Luis Barbery: Seguiré trabajando con el Gobierno sin que eso me haga oficialista
Luis Barbery es presidente de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz y candidato a la Confederación, en las elecciones que tendrán lugar este 13 de marzo. Fuentes extraoficiales afirman que ya las alianzas están establecidas y que es el virtual ganador. Sus rivales, en contrapartida, le sindican su excesivo acercamiento con el Gobierno, sobre todo tras los acuerdos de la producción de etanol (Barbery es empresario azucarero). En este entrevista habla de éste y de otros temas (la semana pasada, este medio publicó también la entrevista con su eventual rival, Marco Antonio Salinas).
– La elección del presidente de la CEPB requiere de un largo proceso de acercamientos y alianzas, y hasta donde tenemos entendido, la votación es sólo una formalidad, ¿usted ya cuenta con el respaldo de una mayoría de las entidades empresariales? ¿Estamos hablando con el futuro presidente de la CEPB?
– No, yo creo que tenemos que esperar al miércoles a que se realice la elección. Hemos venido trabajando para llegar a la dirección de la Confederación. Lo que hemos tenido estos días son visitas, intercambios, recoger preocupaciones, definir coincidencias y pensar en el futuro del país.
– ¿Qué aspectos priorizará en la agenda de la CEPB?
– Debemos trabajar en contacto permanente con todos los sectores. Hay temas que son transversales, otros particulares, pero se va a dar prioridad al diálogo, a la propuesta constructiva, que es lo que necesitamos, estar todos unidos.
– ¿En qué se distingue de su rival en esta elección, Marco Antonio Salinas?
– Él tiene sus puntos de vista, nosotros los nuestros. Hemos conformado una plancha en la que hemos tratado de dar la mayor representatividad a las regiones, a los sectores y tratado de rescatar los mejores elementos de cada actividad.
– ¿Cuáles van a ser sus relaciones con el Gobierno?
– Con el Gobierno vamos a trabajar todos los temas en los que podamos abordar soluciones y esperemos que se puedan desarrollar los necesarios niveles de confianza.
– Cuando los empresarios de Bolivia se pronunciaron por el respeto al 21F, usted estuvo distante, ¿por qué?
– Creemos que desarrollamos una representación totalmente empresarial y para la parte política están los sectores llamados a eso. Los empresarios nos han pedido representarlos en temas que tienen que ver con el desarrollo de Bolivia y en la medida que pueda haber cabida para trabajar en esa dirección estamos allí para apoyar.
– ¿No cree que el respeto a la democracia es también importante para el desarrollo económico del país?
– Es importante en la medida en que lo practicamos y precisamente estamos en un proceso democrático al interior del empresariado privado.
– Los empresarios mostraron también una línea dura frente al Gobierno por las políticas económicas asumidas, como el segundo aguinaldo, empresas sociales, etc. ¿Seguirá esa línea?
– Vamos a trabajar para persuadir al Gobierno de que ciertas medidas no son lo mejor que necesita Bolivia. Esperemos tener la capacidad de persuadirlo con propuestas conducentes precisamente a lograr mejores días y un mejor relacionamiento del sector empresarial con el Gobierno.
– Otra de las críticas que le hacen es el acuerdo de la producción del etanol, esto lo acercó con el Gobierno…
– No, yo creo que el proyecto del etanol ha contribuido efectivamente, pero los acercamientos han sido anteriores y un proyecto tan importante se ha podido materializar precisamente por esos acercamientos y por la confianza que se ha conseguido generar de ambas partes.
– ¿No lo hace oficialista todo esto?
– No, yo no creo que trabajar con el Gobierno que esté en funciones sea necesariamente ser oficialista. Yo cumplo con representar adecuadamente y como debe ser al sector empresarial privado.
– ¿Va a seguir trabajando con el Gobierno?
– Si queremos tener un impacto positivo con el país tenemos que seguir trabajando con el Gobierno, a través de inversiones, generaciones de empleos, y eso no me hace oficialista.
– ¿El convenio colectivo con los azucareros es conveniente?
– Es positivo por donde uno lo mire. Significa inversiones millonarias a través de un período de asimilación del programa. Más que duplicar la frontera agrícola de cultivos de cañas, significa generar más de 27 mil empleos, inversiones de 1.600 millones de dólares de los sectores agrícola e industrial, además de la inversión de otros 400 millones de dólares de YPFB adecuando sus instalaciones para este proyecto. No es algo que se va a hacer de un día para otro, son varios años. En la parte comercial, igualmente se están haciendo inversiones importantes.
– ¿Cómo se tendría que conciliar la expansión de la frontera agrícola con el cuidado ambiental?
– Los ingenios azucareros tienen un radio de acción muy limitado. El costo de transporte de la materia prima es muy alto y no se va a desmontar ni una sola hectárea de floresta para el cultivo de caña de azúcar. En Bolivia se siembran por campaña alrededor de un millón de hectáreas. El cultivo de caña de azúcar es tan intensivo en utilización de mano de obra y efecto multiciplicador de la economía, que tiene alrededor de 175 mil hectáreas, y la proyección de crecimiento es de 300 mil hectáreas. No va a haber impacto sobre el medio ambiente que no sea positivo.
FICHA PERSONAL
Luis Barbery Paz. Postulante a la presidencia de la CEPB
Fecha y lugar de nacimiento: 5 de mayo de 1955 en Santa Cruz
Ocupación: Ingeniero industrial y administrador de empresas.
Trayectoria: Preside la Corporación Unagro. Fue presidente de la Cámara de Industria (Cainco) en dos gestiones consecutivas. Llegó a la presidencia de la Federación de Empresarios Privados de Santa Cruz (Fepsc) en 2015 y 2017. También es conocido en el mundo de las carreras de autos y participó en el Dakar.