Morales viaja cuatro veces más que sus oponentes
Evo tiene a su disposición todo el aparato del Estado para emprender viajes al interior del país. Los adversarios se movilizan en vuelos comerciales y por tierra a sus diferentes destinos
Por entrega de obras o por actividad proselitista, desde que empezó oficialmente la campaña, el 14 de julio, Evo Morales es, de lejos, el aspirante más viajero.
Una revisión de la agenda presidencial permitió establecer que fueron 30 destinos en 44 días de campaña electoral (la revisión se realizó entre el 14 de julio y el 27 de agosto). Fueron contabilizados 59 viajes en total, y Cochabamba fue su destino favorito, donde estuvo en 13 oportunidades; seguido de Tarija y Oruro, con cinco visitas, en cada uno, y en cuarto lugar está Santa Cruz, departamento al que vino cuatro veces, todos viajes oficiales.
Los opositores Samuel Doria Medina, Juan del Granado y Jorge Quiroga, en ese orden, le siguen de lejos en sus traslados hacia el interior del país. De ese modo, el candidato de UD viajó en 15 oportunidades a las capitales de departamento, principalmente, y a varias provincias.
Juan del Granado viajó 10 veces fuera de La Paz a distintos puntos a la apertura de casas de campaña, presentación de candidatos o a realizar el conocido “puerta a puerta”. Jorge Quiroga, del PDC, es el que menos veces viajó desde el 14 de julio. Según los reportes publicados, el candidato se ausentó ocho veces de La Paz, aunque sus allegados aseguran que son más viajes. No figuran en la revisión los viajes que hizo el candidato Fernando Vargas, porque no existe registro sobre su actividad.
Para los oponentes políticos de Morales, el número de viajes y la variedad de destinos no significan otra cosa que el uso y abuso de los bienes del Estado porque ellos, aseguran, gastan recursos propios y utilizan vuelos comerciales para desplazarse, lo que no ocurre con Morales, que viaja todo el tiempo en las aeronaves estatales.
El presidente del Senado, Eugenio Rojas, del MAS, declaró que no se pueden dividir los viajes oficiales con los de campaña. “El jefe de Estado trabaja desde las 4:00 y alcanzar su ritmo es difícil. No viaja desde la campaña, lo hizo siempre y definitivamente lo seguirá haciendo, es su gestión y es su trabajo”, aseveró Rojas.
Las críticas
El candidato a diputado por el PDC Julio Alvarado dijo que la única explicación que existe para los frecuentes viajes presidenciales “es el temor que tiene de no lograr sus objetivos electorales en octubre y, por eso, debe redoblar su presencia entre sus acólitos porque teme perder”, afirmó y lamentó el abuso con los recursos públicos y no con los personales o los partidarios.
Aseguró que todos los viajes que ha realizado Jorge Quiroga, hasta el momento, son producto de los aportes de los simpatizantes y de los recursos que tiene el expresidente, al margen de viajar en vehículos que facilitan los propios candidatos, como es el caso de su periplo al sur de Oruro, Sucre y Tarija. El también postulante por UD Amílcar Barral afirmó que todos los viajes que ejecutó Samuel Doria Medina fueron en vuelos comerciales, aunque admitió que en “algunos casos”, y cuando el transporte comercial no lo permitía, se alquilaron aerotaxis para su desplazamiento.
“Pero cualquiera sea el caso, en línea aérea o en avión privado, todo se pagó con los recursos de Samuel (Doria Medina) y no con la plata de la población”, señaló Barral, en momentos que recorría el sur del país junto con el binomio de UD.
“Ellos (los candidatos oficialistas) suben al aeropuerto en vehículos que pagamos todos, los espera el avión que es del Estado, movilizan a personal de seguridad, cuando llega a un lugar los esperan policías, se trasladan en vehículos oficiales y hacen campaña electoral como candidatos”, refirió el portavoz del MSM y postulante a diputado por La Paz, Edwin Herrera.
El político afirmó que Del Granado espera vuelos comerciales “con todos los perjuicios que implica eso”. Dijo que viaja sin compañía de seguridad y es recibido por militantes en otras regiones, por tanto la diferencia es abismal entre uno y otro candidato.
La revisión de los viajes del vicepresidente Álvaro García Linera permitió verificar que fueron 19 veces las que se ausentó y Santa Cruz se convirtió en su destino favorito al que llegó en siete oportunidades; al igual que Morales, las actividades que cumplió el segundo hombre del Estado se mezclaron entre eventos oficiales y proselitistas del partido de Gobierno.
Los costos
En una consulta realizada por EL DEBER a las líneas aéreas del país, se pudo establecer que si el presidente Evo Morales pagara todos los viajes, habría gastado unos Bs 93.700 porque el promedio del precio de pasajes aéreos es de Bs 795, solo de ida, y de Bs 1.589 de ida y vuelta. Esos montos, multiplicados por los 59 viajes que realizó el jefe de Estado en un mes, arrojan una cifra de Bs 93.750, aproximadamente, de gastos para los pasajes.
Samuel Doria Medina habría gastado Bs 23.835 en sus viajes, mientras que Juan del Granado tendría que haber desembolsado Bs 15.890; finalmente, el expresidente Jorge Quiroga habría invertido Bs 12.712 en su desplazamiento por distintas regiones
Los opositores desearían lo mismo
Carlos Cordero – POLITÓLOGO
El hecho de que el presidente y candidato haya realizado y continúe con los viajes nos está mostrando un estilo de Gobierno que lo ha caracterizado. Evo Morales es uno de los presidentes más viajeros y eso lo mantuvo en contacto con los ciudadanos y electores, lo hizo durante toda su gestión; en un mismo día puede estar en el exterior, en un país distinto, y por la tarde puede inaugurar alguna obra en Bolivia y todo esto es posible porque se tienen los recursos estatales para aquello: vehículos, seguridad, pasajes o logística.
Seguramente los opositores tienen el deseo de hacer lo mismo, pero hay dificultades de logística; tiene un costo la organización y, además, no se tiene los recursos. Los viajes y el contacto tienen sus efectos en el resultado electoral, porque los ciudadanos que ven de manera física al candidato o presidente se sienten atraídos, creen que es el único que se acuerda de ellos y por tanto es al único que escuchan.
Los partidos de oposición que no entran en contacto tienen más desventajas, por ejemplo, en Argentina muchos creen que es Evo Morales el único, ya que a los demás los conocen muy poco y eso tendrá un efecto a medida que se ingrese en la fase final de la campaña
En el aire
El hangar presidencial
Los pilotos y personal técnico del hangar presidencial se niegan a ofrecer información sobre los costos que representan los viajes del jefe de Estado y candidato a la relección, Evo Morales, a diferentes destinos del país y del exterior.
Alquileres
Los opositores consultaron por el alquiler de avionetas para llegar a lugares donde no hay vuelos comerciales. Tampoco revelaron cuánto de dinero destinan para cubrir sus compromisos de campaña por todo el país.
Frustrados
Los políticos se declaran impotentes para conseguir aviones de la Fuerza Aérea Boliviana para trasladarse a poblaciones que son de difíciles acceso por carretera.