Israel realiza la mayor expansión de colonias en Cisjordania desde los Acuerdos de Oslo

Israel ha aprobado la construcción de 22 nuevas colonias en Cisjordania, incluida una en el Monte Ebal, cerca de Nablus, donde los colonos israelíes afirman que se encuentra el altar de la figura bíblica de Josué. Peace Now, una organización no gubernamental israelí que realiza un seguimiento de los asentamientos, sostiene que es la mayor expansión de colonias desde la firma de los Acuerdos de Oslo hace más de 30 años.
El anuncio también incluirá la formalización de nueve colonias ya construidas, así como de los puestos avanzados de Homesh y Sa-Nur, evacuados por Ariel Sharon en 2005 debido a su proximidad a los centros de militancia palestina en Jenin y Tulkarem.
Precisamente, el ejército israelí lanzó en enero de 2025 la mayor operación militar en estos territorios desde la Segunda Intifada, desplegando helicópteros y tanques, y provocando el desplazamiento de más de 40.000 palestinos. La operación, denominada Muro de Hierro y coordinada con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), ha establecido una presencia militar permanente que allana el camino para la construcción de estas nuevas colonias.
La decisión israelí forma parte de un compromiso alcanzado entre el primer ministro, Benjamin Netanyahu, y los partidos sionistas religiosos, como Poder Judío. El objetivo es continuar ampliando el control sobre Cisjordania, en preparación para una futura anexión del territorio.
Israel expande las colonias y el control de Cisjordania
Durante décadas, el Estado hebreo ha estado expandiendo la presencia de colonos judíos, reduciendo el territorio de los palestinos y rodeando sus ciudades desde las colinas. Este impulso se ha acelerado desde 2023 con la llegada al gobierno de los nacionalistas mesiánicos y el nombramiento de Bezalel Smotrich como gobernador de Cisjordania, asumiendo poderes sobre permisos de construcción
Al tiempo que aumenta el número de colonos, también lo hace su radicalización, ya que cada vez se producen con más frecuencia los ataques contra la población palestina. Entre 2010 y 2019, Naciones Unidas registró cerca de 3.000 casos, resultando en 22 fallecimientos y más de 1.000 heridos. Para ponerlo en perspectiva, solo entre el 7 de octubre de 2023 y finales de 2024 se reportaron 1.860 ataques, durante los cuales siete aldeas palestinas fueron arrasadas y al menos 17 personas murieron.
Los episodios más habituales suelen ser los hostigamientos de pequeños grupos a agricultores que cultivan su tierra en zonas rurales, pero en los últimos años se han incrementado de forma significativa los ataques organizados de decenas de colonos en el interior de poblaciones palestinas.
Uno de los más graves ocurrió en febrero de 2023, cuando centenares de colonos procedentes de asentamientos vecinos irrumpieron en la ciudad de Huwara, al sur de Nablus, incendiando vehículos y comercios, con el resultado de, al menos, un palestino muerto. Diversas organizaciones, e incluso el general israelí a cargo de las tropas de Cisjordania, Yehuda Fuchs, no dudaron en calificar lo sucedido de pogromo.
Respecto al último anuncio, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, declaró lo siguiente: “Construiremos el Estado judío israelí en Cisjordania […] La expansión de las colonias en Cisjordania es un mensaje a [Emmanuel] Macron y sus amigos de que reconocerán un Estado palestino sobre el papel”. Por su parte, el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, advirtió a Reino Unido y Francia que Israel podría anexar partes de Cisjordania si reconocen un Estado palestino. En concreto, amenazó con legalizar puestos de avanzada no autorizados y anexar zonas del Área C.
Cabe recordar que la Área C de Cisjordania, que incluye asentamientos, puestos militares y carreteras, abarca aproximadamente el 63% del territorio y se encuentra bajo el control civil y militar de Israel. En ella se hallan la práctica totalidad de los recursos naturales, impidiendo el acceso de los palestinos a, por ejemplo, los pozos de agua. Esto tiene unas consecuencias catastróficas para la economía palestina, muy dependiente del sector agrícola.
Según la declaración conjunta de Katz con el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich: “Todas las nuevas comunidades se están estableciendo con una visión estratégica a largo plazo, destinada a reforzar el control israelí del territorio, evitar el establecimiento de un Estado palestino y asegurar reservas de desarrollo para colonias en las próximas décadas”.