Tras la entrega sin exigencias de Mane Díaz el ELN advierte a Petro que no se haga ilusiones con el resto de detenidos por la guerrilla colombiana.
Se dice que la felicidad dura lo que manda el corazón. Si es que lo tiene el comandante del Ejército de Liberación Nacional (ELN), Antonio García, ha respondido a la exigencia que le hizo la delegación de paz del gobierno de Colombia de liberar a los secuestrados en poder de esa guerrilla con un rotundo “no” que pone sobre pinzas el proceso de paz”.
A través de unos trinos difundidos en su cuenta de X, García dijo que la organización que lidera “cumplió” al liberar a Luis Manuel Mane Díaz, padre del futbolista que milita en el Liverpool, inglés, “Luchito” con un “no existe ningún acuerdo sobre las retenciones ni económicas, políticas o judiciales”.
Para el gobierno del presidente colombiano Gustavo Petro y las delegaciones que conforman la mesa de paz el plagio sumió al diálogo con la guerrilla en “una situación crítica” que implica “tomar decisiones que eliminen el secuestro”.
La delegación, sigue el texto, exigirá en la próxima reunión que sostenga con su similar del ELN que todas las personas que permanecen secuestradas sean también liberadas “en condiciones de seguridad y dignidad de manera inmediata”. El documento, de cuatro puntos, abunda en detalles de esa naturaleza: “Este tipo de crimen ocasiona un grave daño a la confianza de la sociedad colombiana sobre la posibilidad de alcanzar la paz”. Y redunda: “el secuestro es un gran obstáculo para la paz”.
Un día después de que el padre de “Luchito” Días fue puesto en libertad, el líder de la guerrilla cuestionó: “¿Y el Gobierno cómo va a responder por las violaciones del cese el fuego? ¿Se seguirán haciendo los locos?”. A renglón seguido agrega que el ELN no aceptará imposiciones ni chantajes: “Que no se hagan ilusiones”.