Israel endurece ofensiva militar contra Gaza
El gobierno israelí intensificó su ofensiva contra Hamas y llamó a 1500 reservistas para un posible ataque a gran escala sobre Gaza. Los bombardeos israelíes dejaron nueve milicianos muertos, al mismo tiempo que Hamas, la facción palestina que gobierna en la Franja de Gaza, reivindicó el lanzamiento de decenas de cohetes hacia Israel. También ayer, la prensa israelí informó que tres de los seis judíos ultranacionalistas detenidos el domingo confesaron haber secuestrado y matado a un palestino de 16 años, hallado muerto la semana pasada en Jerusalén, y confirmaron que fue en represalia por el crimen de los tres adolescentes israelíes que habían sido secuestrados el 12 de junio.
Ante un escenario político cada vez más dividido, el canciller israelí, Avigdor Lieberman, anunció el fin de su alianza con el partido del primer ministro Benjamin Netanyahu en recriminación por su tibia respuesta al asesinato de los jóvenes, que Israel atribuyó a Hamas. A partir de esta decisión, la mayoría parlamentaria que ostenta el oficialismo y la continuidad del gobierno tambaleaban. Sin embargo, Lieberman dijo más tarde que la formación que integra permanecerá en la coalición gobernante, luego de que Netanyahu se reuniera durante tres horas con su gabinete de seguridad y decidiera sostener la ofensiva en Gaza para que cesen los ataques con cohetes.
Un ministro que participó de la reunión dijo que el gabinete decidió, por ahora, abstenerse de lanzar una ofensiva a gran escala contra Gaza, como proponía Lieberman, pero acordó estar preparados para ampliar la operación en caso de que no frene el fuego de cohetes, informó el diario Haaretz en su página web. Además, el periódico agregó que el ejército convocó a 1500 reservistas para que se movilicen a la frontera con Gaza. El vocero militar israelí, el teniente coronel Peter Lerner, manifestó que Israel estaba preparado para un deterioro de la situación en la Franja y que no se descarta el potencial uso de la fuerza militar.
La agencia de noticias Maan informó que siete de los palestinos asesinados en Gaza pertenecen al ala armada de Hamas. Seis de ellos murieron en el bombardeo de un túnel en la zona fronteriza con Egipto, según esta fuente. El portavoz militar israelí, sin embargo, dijo al respecto que la fuerza aérea bombardeó ese ingreso hace algún tiempo, pero que los miembros de Hamas murieron cuando quisieron inspeccionar los daños. En ese momento detonó un explosivo en el túnel. Hamas participó activamente en los últimos ataques contra territorio israelí, lanzó Lerner.
Por su parte, en un comunicado, las Brigadas Ezzedin al Qasam reivindicaron haber lanzado ayer decenas de proyectiles contra las localidades israelíes de Ashdod, Ashkelon y Netivot, “en respuesta a la agresión sionista”, y dijo que el “enemigo pagará un precio tremendo”. La reivindicación del brazo armado de Hamas llegó horas después de que Hamas denunciara la muerte de seis de sus combatientes en un bombardeo israelí lanzado anteanoche contra la ciudad de Rafah, ubicada en el sur de Gaza.
En este contexto de violencia, otro miliciano de Hamas murió en un ataque israelí al norte de la Franja y dos combatientes del grupo radical palestino Jihad Islámica murieron en un bombardeo contra el campo de refugiados de Al Bujeir, en el centro del territorio costero, informaron ambas organizaciones.
El ejército israelí dijo que más de 85 cohetes fueron lanzados ayer contra distintas ciudades. La mayoría cayó en descampados y 12 fueron interceptados por el sistema defensivo israelí Iron Dome, pero una persona resultó con
heridas leves por esquirlas en Ash-dod, agregó el ejército en un comunicado. Las sirenas de alarma sonaron en numerosas localidades israelíes, forzando a miles de personas a encerrarse en sus casas. La región está al rojo vivo desde el secuestro, el 12 de junio pasado, de los tres jóvenes israelíes, hallados muertos la semana pasada cerca de la ciudad de Hebrón, en Cisjordania, y de cuyo asesinato Israel acusa a Hamas, que lo niega. La semana pasada, horas después del entierro de los tres adolescentes judíos asesinados, el palestino de 16 años Mohamed Abu Jadair fue secuestrado cerca de su casa en Jerusalén Este, y más tarde su cuerpo fue hallado quemado en un bosque cerca de la ciudad sagrada.
Su muerte desató varios días de protestas y disturbios protagonizados por palestinos en Jerusalén y el norte de Israel. El diario Haaretz informó ayer que los seis detenidos por el asesinato del palestino son judíos extremistas oriundos de Jerusalén, y que tres de ellos confesaron el crimen y hasta lo escenificaron ante las autoridades. “Estamos tratando de averiguar qué papel desempeñó exactamente cada uno de ellos”, dijo el portavoz de la policía israelí, Mickey Rosenfeld. Los sospechosos apresados dijeron que el crimen fue en represalia por el asesinato de los israelíes, tal como denunciaban los palestinos.
El servicio de seguridad interior israelí Shin Bet prohibió la difusión de casi todos los detalles del caso, como la identidad de los sospechosos, e incluso bloqueó sus contactos con los abogados. Netanyahu condenó el crimen del joven palestino y pidió calma a la población, en medio de presiones de Lieberman y otros “halcones” de su gabinete para lanzar una megaofensiva en Gaza. Ayer, el premier israelí se comunicó con el padre del menor, Hussein Abu Jadair, al que transmitió que lo que sucedió con su hijo era un crimen atroz y reprobable. “Actuamos inmediatamente para detener a los asesinos. Los llevaremos ante la Justicia y sobre ellos recaerá todo el peso de la ley”, le manifestó Netanyahu, según informó su oficina. Un informe de la autopsia practicada al joven concluyó que fue quemado vivo.