La paliza de Donald Trump a la CNN

0
218

Los twittes más injuriosos del planeta


Los medios de comunicación estadounidenses se hicieron poderosos desde el desembarco en Normandia. Los aliados entonces defendieron en zonas de enclave el poder de la información y el papel gravitante que cumplieron trasuntó su evolución e influencia. Ningún presidente de EEUU se atrevió a enfrentarse a ellos por su concepción de estructuras poderosas.

Empero, lo que no pasó en más de medio siglo sucede ahora. Un primer cráter de las relaciones del actual presidente de EEUU Donald Trump con la prensa, fue el alejamiento del director de la CIA James Comey, episodio comparado con la renuncia de Richard Nixon en 1974 a la presidencia de EEUU. Entonces, los servicios de inteligencia gravitaron no menos que el influyente Washington Post.

Apuntado contra del stablishment norteamericano, Donald Trump confirma esa faceta desconocida. Ya en los tiempos de la campaña electoral acusó impiadosamente a los conglomerados de la prensa de actuar como marionetas de la derecha conservadora. Y ese aluvión de críticas se ha agudizado a extremos ostensiblemente virales. Hace poco Trump dijo que estaba pensando sustituir las famosas conferencias de prensa en la Casa Blanca por informes escritos para evitar el contacto con la prensa.

Pero lo que rebaso el límite ha sido el montaje en el que Trump derriba a un hombre cuyo rostro ha sido reemplazado por un logo de CNN y luego lo muele a golpes en el suelo. El twitt del video se hizo viral inmediatamente. Un dato para tomar en cuenta es que Trump se ha convertido en el segundo personaje mundial más seguido en twitter con 33 millones de seguidores, antes de él Barack Obama con 74 millones y el Papa Francisco con 28 millones, son las tres personalidades más mediatizadas en las redes sociales.

 

El muñeco de la CNN
La publicación de las imágenes tuvo lugar tres días después de la ofensiva contra las cadenas de televisión a las que Trump considera hostiles a su administración. En particular fustigó a CNN, uno de sus blancos favoritos, bautizándola como “FNN”, por “Fake News Network” (“Red de Noticias Falsas”), y de ahora en más dijo que optaría por llamarla “FraudNewsCNN” (“InfoFraudeCNN”).

El video montaje dura 28 segundos, pero la acción misma dura cuatro segundos y se repite una y otra vez: Trump, de traje y corbata, toma por el codo a un hombre en un ring de lucha libre estadounidense, cuyo rostro está tapado por un logo de CNN, lo tira al suelo y le asesta varios puñetazos, luego se levanta y se va. La difusión de esa escena de la riña marca un nuevo hito en el uso descontrolado de Twitter por el presidente estadounidense.

La escena original data de 2007 y corresponde a una exhibición de catch. El hombre con el que lucha o simula un combate con Trump es Vince McMahon, exitoso promotor de combates de lucha libre. Vince McMahon, cuya fortuna fue estimada por la revista Forbes en más de US $ 1.000 millones de dólares, está casado con Linda McMahon, quien fue designada por Trump para encabezar la secretaría de Pequeñas Empresas.

La reacción de la cadena no pudo ser más marchita. Dijo que estimula la violencia contra los periodistas pero además tildó al mandatario de infantil por ocuparse de nimiedades en lugar de atender asuntos de estado más importantes.

Trump ya había criticado virulentamente a dos presentadores de la cadena MSNBC, Joe Scarborough y Mika Brzezinski, a quienes llamó “Joe el psicópata” y “la loca de Mika, de bajo coeficiente intelectual”. Los twitts dirigidos contra Mika Brzezinski, de MSNBC, reavivaron las preocupaciones sobre su opinión acerca de las mujeres en Washington, una ciudad donde escasea la cortesía, y mientras encara dificultades para que apoyen sus propuestas sobre la atención médica, la inmigración y otros temas controvertidos.

“Supe que @Morning Joe habla mal de mí (no lo veo más)”, twitteo Trump a sus casi 33 millones de seguidores. “Entonces por qué la loca poco inteligente de Mika, junto con el psicótico Joe, vino… a Mar-a-Lago tres noches seguidas en Año Nuevo e insistió en estar conmigo. Ella sangraba por un estiramiento facial. ¡Dije que no!”. Los twitts de Trump unificaron a demócratas y republicanos que consideran las exhibiciones más estridentes desde que llegó a la presidencia. La líder de la bancada demócrata, Nancy Pelosi, describió los twitts de Trump como “flagrantemente sexistas”. El presidente “falta el respeto a las mujeres… es una tristeza”, apuntó.

El enfrentamiento acentúa el poder del que se valieron los propios medios norteamericanos desde la Segunda Guerra, aunque, esta vez, la revancha no son los alemanes derrotados sino el desquiciado escrutinio por definir el rol de los aliados que como en cualquier guerra apunta a victoriosos y derrotados. Falta saber quién ganará en esta contienda.