Argentina se convirtió en el primer país de América Latina en reconocer en su documento de identidad a las personas que no se identifican con las categorías femenina o masculina, y permitió que usen en cambio la opción “X”.
El decreto del presidente Alberto Fernández busca proteger de esa forma el derecho a la identidad de género que la legislación argentina reconoce desde 2012.
“Al Estado no debería importarle el sexo de sus ciudadanos”, dijo Fernández, quien participó este miércoles de un acto de entrega de los primeros documentos de identidad con la nueva opción.
“Hay otras identidades además de la de hombre y mujer que deben ser respetadas”, sostuvo.
La medida vale tanto para documentos nacionales de identidad como para pasaportes emitidos por el país sudamericano.
Argentina se une así a otros países que han adoptado este sistema para identidades formales de personas no binarias, como Canadá, India y Nueva Zelanda.
“Voy a ser libre”
Una de las primeras personas en recibir su Documento Nacional de Identidad (DNI) argentino con la nomenclatura no binaria fue Gerónimo Carolina González Devesa.
De 35 años y profesional en medicina, González Devesa llevaba tres años de batallas para lograr el reconocimiento formal de su identidad no binaria.
En 2018 y con la ayuda de la experta en derecho y bioética Eleonora Lamm, González Devesa había logrado que la provincia de Mendoza actualizara su partida de nacimiento sin consignar su género, algo sin precedentes hasta entonces en Argentina.
A partir de ese momento inició la lucha para que su DNI también reconociera su opción no binaria, a la que se sumaron otras personas incorporando peticiones en diferentes oficinas públicas argentinas.
“Quería cambiar mi identidad, romper con el tradicional binarismo y le pregunté a Eleonora si era posible que en el DNI no figurara ningún sexo. La respuesta fue afirmativa y así comenzamos a transitar este camino”, dijo González Devesa en declaraciones que cita el diario mendocino El Sol.
Agregó que en el recorrido debieron sortear “piedras” como la pandemia de coronavirus, pero haber alcanzado su objetivo equivale a “un grito de libertad”.
“Siento que por primera vez en mis 35 años voy a ser libre. Voy a dejar de dar explicaciones a la sociedad sobre mi identidad. Es histórico este paso que dará el país”, dijo minutos antes de recibir su nuevo documento.
“No somos una X”
La ceremonia en la que participaron el presidente Fernández y otras autoridades del gobierno argentino incluyó un reclamo de uno de los activistas presentes.
“No somos una X”, protestó la persona, descontenta con el uso de esa letra para identificar a los no binarios, al recibir su nuevo DNI.
“Mi sentimiento interno no es una X y lo quiero dejar bien claro”, agregó.
El propio Fernández respondió a eso que calificó como una “queja” y señaló que la nomenclatura ha sido incorporada en convenciones internacionales y permite “abrir derechos dentro de los límites”.
“Es un avance, no deberíamos renegar de eso”, sostuvo el presidente.