Día Cero

La serie de Netflix recomendada para políticos y aprendices.

Robert de Niro encarna a un expresidente de los Estados Unidos durante un ciberataque al país. El actor entrevistado por Veja habló sobre la trama de Netflix, en la que el gobierno estadounidense coquetea con el fascismo –y conecta con empresas tecnológicas.

El currículum del veterano Robert De Niro es extenso, pero, curiosamente, nunca había interpretado a un presidente estadounidense. Ahora, en la miniserie de Netflix Día Cero, da vida al ficticio George Mullen, un exjefe de Estado que regresa al servicio activo (ha pedido de la presidenta para dirigir una Comisión con poderes especiales que debe descubrir la procedencia del ciberataque que ha puesto en peligro al país) de una nación, ya dividida por la polarización política y más temerosa del futuro.

En la entrevista, el actor de 81 años, habló sobre la experiencia y cómo la serie, rodada antes de la elección de Donald Trump, trae paralelismos accidentales con el actual gobierno republicano, incluida la influencia de las empresas tecnológicas en la política.

Accidentales o no, lo cierto es que desde el primer episodio las coincidencias fantasmagóricas de sus centrales de inteligencia apuntan a Moscú en el centro de la trama.

Día Cero, el mismo nombre que encabeza el actor octogenario, con la comisión que preside que toma una forma morfológica extraña y aterradora peor aún del escenario que los Estados Unidos vivió tras los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.