Fuertes lluvias y vientos alivian zona afectada por los incendios en Otuquis
Fuertes lluvias y vientos castigaron ayer el sudeste de Santa Cruz, apagando gran parte de los incendios que tenían en vilo a los pobladores de Puerto Suárez y Puerto Quijarro, que comparten el parque nacional Otuquis. “Fue un alivio”, expresó Maikol Melgar, director del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (Sernap)
En horas de la tarde, la lluvia arreció con fuertes vientos huracanados que derrumbaron varios árboles en las avenidas Bolívar y Adolfo Rau y en la plaza San Francisco en Puerto Suárez. Incluso el Concejo Municipal sufrió daños en su infraestructura.
Melgar dijo que la tormenta con lluvia duró 10 minutos, pero fue intensa, lo que hizo que aplaque el incendio, pero no al 100%, por lo que el trabajo continúa.
Afirmó que incluso las canoas en las que se trasladaron algunos grupos de los 90 militares entrenados por Bomberos, se llenaron de agua. Al promediar las 20:00, sostuvo que no se divisaron focos de calor.
Las labores continúan
El Sernap desplegó brigadas que se enviaron a tres zonas, un aproximado de 30 efectivos militares en cada áreas. El Sernap precisó que llovió más en la zona más afectada por el incendio y en el área sur; donde no llegó la lluvia, había un equipo para contrarrestar el fuego. Hoy seguirán las tareas en la zona hata apagar el incendio y luego se harán operaciones preventivas.
Para esta jornada está prevista una reunión en el Centro de Educacion Ambiental de la Gobernacion de Santa Cruz con el fin de seguir la estrategia. Melgar sostuvo que antes del mediodía se trasladará a la zona afectada con el viceministro de Medio Ambiente, Alfreddy Álvarez.
Comando de incidencia
El sábado se realizaron dos sobrevuelos. La ministra de Medio Ambiente y Agua, María Elva Pinckert, acompañada de Melgar, estuvo en Puerto Suárez donde se reunió con autoridades locales e instituciones (gobierno municipal de Puerto Suárez, Puerto Quijarro, FFAA, ABT, WWF, Gobernación de Santa Cruz, Policía y la Naval) para definir acciones.
En la reunión se activó el Comando de Incidencia para intervenir inmediatamente la zona afectada con bomberos forestales.
Durante el sobrevuelo se pudo evidenciar tres incendios en un ecosistema de sabanas naturales o pastizales, denominados ‘colchones de camalote’, y pastura seca acumulada en forma de islas flotantes. Se verificó que de los tres incendios forestales, dos no han cruzado la frontera, por lo que la lluvia logró reducir los focos.
En base al análisis efectuado, iniciaron una estrategia para intervenir la zona con fuego por vía terrestre y fluvial.
Ayer, se han sumado voluntarios de las Fuerzas Armadas, de la Policía, así como de los municipios involucrados y de la Gobernación de Santa Cruz. Hasta el momento, se calculan que entre unas 3.000 a 5.000 hectáreas de pastizales del parque Otuquis, que protege gran parte del pantanal boliviano, han sido devoradas por el fuego que ingresó de Brasil.
El incendio se originó supuestamente por chaqueos descontrolados en la ribera del Río Paraguay y en la cabecera de la subcuenca de la laguna Cáceres, compartida entre Brasil y Bolivia. Andrés Peredo, comandante del Distrito Naval en Puerto Suárez, dijo que el fuego ingresó en 14 kilómetros del territorio boliviano.
Otra vez en la Chiquitania
El año pasado, incendios forestales afectaron durante dos meses la Chiquitania boliviana, en la región amazónica fronteriza con Brasil, habiendo consumido al menos 5,3 millones de hectáreas, según reportes oficiales.
Se originó en brasil
En la frontera
El paso de fuego que se originó en Brasil, llegó a Bolivia y consumió entre 3.000 y 5.000 hectáreas aproximadamente.
La semana pasada
Fue detectado por el Sistema de Alerta Temprana entre el 11 y 12 de marzo, según la Gobernación de Santa Cruz.
Para mitigar el fuego
Unos 300 bomberos de Puerto Quijarro, Puerto Suárez y San Matías están en apronte con todo el equipamiento necesario. Tres brigadas trabajan desde el sábado.