Morales sostuvo que la lucha contra las drogas en el mundo son un fracaso
En la 56º REUNIÓN DE LA COMISIÓN DE ESTUPEFACIENTES de la ONU en Viena, el presidente de Bolivia Evo Morales dijo que las políticas internacionales para combatir el nartotráfico son un fracaso y animó a «nacionalizar» esta lucha.
Las razones son el «fracaso» de las actuales políticas internacionales contra la droga, que según Morales genera más violencia y funciona en la práctica como un «instrumento de dominio geopolítico».
«Las drogas ilícitas constituyen la tercera industria más rentable del mundo, según un informe de la ONU», ha recordado Morales, «después de la industria alimentaria y el petróleo, con un valor estimado de450.000 millones anuales completamente bajo el control de criminales» y ha agregado que este ha sido el efecto de la Convención de 1961, el opuesto al deseado, por lo que ha animado a reflexionar sobre sus causas.
“Hoy hay cada día más drogas en los mercados, cada vez hay más armas que alimentan la violencia social, cada vez más dinero ilícito encubierto por el secreto bancario”, declaró Morales a los delegados
“(estoy) un poco preocupado al ver un poco de tensión en esta reunión, y estaba preguntando si será por el fallecimiento del hermano Hugo Chávez (presidente de Venezuela) o por el fracaso de la lucha contra las drogas en el mundo” dijo Morales.
El boliviano ha llegado a la reunión para entre otras cosas defender el cultivo de la hoja de coca donde destacó que, sin la ayuda de Estados Unidos, Bolivia ha reducido sus campos ilícitos de hoja de coca manteniéndose al mismo tiempo como el tercer productor de este cultivo luego de Colombia y Perú. Bolivia cuenta con unas 27.200 hectáreas sembradas de las cuales 12 mil son legales y están destinadas a usos tradicionales. Morales ha reivindicado en la reunión que la hoja de coca, en su estado natural, no es una droga y que desde tiempos ancestrales es mascada y utilizada sin causar daños a la salud.
Informe anual
En un informe para las delegaciones presentes en la reunión, la Comisión cifra en hasta 253.000 las muertes anuales causadas por el consumo de drogas en el mundo y señala que la estabilización o el descenso del consumo de drogas tradicionales, como la cocaína, la heroína o el cannabis, en importantes mercados como Estados Unidos y Europa «se ve neutralizado por el creciente uso de esas drogas en partes de África, América del Sur y Asia». La mayoría de esas muertes que «podrían haberse evitado», indica el informe, fueron casos fatales de sobredosis de personas dependientes de opioides.
El informe muestra que en el mapa del uso de drogas, el empleo de sustancias sintéticas y el uso extraterapéutico de medicamentos de venta con receta comienza a despuntar, entre ellos opioides, tranquilizantes y estimulantes de venta con receta que reemplazan las drogas tradicionales, especialmente notable en América del Norte y en Europa.
Por otro lado, el consumo de estimulantes de tipo anfetamínico sigue aumentando especialmente en África, Latinoamérica y Asia y, en particular, en partes de Asia oriental y sudoriental. A nivel mundial, el cannabis sigue siendo la droga que más se consume, y cada vez se menciona con más frecuencia en las solicitudes de tratamiento por los trastornos psiquiátricos conexos.
Abc y El tiempo