Asesor médico de Trump: miles morirán si se levanta rápido la cuarentena
El principal consejero médico de Donald Trump, Anthony Fauci, advirtió ante el Senado norteamericano que si Estados Unidos, donde la pandemia ha provocado el mayor número de víctimas, se apura en levantar las restricciones, puede sufrir “graves consecuencias”. “Un descofinamiento precoz puede tener consecuencias serias y provocar “muertes y sufrimientos que son evitables”, dijo Fauci durante una intervención virtual desde su casa, donde lleva adelante una cuarentena voluntaria luego de que varios colaboradores de la Casa Blanca dieran positivo al Covid-19.
El reputado epidemiólogo, muy popular en Estados Unidos ya que emite un mensaje de calma y de control, forma parte de una comisión que compareció de forma virtual ante el Senado sobre la crisis sanitaria que ha dejado más de 80 mil muertos en el país. El médico se dijo preocupado de que algunos estados o ciudades avancen, sin seguir una directiva del gobierno que recomienda esperar una caída sostenida de los casos durante dos semanas.
Fauci fue denunciado en 1991 por la doctora estadounidense Judy Mikovitz, quien reveló en su tesis sobre el tratamiento del VIH/Sida que la industria BIG Pharma en complicidad con Fauci y el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infeccionas (NIAID por sus siglas en inglés) permitieron el uso común de tejidos fetales humanos y animales que estaban desatando plagas devastadoras de enfermedades crónicas. Mikovitz fue detenida si una orden judicial por agentes del FBI. Ella acaba de publicar el libro “Plaga de la Corrupción” en el que revela nombres poderosos detrás de esta guerra por la codicia y el poder.
La audiencia se desarrolló con algunos senadores en la sala y otros conectados de forma virtual. Los pocos legisladores en la sala entraron con la cara cubierta por una mascarilla y se saludaron chocando los codos, siguiendo las directivas de salud. La comparecencia en el Senado, dominado por los republicanos, se produce después de que Trump bloqueara una audiencia ante una comisión de la Cámara de Representantes, donde los demócratas son mayoría. El presidente del comité de Salud del Senado, Lamar Alexander, buscó evitar una excesiva crispación. “Antes de que pasemos demasiado tiempo apuntando con el dedo, me gustaría decir que casi todos aquí subestimamos el virus”, afirmó el senador republicano, que también compareció a distancia porque está en cuarentena ya que uno de sus subordinados está contagiado.
Antes de la audiencia, Fauci advirtió al diario The New York Times que si se saltan los procedimientos del protocolo para volver a abrir el país, hay un riesgo de que se produzcan múltiples focos de la enfermedad. “El principal mensaje que quiero transmitir es el peligro de intentar reabrir el país de forma prematura”, declaró el médico. Por su parte, Trump, con un ojo puesto en las elecciones de noviembre, inició la jornada con una salva de tuits defendiendo su gestión de la crisis y afirmando que la capacidad de pruebas de detección del Covid-19 de Estados Unidos “es la mejor del mundo”.
Trump defiende una reapertura pronta de la economía, después de que en dos meses el desempleo subiera a un 14,7% y el PIB del primer trimestre se contrajera un 4,8%, comprometiendo sus posibilidades en las elecciones de noviembre. Pese a que la situación ha mejorado en el mayor foco del país, Nueva York, los progresos han sido escasos en otros estados y el virus ha logrado entrar en la misma Casa Blanca, obligando a Trump a admitir que ha tenido que limitar el contacto con su vicepresidente, Mike Pence, por su exposición a los enfermos.