El fuego ha destruido 10.1 millones de hectáreas
Quiénes son los responsables de los tenaces incendios que se expanden incontrolables por Bolivia.
Los datos han puesto en emergencia a toda Bolivia. El fuego se ha descontrolado y de Santa Cruz parece desbordado a otros departamentos (Beni ha sido tomado por el fuego también), la noticia es que Cochabamba y Sucre podrían quedar a merced de las llamas que avanzan incontenibles.
La Fundación Tierra que como su nombre refiere hace la voz de jinete del Apocalipsis en estos casos (calla durante el resto del año) ha señalado en una conferencia de prensa el lunes que “los incendios forestales registrados al cierre de septiembre de 2024 han destruido más de 10,1 millones de hectáreas. De ese total, 5,8 millones de hectáreas (58%) corresponden a cobertura boscosa, que en mayor proporción se encuentra en los departamentos de Beni y Santa Cruz”.
Así lo establece el último informe sobre quemas presentado por el director de la institución, Juan Pablo Chumacero y por los investigadores Gonzalo Colque y Efraín Tinta. “Se trata de un reporte independiente (no gubernamental) que brinda información al 30 de septiembre de este año empleando información para los registros históricos de focos de calor FIRMS, información satelital MODIS (Terra/Aqua) y VIIRS (NOAA-20, NOAA-21 y S-NPP)”, detalla Tierra.
“Los incendios forestales de 2024 ya superan todos los registros anteriores en cuanto a área quemada y número de focos de calor. Las cifras finales para esta gestión seguirán aumentando debido a que el fuego sigue activo en varias regiones y la temporada seca continuará en los próximos días y semanas“, declaró Efraín Tinta.
Santa Cruz y Beni, los más afectados
“La mayor parte del daño se concentra en los departamentos de Santa Cruz y Beni, que representan el 97% del área quemada en todo el país. En Santa Cruz, se han destruido 6.916.700 hectáreas, convirtiéndose en el epicentro del desastre. Beni, por su parte, ha perdido 2.905.900 hectáreas. Estos dos departamentos son esenciales para la biodiversidad del país, y el impacto de los incendios pone en riesgo no solo los ecosistemas, sino también la vida de miles de personas y animales que dependen de estas tierras”, de acuerdo al informe elaborado por la Fundación Tierra.
Al mismo tiempo indica que “los incendios han afectado principalmente zonas de bosques y áreas agrícolas, destruyendo vastas extensiones que tardarán décadas, si no siglos, en recuperarse. El 58% del área quemada corresponde a bosques, mientras que el 42% restante afecta pastizales, llanuras y sabanas”.
Durante 2022 dat0s recorrió grandes extensiones de la Provincia Guarayos del departamento de Santa Cruz para reportar sobre la toma de propiedades agrícolas por avasalladores que actuaban fuertemente armados; milicias interculturales, apoyadas por sectores del gobierno, conectadas en niveles de la justicia que desplegaron (con ese apoyo) terror en la zona. A pesar de los excesos y denuncias puntuales nadie pudo detener su accionar mafioso. El libro del periodista Méndez titulado Terramafia publicado ese mismo año describía la penetración y el método utilizado por estos grupos irregulares en el departamento de Santa Cruz.
Terramafia describió crudamente la toma de una de estas propiedades en Guarayos en la que se secuestró a un grupo de periodistas que vivieron horas de angustia; amenazados, enmanillados boca abajo durante largas horas, llegándose a temer por sus vidas. Estos grupos han actuado en otras propiedades en regiones con desmontes para monocultivos a gran escala y asentamientos irregulares. Claramente, se los puede identificar como propiciatorios del desastre.
Los responsables han sido detenidos pero liberados en cuestión de días por órdenes de la Fiscalía del Distrito de Santa Cruz.
Tipos de propiedades afectadas en Santa Cruz
“El análisis del tipo de propiedad afectada arroja datos clave: el 34% del área quemada en el departamento de Santa Cruz corresponde a tierras fiscales (áreas protegidas y tierras fiscales disponibles), mientras que las Tierras Comunitarias de Origen (TCO) representan el 28%. Si bien muchas de estas áreas han sido víctimas de incendios provocados en otras zonas, algunas propiedades agrarias también han sido responsables del inicio y la propagación del fuego”.
“Es una catástrofe que afecta la vida de miles de hogares campesinos e indígenas, muchos de los cuales están desplazados por la pérdida de sus casas, de sus cultivos y de sus medios de vida, así como por la contaminación del aire y de sus fuentes de agua”, declaró Juan Pablo Chumacero, director ejecutivo de Fundación Tierra.