Desde la clandestinidad, la exvocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Rosario Baptista, volvió a emitir un nuevo pronunciamiento, esta vez para cuestionar al sistema de partidos políticos de Bolivia que, aseguró, no existe y afirmó que la sigla del Movimiento Al Socialismo (MAS) debió ser cancelada.
En el nuevo documento, lamentó tener que buscar protección, “no sólo de quienes ejercen el poder”, sino también del sistema de justicia, al que lo tildó de ser una “herramienta servil de la persecución y la extorsión”.
En los últimos 15 años, dijo que se consolidó un solo partido de alcance nacional, existen otros 10 pequeños, dispersos, unos sin militantes siquiera, “que han dado lugar a un mercado negro de siglas, prestadas, alquiladas, vendidas, sin importar cuál sea su declaración de principios, su programa de gobierno ni la posición ideológica que tengan”.
“Lo cierto es que el sistema de partidos políticos prácticamente no existe. Existe un partido único”, se lee en parte del documento en referencia al MAS. “Y es por este partido único que el Tribunal Supremo Electoral eligió no procesar una denuncia”, continúa.
De las dos causales
Recordó que se denunció la existencia de dos causales que podrían haber dado lugar a la cancelación de la personalidad jurídica, una por uso de bienes del Estado para la campaña electoral del expresidente Evo Morales, y la otra por discriminación.
Respecto a ese último caso habría sido “explícita en el Estatuto Orgánico del MAS-IPSP aprobado el año 2012, que determinaba que el acceso a la función pública corresponde sólo a militantes del partido”.
Afirmó que entre las justificaciones para no procesar esa denuncia pudieron ser muchas, entre ellas, hizo mención a las “condiciones políticas que se vivieron apenas unas semanas antes, la amenaza de una guerra civil, un pacto político entre las diferentes fuerzas en pugna, con aval de algunos vocales, condicionamiento ideológico, dádivas económicas, amenazas personales, o simple negligencia”.
“Ninguna es una razón jurídica, ni apegada a la justicia. Ninguna es de cara a la gente, y ninguna justifica el omitir el cumplimiento de nuestras obligaciones”, señaló al mencionar que hubo una investigación donde se obtuvieron las pruebas, no legalizadas, debido a presuntas amenazas a los funcionarios a cargo.
“Los ministros de turno se negaron a entregarla, y todo esto durante el gobierno transitorio Hoy, esta denuncia sigue pendiente de tratamiento, se resolvieron muchas otras presentadas con el mismo propósito, pero con diferentes causales y sin fundamentos válidos, todas fueron resueltas en plazo; esta no”, dijo.
¿Inconstitucionalidad?
En su criterio, la legislación electoral es “inconstitucional” y que lo reconoció el propio MAS cuando se debió cancelar su personalidad jurídica, así como ocurrió en el caso de la opositora agrupación Unidad Demócrata (UD) en 2015 para las elecciones subnacionales.
“No hacer las correcciones al sistema que conforma a todos los Órganos del poder público, distorsionado por una voluntad dolosa que ha secuestrado la soberanía del pueblo a favor de un partido político, conlleva la consolidación de un gobierno tirano, que ha desmantelado la democracia y persistirá en sostener impune a quienes, como Evo Morales, se aferran al poder engañando y traicionando a la propia gente que dice representar, a quienes no ha hecho otra cosa que dividir, basado en la mentira.”, añade.
Consideró que es el momento de que la ciudadanía recupere su soberanía, y la ejerza de manera directa y legítima, respetando su diversidad, libre de presiones, extorsión y manipulación del poder gobernante, ejerciendo su derecho a recurrir “al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión”.
“No importa dónde esté. Estoy con mi país, buscando que los derechos humanos y la justicia se restablezcan”, añade.