La granja de los animales 16
Como en los tiempos de la ley seca cuando la mafia campeaba el dominio de algunas puntos en ciudades de los Estados Unidor por la prohibición a la venta de whisky, hoy en Bolivia campean libremente las mafias del contrabando que al ver afectados sus intereses por denuncias que plantean algunos medios de comunicación sacan a relucir lo más sádico y perverso de su dominio atacando a mansalva a los que se pongan al frente de su actividad delictiva.
En Yacuiba, un territorio en el que campea impune todo tipo de actividad ilegal desde el tráfico de drogas y otro tipo de mercaderías, sus habitantes se ven cada día más asustados por la forma como estos grupos actúan. Los servicios de transporte público por ejemplo no llegan nunca a cubrir sus servicios de punto a punto pues se limitan a transportar a los usuarios hasta donde termina su dominio y les es permitido circular.
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En esa ciudad del sur, mientras trasmitía su programa radial el periodista Fernando Vidal fue atacado alevosamente. Los delincuentes ingresaron en vivo y en directo a la cabina de transmisión y arrojaron material combustible quemando al periodista de gravedad y a una locutora que se encontraba junto a él a la misma hora en el programa. El ministro Quintana fue el encargado a nombre del Ejecutivo de repudiar el atentado, ojala que sus palabas de esclarecer este hecho se concreten. No se puede olvidar que en la misma región fronteriza hace por lo menos cuatro años grupos a sueldo quisieron silenciar la televisora UNITEL siendo revelados en su escapada. Entonces se descubrió que los responsables habían alquilado una movilidad desde la legación venezolana en La Paz. El caso quedó enterrado en la impunidad. Eran los primeros años del Gobierno del MAS y nadie podía decir ni pio sobre la Asamblea Constituyente que aprobó la nueva constitución política del Estado Plurinacional.
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El actor estadounidense Sean Penn ha sido nombrado por el presidente Morales como embajador de Bolivia en dos temas medulares de la administración: la salida al mar que reclamamos a Chile y la defensa del acullico, pues el tema de la extradición de Goni sigue siendo un canto de sirenas que se utiliza de cuando en cuando con fines políticos. El ex marido de Madonna que defiende por el mundo causas perdidas, aceptó el encargó de su amigo personal Evo a quien ha visitado por segunda vez consecutiva en menos de un año. El acto se inscribe en otro revés para la Cancillería por el atrevimiento de David Choquehuanca de haber osado leer un poema de Gandhi en el cumpleaños número 53 de Evo en el que le pidió humildad al presidente, dejando en ridículo al segundo de a bordo del Estado que en su discurso de felicitaciones se engolosino con alabanzas al presidente colocándolo a la talla de un Mesías andino.
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Los festejos en palacio de Gobierno se han convertido en una constante para celebrar los cumpleaños de las autoridades jerárquicas del régimen. Primero coronaron al vicepresidente por sus 50 años cumplidos con un banquete. Aplausos y llunkerio se están haciendo tradición. Pocos días después fue el turno del presidente. Todo está fríamente calculado en este tipo de reuniones. Transmisión del canal del Estado al que se suman los restantes como si el hecho fuera una noticia de último momento. Al lado de semejantes festejos no hay cumpleaños que los iguales.
Es posible que el vicepresidente escuche los consejos de su amada esposa la periodista Claudia Fernández. Al menos eso parecería en el caso del control de los mensajes que circulan por Facebook. Un día después de haber anunciado que tiene los datos de los que se dedican a insultar al presidente en las redes sociales cambio de opinión diciendo que es imposible; “es como ponerle fronteras al aire”. Lo lamentable del hecho es que tras la rectificación dos ministros quedaron en off side, el de Gobierno que reconoció que hay funcionarios dedicados al control de las redes sociales y el de Culturas avanzó más lejos señalando que el ministerio de Comunicación elabora una ley marco de control. En qué quedamos. Todo apunta nomás que hay la intensión de ponerle fronteras al aire.
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