El set del Gobierno que pone nerviosos a los empresarios

El cuarto intermedio de la reunión entre autoridades de Gobierno y empresarios privados, puede ser leída como una buena señal, las cosas buenas tardan en concretarse, pero en el caso particular el ambiente es tenso; la falta de expectativas de que del encuentro previsto para mañana salga humo blanco. El ministro de Economía y Finanzas Públicas quiere impresionar con lo del “set de propuesta viables” que le han planteado al sector, que sabemos tiene pánico a los sets porque al frente tiene un adversario más que un amigo, que no ha tenido, o lo ha marginado en los últimos años de cualquier participación en la economía, para no hablar de la falta de interés de trabajar en conjunto políticas público privadas tan de boga en el mundo.

Ayer, una buena parte del empresariado tenía la sensación de que acabarían en jaque y por eso algunos del grupo plantearon no asistir al encuentro, lo que podía leerse como un K.O. técnico. Al final primó la cordura; la reunión presidió otra de un día anterior en la que el Gobierno se reunió con las organizaciones sociales con las que gobierna, (peor que eso ya que el presidente ha manifestado que decide escuchándolos), pero esa reunión sirvió más para asustar al público de que allí hallarían soluciones estructurales a la crisis.

Los empresarios están nerviosos, no ha trascendido el set de ofertas y/o propuestas que plantea el Ejecutivo. Las cámaras de los canales de televisión que tuvieron unos minutos para los planos de imágenes correspondientes, no enfocaron claramente a los actores, volviendo una y otra vez sobre tomas generales que no dejaron apreciar la tensión reinante en el encuentro, ni las caras de los presentes. Se dijo que estaba una delegación de empresarios de Santa Cruz. No reconocí a ninguno.

Hay una sensación de que el boliviano podría devaluarse frente al dólar y si ese es uno de los puntos que plantea el set del ministro Montenegro deja una sensación de incertidumbre en los bancos que durante la gestión del presidente Morales apostaron por la fortaleza del boliviano, o sea, por el modelo económico productivo comunitario que tanta disputa ha generado en las filas del MAS.

Pero volviendo a los banqueros, está claro que no apoyaran ninguna línea que se acerque a la devaluación del boliviano, ya que gran parte de sus activos de deuda están en moneda nacional, una devaluación implicaría enormes pérdidas para el sector.

Esperemos que el set sea sincero y ejecute una melodía entre todos. También sabemos que hay distintas posiciones entre los empresarios de esta parte del país (escribo de La Paz) con los empresarios del oriente que buscan y quieren soluciones rápidas porque su economía está articulada con grandes inversiones que no pueden esperar por mucho tiempo promesas.

Ayer, solo como dato, las filas para comprar diésel y gasolina parecían las que se formaron hace un par de semanas cuando los hidrocarburos estaban detenidos (encallados) en un puerto chileno.

Todos coinciden que la palabra clave de la reunión de mañana es sinceridad.