Toyota: La descarbonización de la movilidad

La marca japonesa de vehículos destaca los biocombustibles combinados para descarbonizar la movilidad.

El fabricante japonés de vehículos Toyota expuso a las delegaciones participantes del G20 en Foz do Iguaçu, el potencial de la reducción de la huella de carbono de las tecnologías flex e híbridas flex producidas en Brasil ya consolidadas en el mercado. En un compromiso con la innovación y la sostenibilidad la marca presentó los prototipos de un automóvil equipado con tecnología híbrida flex enchufable y una camioneta pickup impulsada por biometano. De esta manera Toyota destacó la exitosa experiencia brasileña con biocombustibles combinados con motores de combustión y electrificación como una alternativa realista de descarbonización para enfrentar el cambio climático.

Durante la reunión de autoridades, expertos y líderes de las 20 economías más grandes del mundo, Toyota destacó la importante contribución de la industria automotriz en el desarrollo de tecnologías limpias y la promoción de una economía sostenible. Resaltando los beneficios del uso de biocombustibles -como el etanol- para la descarbonización, una solución que se aplica desde hace mucho tiempo en Brasil y que también se puede aplicar en otros países.

Como parte de la estrategia para contribuir a la descarbonización aplicando soluciones adecuadas a las condiciones locales para una movilidad limpia y sostenible, el fabricante comparte con otros países su experiencia con los autos flex-fuel e híbridos flex-fuel como otra alternativa. Prácticos, sostenibles y accesibles, estos modelos fabricados por Toyota son una opción de movilidad sostenible, ya que el etanol es uno de los biocombustibles con una de las huellas de carbono más bajas del mundo.

“La trayectoria de Toyota está marcada por su espíritu pionero y su evolución en el desarrollo de nuevas tecnologías. Fuimos pioneros en el lanzamiento de híbridos e híbridos flex, en plena alineación con los desafíos de la descarbonización. A partir de la experiencia brasileña con los biocombustibles, podemos contribuir a la transición hacia una movilidad más sostenible, ofreciendo soluciones que impacten positivamente en el medio ambiente y en la sociedad en su conjunto”, destacó Rafael Chang, CEO de Toyota para América Latina y el Caribe.

Toyota está ofreciendo una flota de 30 vehículos híbridos flex en el G20, entre el Corolla y el Corolla Cross, para el transporte de delegaciones internacionales. Estos autos demuestran la viabilidad de esta consolidada tecnología baja en carbono para su aplicación en diferentes países.

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Durante el evento, el fabricante también promovió rondas de debates y conferencias en alianza con la Unión de la Industria de la Caña de Azúcar y la Bioenergía (Unica) y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) para involucrar a las autoridades internacionales en el uso de biocombustibles, como el etanol, y las tecnologías flex e híbridas como alternativas para la descarbonización.

“La electrificación, por sí sola, no será suficiente para detener el calentamiento global. Necesitamos un enfoque integrado que incluya combustibles sostenibles combinados con tecnologías automotrices para la descarbonización. Las alianzas con Unica y el IICA refuerzan nuestra consolidada experiencia como alternativa para otros países”, comentó Rafael Chang.

Por primera vez se exhiben nuevas tecnologías

Toyota sigue invirtiendo en investigación y desarrollo de nuevas tecnologías con el objetivo de reforzar su compromiso de acelerar la descarbonización con el uso de biocombustibles.

En el G20, la compañía mostró por primera vez un automóvil equipado con tecnología híbrida flex enchufable, que combina un motor de combustión interna flexible con un motor eléctrico, combinado con una batería recargable de fuente externa. La iniciativa refuerza el espíritu pionero de la marca en el desarrollo de nuevas rutas tecnológicas hacia el carbono de la neutralidad.

Toyota también presentó un prototipo de la aplicación de un motor impulsado por biometano en un vehículo comercial ligero. El biometano es un combustible renovable derivado del biogás, que se puede producir a partir de cualquier materia orgánica, incluida la caña de azúcar. Es, por tanto, un combustible con alto potencial, ya que puede generarse en biodigestores de zonas rurales o incluso en grandes ingenios cañeros.

“Al hablar de biocombustibles, podemos ampliar la cadena de valor en su producción para establecer un ecosistema de economía circular donde literalmente no haya generación de residuos, maximizando la producción de valor y disminuyendo nuestra dependencia de los recursos fósiles. Este es el tipo de solución integrada que necesitamos para crear un futuro sostenible”, afirmó Rafael Chang.

Pioneros en electrificación

Toyota es líder mundial en vehículos electrificados con más de 23 millones de vehículos vendidos, que en conjunto han contribuido a evitar la emisión de más de 176 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.

En América Latina, lanzó hace 15 años el primer vehículo electrificado del fabricante: el revolucionario Toyota Prius, el primer híbrido producido en serie en el mundo colaboró para popularizar una tecnología hasta entonces desconocida en la región.

Desde entonces, la trayectoria de Toyota ha estado marcada por su espíritu pionero y su evolución en el desarrollo de nuevas tecnologías. En 2019, el fabricante lanzó el reconocido sistema flex hybrid, presentado oficialmente en el sedán Corolla y que, desde 2021, también equipa el SUV Corolla Cross, ambos modelos fabricados en Brasil.

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Inversión para el futuro de la movilidad sostenible

Recientemente, la marca anunció una inversión de 2.200 millones de dólares para ampliar su capacidad de producción y desarrollar nuevas soluciones de movilidad en la región. Parte de esta cantidad se destinará a la fabricación de dos nuevos vehículos híbridos flex, el primero de los cuales es un vehículo compacto que se producirá en 2025, lo que hace que la tecnología híbrida flex sea aún más accesible.

“Creemos en el potencial de Brasil para destacarse globalmente en la descarbonización y servir de referencia para otros países, especialmente con el etanol, impulsando la sostenibilidad y también el progreso social y económico”, concluyó Rafael Chang.

Toyota en América Latina y el Caribe

Toyota opera en América Latina y el Caribe desde 1953, y ha construido una sólida reputación de calidad, confiabilidad y durabilidad en la región. Está presente en 40 países de la región con 320 concesionarios y 650 puntos de venta, con el mismo propósito de brindar movilidad y felicidad para todos, apuntando a un futuro mejor para las próximas generaciones.

Su oferta de productos en la región se basa en 48 vehículos de pasajeros y comerciales en diferentes segmentos. Los modelos regionales, Corolla, Corolla Cross, Corolla GR-S, Yaris, Hilux, Hilus GR-S, SW4/Fortuner, SW4/Fortuner GR-S se producen en sus plantas de Sorocaba e Indaiatuba en Brasil, y Zárate, en Argentina. Además, en Brasil, también opera una Planta de Motores en Porto Feliz. Sus plantas tienen una capacidad de producción total de 438.000 unidades por año.

TLAC también participa activamente en el apoyo a las comunidades locales a través de diversas iniciativas sociales y ambientales, como el Toyota Environmental Challenge 2050 y su compromiso de alcanzar la neutralidad de carbono a través de un portafolio diversificado con diferentes tecnologías que se adaptan a diferentes matrices energéticas e infraestructuras.