Nike ya no sancionará económicamente a las atletas embarazadas
Nike, el gigante de la ropa deportiva, recibió múltiples críticas por el trato que les daba a las atletas embarazadas que patrocina. Es por eso que el viernes 24 de mayo se comprometió a garantizar que esas deportistas no serán penalizadas económicamente.
Nike afirmó que durante doce meses no aplicará las reducciones en los pagos por desempeño a las atletas “que decidan tener un bebé”, y prometió añadir cláusulas que refuercen esta política en los contratos que la empresa celebra con las deportistas patrocinadas.
En artículos y videos de la sección de Opinión de The New York Times publicados a lo largo de las últimas dos semanas, corredoras actualmente patrocinadas por Nike o que alguna vez fueron patrocinadas por esa empresa, como Alysia Montaño, Kara Goucher, Phoebe Wright y Allyson Felix, recordaron las difíciles decisiones que tuvieron que tomar al considerar la idea de tener hijos y describieron las penalizaciones económicas a las que se enfrentaban las deportistas de Nike si se embarazaban.
“Hemos reconocido que Nike, Inc. puede hacer más y hay una oportunidad importante para que evolucione todo el colectivo de la industria del deporte con el fin de apoyar con mayor eficiencia a las mujeres deportistas”, comentó Sandra Carreon-John, una portavoz de Nike, en una declaración por correo electrónico el viernes de la semana pasada.
La mayoría de los contratos de patrocinio para los corredores (que constituyen la mayor parte de sus ingresos) fijan requisitos de desempeño específicos para la remuneración. Si estos no se cumplen, por cualquier motivo, los patrocinadores pueden reducir el pago de un atleta. Por lo general, no hay excepciones por licencia de maternidad.
En un video del Times, Montaño, una mediofondista que tuvo una famosa participación en el Campeonato de Atletismo de Estados Unidos en 2014 con ocho meses de embarazo, contrastó la estrategia de mercadotecnia de Nike con su trato hacia las deportistas embarazadas.
“Si queremos ser deportistas y madres, pues es una locura”, dijo Montaño en el video, refiriéndose al comercial de Nike “Dream Crazier” (Sueña locuras), que pone énfasis en el empoderamiento femenino y usa una narración de la famosa tenista Serena Williams, quien tuvo a su primera hija en septiembre de 2017. “Cree en algo”, dijo Montaño en el video. “Aunque eso signifique sacrificarlo todo, como tu contrato, tus ingresos”.
Felix, una velocista que ha ganado seis medallas olímpicas de oro y es una de las deportistas más prominentes de Nike, escribió que la empresa se había negado a garantizar contractualmente que no sería sancionada si su desempeño decaía durante un tiempo después de quedar embarazada.
“Si yo, una de las atletas más comercializadas de Nike, no pude tener garantía de esta protección, ¿quién podrá tenerla?”, escribió.
En otoño pasado, Felix tuvo a su primer hijo, una niña, y señaló que se sintió presionada para regresar a las pistas de inmediato, a pesar de haber sido sometida a una cesárea debido a una preeclampsia que puso en riesgo su vida.
En un memorando dirigido a todos los trabajadores de Nike, Amy Montagne, vicepresidenta de la empresa y directora general de propiedades globales, hizo referencia a Montaño y a Felix y escribió que le “entristecía” escuchar la experiencia de Felix con la empresa.
El primer medio en revelar el memorando de Montagne fue Bloomberg.
Montagne escribió que en 2018 Nike se dio cuenta de que las metas de desempeño tenían un efecto desproporcionado en las deportistas que se embarazaban y que la empresa había comenzado a crear una política oficial de maternidad. No obstante, escribió, la compañía no informó a sus atletas patrocinadas acerca de ese esfuerzo.
“Este ha sido un suceso aleccionador”, escribió Montagne respecto a las críticas, y añadió que la empresa ya había comenzado a comunicarse con sus deportistas patrocinadas para darles a conocer los cambios en las políticas.
Los cambios se presentan un año después de que el Times, con base en entrevistas a más de 50 trabajadoras de Nike, actuales y antiguas, reportó las quejas de mujeres que fueron acosadas, marginadas y cuyas carreras fueron boicoteadas por la compañía. Al menos once ejecutivos de Nike, incluyendo al segundo hombre más poderoso de la empresa, fueron destituidos en medio de acusaciones por conducta inapropiada y como consecuencia de las investigaciones derivadas.