La Paz: Construirán bóveda y viaducto para habilitar la Av. Libertad
Una bóveda y un viaducto son los dos proyectos que ejecutará la Alcaldía de La Paz para habilitar el paso a la avenida Libertad y el Puente Kantutani -uno de los Trillizos. Todo este plan se comenzará a ejecutar este año.
El 30 abril, una parte de la avenida Libertad quedó destruida a causa del deslizamiento San Jorge – Kantutani. El sector de inicio de la vía conectaba de forma directa con el puente que ahora está cerrado.
“Hay una propuesta para habilitar la vía a mediano plazo. Es muy probable que pueda ser para la siguiente gestión, de hecho debemos comenzar primero con la construcción de la obra hidraúlica (el embovedado) del río Cotahuma y luego iremos subiendo”, dijo el secretario municipal de Gestión Integral de Riesgos, José Pacheco.
Hasta antes del deslizamiento, que dejó 68 casas colapsadas, la avenida Libertad conectaba las laderas Este y Oeste de la ciudad de La Paz. El puente Kantutani de 233 metros unía las zonas de San Jorge con Sopocachi.
Los puentes fueron inaugurados en noviembre del año 2010. La obra demandó una inversión de 19,5 millones de bolivianos, monto financiado por la CAF.
Pacheco explicó que la construcción de una bóveda demandará unos 10 meses. Cuando esos trabajos tengan un 50% de avance se paralizarán por la época de lluvias. “Eso nos obligará a concluir la obra el siguiente año. Si bien realizaremos actividades paralelas, todo está en función de la construcción del (embovedado del) río Cotahuma”, añadió.
Una vez finalizada la bóveda, la comuna comenzará la construcción del viaducto que, según los diseños preliminares, tendrá la forma de una “S” y estará pegada al límite del actual deslizamiento. “Tenemos que acercarnos al anterior nivel o de lo contrario no estarían conectadas varias vías que se quedaron sin salida”, añadió Pacheco.
Proceso de estabilización
Con maquinaria pesada, obreros municipales realizaron “un peinado” para conformar las banquinas (terrazas). También ejecutaron trabajos de evacuación de las aguas de los sistemas sanitarios que quedaron atrapadas en medio del desastre y se formaron como “piscinas negras”.
Como la zona fue emplazada en un exbotadero municipal, los obreros aún retiran la basura que salió luego del deslizamiento. Para estabilizar el sector, los funcionarios reemplazan los residuos por tierra.
“Generaremos terraplenes para que pueda ingresar la maquinaria pesada. Tenemos que bajar el material que está suelto. Hay grietas en los taludes e iremos bajando”, precisó.
Incluso la Secretaría de Riesgos evalúa si es factible habilitar una vía de ingreso vehicular provisional hacia los inmuebles que quedaron incomunicados en Valle Concepción, la parte alta del deslizamiento. Este ingreso podría ser por la avenida Libertador pasando por el puente Kantutani. “Se verá la factibilidad hasta el fin de semana. Probablemente sea una vía temporal”, precisó.
Algunas casas podrán salvarse
Las áreas aledañas al deslizamiento fueron divididas según el grado de riesgo. En un inicio, la Alcaldía dijo que en la franja roja hay 22 casas que deben ser demolidas porque están en el límite. Pero, Pacheco abrió la posibilidad de que esta cifra sea menor.
“Es posible que sean menos de las 22, estamos definiendo en este momento. A medida que entremos con maquinaria pesada, puede haber desajustes (rajaduras) en algunas viviendas. Si bien podemos indicar que no se van a demoler, pero con el mismo movimiento es posible que se presente algún problema”, afirmó el técnico.
En algunos inmuebles es posible demoler sólo una parte de la estructura. “Trabajaremos con algunos de los dueños para que vayan trabajando en el mejoramiento de sus edificaciones”, concluyó Pacheco.