Las calificadoras de riesgo determinan con notas el desempeño de una economía. Paraguay alcanza la más alta que destaca su solvencia económica, el clima favorable para la inversión local y extranjera.
Nadie desconoce ya la gestión eficiente de Paraguay en la acumulación de los datos que la ubican entre las naciones más exitosas por su manejo macroeconómico. Un reporte divulgado por el Gobierno del país hace un recuento pormenorizado de estos logros en los que, como elemento ordenador, la agencia Moody´s establece una alta calificación en la imagen de prosperidad que goza desde más de una década. El informe se remonta a inicios del presente siglo (2000) cuando Paraguay se encontraba sumida en una compleja inestabilidad económica de la que salió logrando desde entonces sucesivas señales positivas en sus índices de estabilidad.
La anhelada AAA (la triple) con la que la agencia Moody´s califica a Paraguay; de bonanza desde 2007 inapelable en todos sus niveles macros.
El reporte señala que desde 2002, “la política económica se orientó hacia la estabilidad macroeconómica. Este enfoque permitió más de una década de crecimiento con estabilidad de precios, construir los cimientos necesarios para implementar políticas de desarrollo que fomenten un crecimiento inclusivo y sostenible”.
Paraguay ha tenido la capacidad de conquistar una base institucional sólida en la implementación de políticas económicas viables. Los pilares de su transformación a cargo del Ministerio de Economía y Finanzas y el Banco Central han sido la clave para el desarrollo. En 2011, el BCP implementó una política monetaria basada en metas de inflación, estableciendo un objetivo que garantice una inflación baja y estable.
El reporte señala que la institución (BCP) promovió un marco regulatorio que “fortaleció su rol de supervisor, asegurando un sistema financiero sólido. Estas medidas reflejan un compromiso claro con la construcción de una infraestructura institucional robusta para mantener la estabilidad económica”.
En tanto que desde el Ministerio de Economía y Finanzas se establecieron las bases que durante ocho años consecutivos trascendió en políticas de alta eficiencia que permitió un superávit fiscal. “La aprobación de la Ley de Responsabilidad Fiscal y las leyes de Acceso a la Información Pública promovieron una mayor transparencia y modernización en la gestión de las finanzas públicas”.
Acuerdos de complementariedad público privado
Indudablemente, un hito ha sido el establecimiento de acuerdos entre el sector público y privado que permitió sedimentar el desarrollo con niveles apropiados de adecuación de la realidad que se convirtió en otro eje de su institucionalidad con beneficios evidentes para sus ciudadanos. El país se adhirió a organizaciones internacionales para mostrar que la evolución era un componente apropiado de transparencia y cooperación fiscal.
En 2019 aplicó una reforma tributaria justa formalizando los niveles de ingresos, generando cargas más equitativas para los contribuyentes. El reporte menciona la gran capacidad de adecuación de sus niveles decisorios para evitar la corrupción en todos los niveles de la sociedad, que contribuyó grandemente en las metas. Asimismo, se aplicaron medidas contra el lavado de dinero y la corrupción.
Fortalecimiento institucional
El reporte da cuenta que en el último año (2023) el país ha priorizado el fortalecimiento institucional y el ordenamiento económico. “Se redujo la inflación y se transparentaron las deudas del Gobierno anterior relacionadas con la pandemia. Se diseñó e inició la implementación de un plan de convergencia fiscal creíble, transparente y responsable, de manera a restituir plenamente la solidez macroeconómica que caracterizó al país durante muchos años”.
“Además, se destaca la implementación de reformas ágiles y pragmáticas que incluyeron la creación de la Superintendencia de Pensiones, la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios, el Ministerio de Economía y Finanzas, la ley de Organización Administrativa del Estado y la Ley de créditos de carbono”. Junto a otras medidas que reforzaron su integridad en los mercados internacionales a través de la emisión de bonos del tesoro.
Reconocimiento internacional
No se puede negar que esta tendencia ha despertado miradas de admiración en el ámbito internacional. “Estos esfuerzos han posicionado a Paraguay como uno de los países más estables de la región. “La previsibilidad de la política macroeconómica ha fomentado el desarrollo de nuevos sectores que generan empleo y fortalecen la resiliencia ante eventos externos adversos”. La agencia calificadora Moody’s ha reconocido estos avances, destacando “el consenso social y político que ha permitido mantener una economía estable y promover reformas que fortalecen la transparencia y la institucionalidad”.
De tal modo Paraguay “consolida un modelo de estabilidad y crecimiento, con un firme compromiso hacia un desarrollo sostenible y equitativo, apoyado en la construcción de una infraestructura institucional constante que asegura la implementación efectiva de políticas económicas y sociales”.
Estos logros no hubieran sido posibles sin la integración de sus sectores productivos con el Gobierno que han convertido al país en un lugar atractivo para hacer negocios simplificando los trámites para la inversión privada que genera empleo.
La misma agencia calificadora destaca el Menor Riesgo País, como uno de los atributos para el clima propenso a los negocios fomentando la inversión local y extranjera en un entorno dinámico y competitivo. “Todos estos antecedentes han generado empleo de calidad y en la inversión en infraestructura”.
Para el Gobierno del país no solo es el resultado de la apertura la que trae progreso. El reporte señala en su parte final que la mayor inversión extranjera aporta también conocimiento y tecnología. “Esto abrirá las puertas para el intercambio de conocimientos y la mejora de capacidades técnicas y profesionales, fortaleciendo nuestra fuerza laboral y preparándonos para enfrentar los desafíos del futuro”.