La Papelera vs. AGFA
LA PAPELERA S.A. ha sido favorecida con la Resolución 223/2012 de 6 de diciembre de 2012 -dictada por el Juzgado Séptimo de Partido en lo Civil y Comercial- que en su parte resolutiva falló declarando probada la demanda interpuesta por LA PAPELERA S.A. contra GEVAERT AGFA.
La sentencia dispone:
Pago indemnizatorio por compensación económica emergente de la representación exclusiva que ejerció LA PAPELERA S.A. a favor de los productos GEVAERT AGFA en Bolivia desde 1ro de junio de 1967 al 1ro de septiembre de 1995.
El pago de daños y perjuicios por incumplimiento consistente en el pago de ganancias no percibidas por la venta de insumos y los beneficios técnicos reclamados emergentes de la resolución del contrato de distribución no exclusiva.
Del daño a la imagen y reputación comercial de LA PAPELERA S.A.
De la recompra o pago del stock de productos AGFA.
De la inversión en personal especializado que trabajó para la marca AGFA GEVAERT.
La verdadera historia
En la década de los años ´60 y ´70 la industria gráfica germinaba en Bolivia de la mano de LA PAPELERA S.A. En el transcurso de al menos 20 años, la compañía posicionó su nombre como una de las más representativas del rubro a nivel nacional. Con LA PAPELERA S.A. se desarrolló el envolvente mercado del papel, la producción de imagen y sus derivados. La calidad de sus impresiones y la especialización y capacitación de sus operarios, situaron a la empresa como líder de la industria gráfica en el país. Reconocida por la calidad de sus impresos y la exposición de sus productos de exportación, LA PAPELERA S.A. alcanzó un importante sitial reconocida posteriormente con premios y menciones de honor.
En el cuaderno de obrados de la demanda interpuesta por LA PAPELERA S.A. al que tuvo acceso dat0s se puede leer que “por el Diploma de Honor expedido por la Cámara Boliviana de la Industria Gráfica de fecha 29 de marzo de 1990 se considera a LA PAPELERA S.A como un eficiente contribuidor a la tecnología de la industria gráfica moderna constituyéndose en la empresa más importante en el país, demostrando de esta forma la imagen prestigiosa que llegó a tener en el mercado grafico boliviano”.
Pero este desempeño empresarial no hubiera sido posible sin la visión de sus accionistas. Los ejecutivos de LA PAPELERA S.A. buscaron ingeniosas formas para despuntar en el mercado y ampliar los horizontes en la actividad de la industria gráfica. De esa manera, incorporaron un conjunto de estrategias de mercado y planes de negocios con el fin de expandir su nombre asociado al de sus representantes comerciales.
Esta decisión les permitió sellar en Octubre de 1967 un importante acuerdo de representación comercial y distribución exclusiva con la poderosa Multinacional belga AGFA GEVAERT N.V. que desarrolla, manufactura y distribuye productos y sistemas analógicos y digitales de producción de imagen, así como soluciones para la tecnología de la información y la comunicación.
En 1867 nació la compañía alemana AGFA y unos años más tarde, en 1894 en Bélgica se funda L. Gevaert & Cie, otra empresa química del sector que desarrolla junto con AGFA los productos fotográficos más avanzados del mundo de la imagen.
AGFA llega a Bolivia
El 16 de Octubre de 1967, los representantes de LA PAPELERA S.A. y los ejecutivos de AGFA GEVAERT N.V. firmaron un acuerdo comercial por el que la empresa boliviana se convertía en representante comercializador y distribuidor exclusivo de la amplia línea de productos que la Multinacional produce en su factoría europea.
El alcance del acuerdo firmado en Amberes, Bélgica, señalaba con claridad “la representación exclusiva de LA PAPELERA S.A de los artículos de productos de la marca AGFA”. Acuerdo que le permitía a LA PAPELERA S.A. aliarse con una marca de reconocido prestigio internacional. Por otra parte, permitía a AGFA GEVAERT, consolidar sus ventas en esta parte de la región, ganando mercados a través de planes de negocios estructurados, amalgamados al crecimiento, expansión y posicionamiento de LA PAPELERA S.A. en Bolivia.
Desde ese acuerdo suscrito en 1967 hasta 1995 los negocios marcharon en base a la confianza y el entendimiento recíproco. La Multinacional AGFA GEVAERT consiguió una vigorosa reputación en Bolivia gracias a LA PAPELERA S.A.; sin óbice de sus disponibilidades, la compañía perfeccionó el mercado gráfico y de imágenes, habida cuenta de la calidad de sus impresiones y la línea de los productos que representaba en el país.
LA PAPELERA S.A. desarrolló para la época una furtiva estrategia de propaganda prestigiando la imagen de su socio europeo. Paralelamente, la compañía boliviana abrió un brazo operativo especializado para comercializar exclusivamente los productos de la Multinacional, dando cumplimiento al acuerdo de manera profesional, decorosa y efectiva. Pero además manteniendo sobre todas las cosas la ética comercial.
En base a los documentos del contrato a los que tuvo acceso dat0s, la Sentencia del Juzgado Séptimo de Partido en lo Civil y Comercial expresa que “al haber ejercido la figura de exclusividad el representante comercial se comprometió a salvaguardar con todos los medios a su alcance los intereses de AGFA”.
Las cosas comienzan a cambiar
En agosto de 1999 LA PAPELERA S.A. decidió realizar un movimiento estratégico de sus negocios. Traspasó la parte de la industria gráfica a PAPELEX S.R.L., cuya razón propietaria depende íntegramente de LA PAPELERA S.A. Manteniendo la envergadura empresarial de siempre, los ejecutivos de LA PAPELERA S.A. comunicaron los movimientos del negocio a la subsidiaria de la matriz de GEVAERT AGFA LTDA en Chile. Una comitiva de la compañía boliviana se trasladó a Santiago a la cabeza de su gerente general Conrad Von Bergen y representando a PAPELEX S.R.L. la señora Marcela Bolarin, para informar a sus socios comerciales los cambios de sus negocios en Bolivia. La cita en Santiago fue cordial y al cabo de unas horas de reunión se acordó que LA PAPELERA S.A. seguiría representando los intereses de AGFA GEVAERT en Bolivia.
Además, en octubre de ese mismo año, dos ejecutivos de PAPELEX S.R.L. viajaron a la reunión de la junta semestral del área andina. Casi al mismo tiempo, personal técnico de LA PAPELERA S.A. se trasladó también a Chile para realizar cursos de especialización atendiendo las exigencias del negocio de forma comprometida y actualizada.
Antecedentes históricos
A partir de Octubre de 1967 cuando AGFA GEVAERT firma el acuerdo de representación comercial y distribución exclusiva de sus productos en Bolivia, muchas situaciones de inestabilidad sucedieron en la tumultuosa vida política del país. Conocida por sus golpes de Estado, el cambio intempestivo de sucesivos presidentes y factores de permeabilidad con los negocios deben ser resueltos en base a sistemáticas estrategias que demandan gastos adicionales para cualquier compañía; en medio de la inestabilidad política, social y económica que configura un cuadro adicional a los desafíos de hacer negocios en Bolivia.
A pesar de estos acontecimientos históricos que se enervan en el transcurso de los años 60 hasta la mitad de la década de los 70; durante prácticamente un periodo de 15 años, LA PAPELERA S.A. corresponde los acuerdos con AGFA GEVAERT manteniendo un sitial preferencial para sus productos, guiando campañas precisas para que el acuerdo pactado en 1967 no sufra traspiés propios de la inestabilidad que se vive en Bolivia.
La reunión en Buenos Aires
En 1995, cuatro años antes de los nuevos emprendimiento con la creación de PAPELEX SRL y de la reunión celebrada en Santiago de Chile, se realiza en Buenos Aires, Argentina, una reunión que define una parte de la relación entre los socios comerciales. En el cuaderno de obrados de la demanda se lee de manera textual: “Que, por la Escritura Pública Nº 159/2004 de fecha 24 de agosto de 2004 suscrita ante el Notario de Fe Pública, Ernesto Ossio Aramayo, es evidente la protocolización del acuerdo de distribución suscrita en la ciudad de Buenos Aires República Argentina entre AGFA GEVAERT ARGENTINA S.A. y LA PAPELERA S.A. en fecha 15 de agosto de 1995 por el cual ´AGFA otorga a partir de la fecha a LA PAPELERA S.A. la distribución no exclusiva de los equipos electrónicos de pre impresión de marca AGFA para el territorio de Bolivia´”.
Consiguientemente, la Sentencia establece que el acuerdo de no exclusividad es válido únicamente “para los equipos electrónicos de pre impresión ya que el acuerdo de distribución de fecha 15 de agosto de 1995 en ninguna de sus cláusulas establece que se le quite la representación exclusiva en toda la línea de la marca AGFA GEVAERT”.
Lo inexplicable y el proceso
Algo inexplicable sucedió en 02 de enero del año 2000. Ese día un fax enviado desde la sede de las oficinas de GEVAERT AGFA LTDA Chile ingresó a las oficinas del gerente general de LA PAPELERA S.A. comunicando la decisión de marginar a la compañía como su representante comercial y distribuidor para Bolivia.
Al respecto la Resolución de Sentencia 223/2012 da cuenta este acontecimiento en los siguientes términos: “Tal hecho causó estupor y desconcierto, no solamente el cambio de representante fue abrupto, sino también el hecho que por tal cambio de representante unilateral LA PAPELERA S.A. quedó con una gran cantidad de material que se encuentra en stock en las bóvedas; material de la marca AGFA GEVAERT que no puede ser utilizado por la empresa en las actividades de venta”. La resolución va más allá. Establece que “LA PAPELERA S.A. ha perdido una enorme cartera de clientes que han sido captados a lo largo de los 28 años de representación exclusiva, lo que trae consigo un daño a la imagen comercial que debe ser sujeto a resarcimiento”.
Asimismo, la Sentencia emitida por el Juzgado Séptimo en lo Civil y Comercial de La Paz, Bolivia, expresa que “se evidencia que AGFA GEVAERT, comunica que debido a la política de las casas matrices de concentrar los esfuerzos en un distribuidor por país obliga a la Empresa AGFA GEVAERT LTDA. ´a mantener a ABC COLOR como único representante en Bolivia´, de lo que se desprende que ABC COLOR tenía la calidad de representante exclusivo, mas prueba de ello es la revista grafica semestral que cursa a fs. 896 -de la cual se evidencia que en fecha 24 de enero de 2000 la Empresa AGFA GEVAERT LTDA., nombró a ABC COLOR como representante exclusivo en todo el territorio boliviano, nombramiento que se lo hace incumpliendo el contrato de fecha 16 de Octubre de 1967 que establece que el contrato “…puede ser rescindido por escrito con un pre aviso de tres meses…”.
Tras una profunda evaluación de la junta de accionistas de LA PAPELERA S.A.; el equipo jurídico de la compañía boliviana resuelve demandar a la Multinacional por los siguientes aspectos: “Pago de Compensación Económica por Representación Comercial, Utilidades Impagas por Ventas Futuras, Pago por Adquisición de Equipos, Repuestos, Insumos, Inversión en Personal y Capacitación más Resarcimiento de Daños y Perjuicios y otros”.
El 27 de septiembre de 2001, LA PAPELERA S.A. representada por Emilio Von Bergen plantea una demanda contra AGFA GEVEART LTDA Chile y AGFA GEVEART NV Bélgica considerando que las acciones acometidas, despojándola de la representación de la marca, acarrearían una serie de daños a la reputación, imagen, tradición y prestigio ganado, pero además considerables pérdidas económicas.
Las incompetencias
Planteada la demanda, los representantes de la Multinacional interpusieron recursos para anular la demanda. Observaron, por ejemplo, que al haberse suscrito el primer convenio en Bélgica, correspondía que un tribunal de ese país conozca la demanda y plantea incompetencia de jurisdicción de territorio para trasladar el juicio a tribunales europeos.
La pretendida acción encuentra resistencia y observación en los tribunales de justicia del Estado Plurinacional de Bolivia. Declara improcedente la solicitud para cambiar el domicilio una vez que todas las ventas, registros, patentes correspondían a la sede de las funciones de la compañía, esto es, La Paz Bolivia.
A partir de entonces la Multinacional ensaya nuevas formas de desligarse del problema. Alega que LA PAPELERA S.A. había dejado de ejercer la representación exclusiva desde 1995 tras el acuerdo suscrito en Buenos Aires y que por lo tanto la compañía boliviana era enteramente responsable de la inversión que había realizado desde esa fecha.
La justicia boliviana se pronuncia sobre el particular como hecho probado indicando que “por el contrato de fecha 16 de Octubre de 1967, se evidencia que la compañía boliviana desde el año 1967 hasta 1995 era representante y distribuidor exclusivo de la marca AGFA GEVEART LTDA”. Considerando el antecedente la justicia no da curso a la demanda de incompetencia planteada y argumenta que por los anexos que acompañan el contrato “queda probada la representación exclusiva que ejerció LA PAPELERA S.A de los artículos de productos de la marca AGFA”.
En cuanto al argumento esgrimido por el demandado sobre el acuerdo suscrito ante Notario de Fe Pública en Buenos Aires, Argentina que hace referencia a que a partir de 1995 LA PAPELERA S.A. dejaba se ejercer la representación con exclusividad de los productos de la marca AGFA, el juez establece en su resolución de Sentencia 223/2012- que LA PAPELERA S.A. tenía la calidad de representante exclusivo de toda la línea de la marca AGFA GEVAERT y se le quitó tal exclusividad solo en cuenta a la representación de los equipos de electrónicos de pre impresión, ya que el acuerdo en ninguna de sus cláusulas establece que se le quite la representación exclusiva en toda la línea de la marca AGFA”.
Otro de los argumentos esgrimidos por los representantes de GEVAERT AGFA hace referencia a la poca claridad de la demanda aduciendo que LA PAPELERA S.A. había transferido la línea gráfica de su compañía a la recientemente creada PAPELEX S.R.L. En referencia a este argumento el juez determinó que “PAPELEX SRL nació de la unidad de Negocios de Papeles de LA PAPELERA S.A. y la división de papeles de MADEPA y que del registro de comercio de Bolivia se evidencia que PAPELEX SRL es 100% de LA PAPELERA S.A. como se establece de las acciones… No habiendo al presente objetado AGFA GEVEART dicho cambio y/o manifestado desacuerdo con la nueva representación por más de tres meses”.
Todos estos antecedentes dejan entrever que la disputa en juego ha tocado el hilo de varios compromisos que hacen prever un desenlace vibrante en la justicia.