Sector de hidrocarburos se encuentra en situación crítica y herida
Un sector de hidrocarburos en situación crítica y la empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) “herida”. Ese fue el diagnóstico que hicieron autoridades del ámbito este jueves respecto al estado en que recibieron uno de los rubros más importantes de la economía boliviana
“Lastimosamente en noviembre de 2019, producto de un golpe de Estado, nuestra empresa (YPFB) fue golpeada. Un año después nos ha tocado recibir nuestra empresa, nuestro sector de hidrocarburos en una situación crítica. Realmente no comprendemos la magnitud del daño económico que se ha hecho a nuestra empresa estatal, al sector de hidrocarburos y a nuestra economía”, manifestó el ministro de Hidrocarburos, Franklin Molina.
El diagnóstico fue realizado en el acto de posesión del nuevo presidente de YPFB, Wilson Zelaya y del Director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, Germán Jiménez.
En el evento, el Ministro de Hidrocarburos aseveró que con la refundación de YPFB en 2006 se generó una redistribución de sus ingresos que ha beneficiado a todo el país, pero ahora existe una situación crítica con el reto de restaurar a la empresa estatal.
El nuevo presidente de YPFB señaló que la empresa en los últimos tiempos atravesó duros momentos, de pérdidas económicas y un estancamiento, incluso con acciones por encima de la norma.
“YPFB, la empresa bandera del país, siento que está herida (…) La poca transparencia y las denuncias que han surgido en los últimos tiempos son síntomas de que en algunas áreas se ha trabajado mal. Estos también son indicadores de que hay mucho trabajo por hacer y algunos casos con gran sentido de urgencia”, indicó.
El ministro Molina anunció que el nuevo presidente de YPFB tendrá la misión de restituir la producción, reconducir el rubro del diésel ecológico con el objetivo de disminuir la importación de combustibles, reconfigurar la industrialización echando a andar la planta de urea.
También señaló que YPFB tendrá la tarea de “revisar contratos e iniciar las gestiones que correspondan si es que se ha encontrado un daño económico al Estado”.
Zelaya se comprometió a trabajar sin escatimar esfuerzo, para realizar un análisis rápido de la situación de la compañía y generar un plan de corto y mediano plazo, con el objetivo de “reimpulsar la industrialización, la internacionalización, la explotación, pero fundamentalmente la exploración”.