Un equipo de investigación financiado por el gobierno chino presentó una propuesta para establecer una segunda capital en Xinjiang. Será una mega ciudad de 200 millones de habitantes.
Seis años atrás China activó un plan secreto en el noroeste de su país para elevarse a un nuevo nivel y la Inteligencia Artificial está acelerando el proceso. Se trata de un proyecto que se originó 100 años atrás que aspiraba a establecer una ciudad en Xinjiang.
Sun Yat-sen, uno de los fundadores de la China moderna, pensó la posibilidad de crear la capital de la nación en Yili, una ciudad del noroeste de Xinjiang, en ese momento el país se encontraba en un período de debilidad, pero tuvo la previsión de que algún día eso sería posible. Actualmente, en una cuenca desértica de China, se está llevando a cabo una primera fase para transformar Xinjiang en megaciudad.
El año pasado fue revelado el avance que muy pocos conocían, un equipo de investigación financiado por el gobierno informó que avanzan en una propuesta para establecer una segunda capital en Xinjiang. El objetivo es levantar una mega ciudad de 200 millones de habitantes.
Las actividades hasta ahora, fueron llevadas adelante por humanos, pero, desde abril del año pasado, esta tarea ha ido pasando gradualmente a una inteligencia artificial, informa el medio hongkonés South China Morning Post (SCMP).
Por qué eligieron Xinjiang para el mega proyecto
La decisión de emplazar la nueva ciudad en Xinjiang tuvo que ver con la extensión del lugar que supera la masa terrestre de Irán, allí se habían empezado otros proyectos como el cultivo de arroz o la construcción de la mayor planta de energía solar. Además que fue parte del sueño de Sun Yat-sen.
La primera fase de la construcción faraónica comenzó en la cuenca de Junggar, zona donde resultó clave el cambio climático, ya que, desde la década de 1980, las lluvias que eran escasas aumentaron constantemente, con una marcada aceleración después de 2010 hasta el punto de acercarse a las precipitaciones presenciadas durante la dinastía Tang.
Sin embargo, el clima oscila entre inundaciones y fuertes sequías por lo que desde 2018 el gobierno chino comenzó los planes de ingeniería ambiental más ambiciosos de la historia de la humanidad que incluye la construcción de una serie de embalses y túneles de agua a gran escala para almacenar nieve derretida e inundaciones estacionales y luego transportarlas a lo más profundo de los desiertos.