Los operadores de turismo del sudoeste potosino alertaron este jueves que las aguas de la Laguna Colorada se están secando y que desde el año pasado su nivel bajó 10 centímetros, convirtiéndose en un riesgo para los flamencos que habitan en el lugar.
“Cada vez cae menos lluvia y nevada y a eso se debe la desecación de la laguna Colorada, que es el centro de nidificación de flamencosmás grande del mundo (…). Vemos que el nivel de la laguna Colorada está bajando más y más”, declaro Filemón Quispe, operador de turismo en esa región.
La laguna Colorada está en la Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Abaroa, es un lugar de cría para los flamencos andinos, aguas que de paso son ricas en minerales. Quispe cuenta que existen tres de las cinco especies de flamencos que hay en el mundo y recordó que la laguna es uno de los lugares más emblemáticos del altiplano boliviano.
“El año pasado medimos y bajó 10 centímetros, cayó nevada y poca lluvia y subió un poco el nivel pero baja rápidamente”, advirtió el operador.
Los operadores de turismo de la región, la administración de la Reserva Natural de Fauna Andina Eduardo Abaroa y el Servicio Nacional de Áreas Protegidas, sostuvieron reuniones para analizar alternativas a la problemática. Una de ellas es retroalimentar la laguna Colorada con las aguas del Silala. “Esperemos que este proyecto se pueda ejecutar”, señaló.
El senador potosino Edwin Rodríguez hizo un llamado a las autoridades del Gobierno nacional, departamental y municipales para “salvar la Laguna Colorada”, porque es preocupante que se esté “secando”, sostuvo.
El legislador espera que el proyecto de ley sobre la “aducción de aguas del Silala hacia la Laguna Colorada” pueda tratarse en el Legislativo y así salvar la Laguna y sirva para proveer de agua a los municipios de Tupiza, Villazón y Uyuni.
Rodríguez dijo que las autoridades deben tomar medidas para evitar que se convierta en otro desastre natural como el que ha sucedido con el lago Poopó que se secó. Este lago cubría una superficie de 3.000 kilómetros cuadrados y era el segundo más grande de Bolivia, después del Titicaca.
La Agencia Especial Europea confirmó la desaparición total del lago Poopó, tras mostrar tres fotografías emitidas en fechas diferentes por su minisatélite Proba-V, que se encarga de monitorizar la superficie de la tierra diariamente.
“Se ha confirmado la evaporación completa del lago Poopó”, decía la noticia publicada en la página web de la Agencia Espacial Europea. Para confirmar este extremo se hicieron tres tomas de imágenes el 27 de abril de 2014, el 20 de julio de 2015 y el 22 de enero de 2016.