Pisabol lleva sal extraída del salar de Uyuni a 10 países
Una infraestructura construida con enormes bloques de sal, única entre todas las fábricas asentadas en el Parque Industrial de Santiváñez, diferencia a la Planta Industrializadora de Sal y Alimentos Bolivianos Srl (Pisabol), una de las primeras empresas salineras más grandes de Cochabamba y el país.
Dentro de la planta, las montañas de piedras de sal poco a poco se van transformando, pasando por un proceso de selección, purificación, pulverización, secado y de yodación, hasta terminar en diminutos granitos que luego llegarán a cocinas y mesas para su consumo.
Pisabol Srl fue fundada en 1991 por iniciativa del ingeniero Gonzalo Molina Sardán. Se dedica a la producción y comercialización de alimentos fortificados con micronutrientes, entre ellos la sal, un condimento indispensable de las comidas.
Su experiencia de 28 años y la diversificación de sus productos, entre ellos el Salerito y más de 50 elaborados en base a la sal, le han permitido expandir sus fronteras.
En 1996, empezó a exportar la sal procesada a Uruguay, Brasil y Paraguay. A la fecha sus productos llegan en total a 10 países, además a China, Suiza, Italia, Canadá, Paraguay, Estados Unidos y Chile.
Al mes produce aproximadamente 500 toneladas de sal, tanto para consumo humano como para uso industrial. Se provee de materia prima del salar de Uyuni y de Tarija (de la sal rosada).
Estos insumos, antes de ingresar a los almacenes de la planta, son sometidos a un control de calidad organoléptico y a un análisis de sólidos insolubles para verificar que la sal no contenga pajas, arena y otras partículas extrañas.
Elaboración
Por las altas exigencias de la normativa vigente, principalmente en cuanto al contenido de yodo por cada kilo de sal, pocas marcas están autorizadas para su comercialización y consumo.
Pisabol, en cumplimiento de las normas, somete todos sus productos a un riguroso proceso de elaboración y pruebas de calidad.
- Purificación. Una vez que la materia prima ingresa a la planta se realiza el lavado de lixiviados para eliminar las partículas o materiales extraños que contenga.
- Pulverización. En el molino se granula la sal para las diferentes presentaciones del producto: impalpable, granulada y otras.
- Deshidratación. En los hornos rotativos se extrae el agua que contiene la sal. Se estima que tiene un 40 por ciento de agua.
- Clasificación. Una vez que la sal está seca se selecciona de acuerdo a los diferentes tamices de granulometría.
- Fortificación. Este paso es el más importante, la sal es mezclada con yodo. Las proporciones deben ser exactas a las establecidas en las normas, de 40 a 80 miligramos por kilo de sal. El Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria (Senasag) y el Servicio de Salud (Sedes) realizan la verificación de estos contenidos.
- Control de calidad. Como último paso se realiza un análisis y la validación del producto para proceder a su envasado.
El encargado de Control de Calidad de Pisabol, Diego Flores, señaló que la empresa cuenta con las autorizaciones del Senasag y del Sedes, que certifican la calidad de sus productos y aseguran su consumo y uso cada mes.
DIVERSIFICACIÓN
Primeros años. Durante sus primeros años, Pisabol procesaba sal de mesa yodada y yodofluorada, con el tiempo fue diversificando sus productos y presentaciones, además fue ampliando sus instalaciones y mercados.
Más de 50 ofertas. Actualmente, elabora variedad de sales de mesa condimentadas (con ajo o apio), parrilleras y con ablandador, sal rosada, sales para uso industrial y mineralizada para consumo animal.