientes, pero debemos tener unos 50 mil que ya han recogido la titularización de su vivienda.
¿Ha sido complicado gestionar la resolución de un problema que en otras circunstancias debería ser atendido por el Estado? Los que alguna vez hemos vivido en alquiler sabemos que un cuarto sirve de todo; la gente vive hacinada, para usar los servicios básicos se hace turnos con varios inquilinos alrededor. En algunos barrios de Santa Cruz, había ese problema que, al resolverse, genera un patrimonio y su independencia en todos los aspectos de la vida, inclusive el de su seguridad. Además, no solo le damos la vivienda a la gente, sino agua, luz, servicios, escuela, campos deportivos, pavimento, hospitales… Estamos apoyando con proyectos para la generación de oportunidades. Un ejemplo de lo que le digo es el Parque Industrial Latinoamericano. Es un proyecto para 1.500 industrias de las que 1.000 han comprado su terreno; más de la mitad son empresas extranjeras, eso va a generar muchas oportunidades de negocios.
¿Qué siente vender sus proyectos a extranjeros? Para establecerse en otro país las empresas estudian el mercado, las ventajas y desventajas competitivas en términos de transporte, ubicación; no es como comprar un lote o un departamento. Nadie puede ponerse una industria en la espalda para llevársela. Las empresas de afuera están trayendo recursos, están haciendo inversiones, van a generar trabajo, aportan trasferencia de tecnología. Este tema de los parques industriales se desarrolla con incentivos fiscales. Si lo que ha ocurrido hasta ahora en Santa Cruz ha sido sin planificación es porque realmente esta ciudad es altamente atractiva para la inversión y eso cambia la vida de la gente.
Esto lo ha llevado aún más lejos, a desarrollar la “Nueva Santa Cruz”. Otro concepto es que una ciudad no puedes construir de puro rico o de puro pobre, ¿dónde ha visto eso? Un rico necesita quien le preste servicios, entonces lo que se ha hecho es una etapa de este desarrollo que yo llamo ´Ciudad Productiva Integrada´ y dentro de ese desarrollo hemos dejado en la ciudad de Santa Cruz un espacio para la Nueva Santa Cruz que es un proyecto que tiene características muy especiales. La Nueva Santa Cruz es una ciudad altamente competitiva. Ahora los países ya no compiten entre países, sino ciudades entre ciudades, en términos tecnológicos de sostenibilidad vamos a ser una ciudad competitiva. El concepto de este tipo de ciudad tiene varios componentes: industria de la diversión, industria del entretenimiento, ocio, actividad financiera; son conceptos modernos que esperamos hacerlos realidad. Esto ya está en marcha, pero quiero aclarar que no es un invento nuestro. Esto es lo que está ocurriendo en el mundo.
¿Esto ha visto en otras partes del mundo y ha dicho este modelo lo copio en Bolivia? Hay modelos de desarrollo en Estados Unidos, en Corea en los países asiáticos y si le sacas lo bueno a todas puedes hacer lo mejor aquí. Se hace una ciudad con todas las clases sociales, convivir y complementarse mutuamente. La nueva Santa Cruz recibirá gente de clase media, media alta; ellos requieren servicios.
¿La Nueva Santa Cruz no es una burbuja? Una ciudad inteligente es contraria a una burbuja, no duerme siempre esta despierta, una ciudad inteligente no se aísla compite con el resto, es un ente vivo es una máquina de generar recursos para el bienestar de sus habitantes. Para generar ese concepto tienes que ser generador de inversiones; las ciudades inteligentes no la construye una empresa es la participación de mucha gente. Le voy a dar un ejemplo de lo que ya hemos hecho: el Parque Industrial Latinoamericano tiene 1500 industrias, hay inversiones de un millón de dólares, de medio millón de dólares de 10, 15, 20 millones de dólares, una de las industrias más grandes del Estado que es la Termoeléctrica ha puesto más de 600 millones de dólares en ese Parque Industrial. Qué quiere decir eso, que habrán inversiones de 3.000 millones de dólares, nosotros hemos puesto 25 millones que nos ha costado la tierra, hemos puesto 10 millones que nos prestó un banco y 75 millones de una inversión. Hemos provocado que se hagan cosas. Le voy a dar otro ejemplo: Dubai. En menos de 10 años tiene casi 12 millones de habitantes, una de las más modernas del mundo, sabe de dónde esa la plata, menos del 20 por ciento es plata del petróleo, todo lo demás es una provocación de inversión extranjera, es una provocación inteligente porque no puedes provocar y retirarte; además tienes en el lugar, los tiempos y la gente que corresponde. Esas cosas se hacen.
¿Qué ha hecho para provocar? Hemos visto todas las cosas que pasaban en el país; crisis, bonanzas, pero Santa Cruz es un lugar en el que con o sin hacer lo que estamos haciendo va a ser una metrópoli. No hay que ser demasiado inteligente para darse cuenta que es lo que no hay que hacer. La oportunidad de crear una ciudad de cero es que la puedes planificar, puedes soñar y hacer las cosas cada vez mejor.
¿Dónde se encuentra la Nueva Santa Cruz? Está detrás del aeropuerto de Viru Viru, a cinco minutos del Cambodromo, es una ciudad del tamaño de la actual Santa Cruz del cuarto anillo para adentro; 100 mil hectáreas, pero hay cosas que queremos ponerle, por ejemplo tres disparadores que son claves en cualquier negocios, estamos en la identificación de eso, estamos viendo que ideas extraordinarias vamos a desarrollar. La Nueva Santa Cruz es la nueva ciudad planificada.
¿Cómo se hace creíble a los ojos de la gente? Lo que no tienes que hacer es no fallarle a nadie y si tienes alguna dificultad poner la cara y no poner a pelearte con nadie, para pelear se necesita más de uno, hay cosas tan importantes a que dedicarse; entonces nuestra provocación es trabajar, ser honesto, con principios, valores; no fallar a nadie y sobretodo que sea pensado para todos. Cuando todo el mundo gana, uno es feliz; cuando alguien quiere hacer todo solo está perdido. En nuestro negocio gana muchísimo la gente, resuelve sus problemas. No es suficiente querer algo, usted tiene que tomar la decisión de hacerlo, eso es más allá de querer simplemente. Si toma la decisión y viene cargado de compromiso, eso ya significa mucho. Lo hago porque lo hago y lo hago por sobre todas las cosas. Esta es una decisión tomada y la vamos a hacer, no es solamente una opción de negocio; estamos 13 años en esto, cuatro años en estudio de ingeniería; vamos a convertir esto en un paraíso.
¿Por qué escogió Santa Cruz? Santa Cruz tiene sus proyecciones, es el centro de Suramérica; terrenos de estas características no se los puede conseguir ni en la Paz, ni en Cochabamba; Santa Cruz tiene una potencialidad enorme que hay que saber administrar, que va a ser beneficioso para todo el país. Cuando generas riqueza se reparte a todos. Hay que hacer una ciudad que genere recursos, gestione negocios. Estamos frente a una oportunidad única en esta zona del Continente. Esperamos que se apruebe la ficha industrial y comenzamos a construir.