Equipo Bolivia cierra su mejor participación

Los XVIII Juegos Panamericanos Lima 2019 bajaron el telón anoche en medio de una fiesta, con un Equipo Bolivia que vivió su propio festejo al cerrar su mejor participación con cinco medallas, en la cima de ellas la primera presea dorada de su historia.

El ráquetbol, tal como sucedió en ediciones pasadas de los Juegos Panamericanos, no defraudó y fue la disciplina que más medallas cosechó en Lima 2019, cuatro de las cinco obtenidas.

Bolivia debutó en los Juegos Panamericanos en Winnipeg 1967 y después de 13 participaciones no había podido subirse a lo más alto del podio hasta Lima 2019.

Su primera medalla la consiguió en La Habana 1991, la de plata con el taekwondista William Arancibia. En Santo Domingo 2003 sumó dos de bronce con el karateca Luis Bolívar y el ciclista Benjamín Martínez.

En Guadalajara 2011 entró en acción el ráquetbol y Bolivia sumo dos de bronce con María José Vargas y el equipo femenino conformado por Carola Loma y Jenny Daza.

En Toronto 2015 el trío Conrrado Moscoso, Roland Keller y Carlos Keller sumaron las tres medallas para Bolivia, una de plata en dobles con Conrrado y Roland y dos bronces con Moscoso en singles y por equipos.  Hasta ese momento se convertía en la mejor participación, pero ahora fue superada con creces en Lima 2019.

En esta edición, los tres jugadores, además de Kadim Carrasco que fue como suplente, volvieron a llevarse tres medallas.

Moscoso repitió la presea de bronce en singles y en dobles Conrrado y Roland volvieron a quedarse con el sabor amargo de caer en la final y conformarse con la plata.

Pero ese dolor fue borrado en su totalidad por  la medalla de oro que conquistaron en el torneo por equipos.

A estas preseas se suman la también histórica medalla de plata lograda por los hermanos Noelia y Federico Zeballos, en dobles mixtos del tenis lograda este año.

Nunca antes un deportista nacional había logrado subirse al podio en el tenis ni siquiera accediendo a una semifinal, pero lo conseguido por los Zeballos entra también en la historia del deporte nacional.

Federico y Boris Arias accedieron a la semifinal y aunque no lograron clasificar a la final  ni tampoco sumar la presea de bronce, fue un desempeño destacado por propios y extraños y victorioso para el tenis.

Finalmente, la medalla de bronce lograda por el equipo de damas en ráquetbol completa las cinco preseas de Bolivia en Lima 2019.

Valeria Centellas, Angélica Barrios y Jenny Daza accedieron a la semifinal, pero no pudieron avanzar más. Para Daza es la segunda presea de bronce por equipos.

“Demostramos que se puede. Quisiéramos inspirar a que los más jóvenes continúen y se animen a perseguir sus sueños. Nosotros también continuaremos en busca de más”, dijo Roland Keller, después de la hazaña.

Aunque no lograron colgarse un metal en otros deportes,  algunas participaciones en Lima 2019 fueron muy meritorias y por demás destacadas.

El joven fondista Vidal Basco hizo ilusionar en los 10.000 metros planos. Logró no sólo pelear palmo a palmo con potencias como Estados Unidos y Brasil, sino que consiguió un meritorio cuarto lugar con una marca con la que destrozó su propio récord nacional.

Karen Tórrez, que continúa haciendo historia en la natación boliviana, en Lima 2019 no logró esa ansiada medalla ni la marca mínima a Tokio 2020 (se quedó a cinco centésimas) y se convirtió en la primera mujer boliviana en acceder a una final “A” en unos Juegos Panamericanos en esta disciplina. Karen lo hizo en los 100 y 50 libre. En ambas pruebas la sirena terminó sexta.

La marchista Ángela Castro estuvo a poco más de un minuto de conseguir la marca mínima para Tokio 2020, en los 20 km. Castro quedó en el quinto lugar en la prueba.

“Estos resultados son sencillos de graficar. Si nuestros atletas tuvieran los recursos que tienen en otros países,sería diferente. Es sólo cuestión de mirar al entorno:  los atletas (de otros países) entrenan los 365 días porque tienen una asignación, tienen un head coach que controla eso, tienen  un equipo metodológico. Para eso se necesita inversión”, dijo  Marco Arze, presidente del Comité Olímpico Boliviano (COB).

Para el dirigente olímpico estos resultados impulsarán a que se pueda conversar con el Gobierno e iniciar un Plan de Alto Rendimiento.

“Se debería tener no sólo las concentraciones fuera, que son parte del proceso, pero hay varios temas que conciernen al alto rendimiento. No sólo (deben haber) concentraciones, (también) los pasajes para todos los eventos. Por ejemplo, estos chicos con los que compiten, como los de Estados Unidos, México están entre 10 a 20 torneos anuales internacionales, los nuestros hacen un gran esfuerzo familiar. Últimamente se crearon los Tunkas, pero esto tiene que ser sostenible y de mayor envergadura”, manifestó Arze.

MOSCOSO VUELVE A SER ABANDERADO

El raquetbolista chuquisaqueño,  Conrrado Moscoso, volvió a ser el encargado de llevar la bandera de Bolivia en la Clausura de los Juegos Panamericanos Lima 2019.

Moscoso fue el atleta boliviano más laureado en Lima 2019: se llevó tres medallas, de  oro, plata y bronce. Anoche ,en la Clausura, fue la cuarta vez que el deportista portó la bandera, tercera en el cierre de un evento.

Tras la clausura la mayoría de los atletas, entre ellos los raquetbolistas, iniciaron el viaje de retorno a Bolivia para continuar con sus competencias.

QUISPE NO PUDO TERMINAR LA PRUEBA DE LOS 50 KM

El marchista boliviano Ronal Quispe no pudo finalizar la prueba de los 50 km, porque fue descalificado aproximadamente después de los 35 km.

El marchista se ubicó en la novena posición desde el primer kilómetro, ahí se mantuvo a un ritmo constante, en busca de aproximarse a la marca mínima para los Juegos Olímpicos Tokio 2020.

Quispe llegaba a la prueba con una marca de 4h02’02”, como su mejor registro, pero con 4h21’35” como su mejor tiempo del año. Su objetivo era acercarse a las 3h50′ que es la mínima para los Juegos Olímpicos 2020 o por lo menos hacer puntos en el ranking.

El marchista tuvo tres amonestaciones, para luego ser penalizado con cinco minutos y ya después cuando volvió con la desclasificación por flotar.

La misma suerte corrieron Bernardo Barrondo (GUA), Cristian Chocho (ECU), Isacc Palma (MÉX) y Jorge Ruiz (COL).

La prueba fue tan exigente que ni Barrondo, medalla de plata olímpica de Londres 2012, logró finalizarla. El campeón fue el ecuatoriano Claudio Villanueva, con una de 3h50’01”.