¿Será suficiente el apoyo de Estados Unidos a Ucrania?

Dieciséis meses de inacción del Congreso en Estados Unidos han dejado a las fuerzas ucranianas exhaustas y escasas de munición. Aunque Estados Unidos finalmente ha promulgado otro paquete de ayuda financiera y militar, lo mejor que pueden esperar los ucranianos es otro estancamiento, en lugar de otra gran ofensiva contra las líneas rusas.

Nuevas armas y dinero suministrados por Estados Unidos están ahora en camino a Ucrania. La posibilidad de proporcionar ayuda militar adicional fue un tema de debate durante muchos meses en el Congreso de Estados Unidos. Al final, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, miró fijamente a los elementos más derechistas de su partido y sometió el asunto a votación. La propuesta fue aprobada por un margen de 311 a 112, gracias al apoyo de los demócratas. Si bien el mismo paquete también proporciona ayuda de seguridad para Israel y Taiwán, los casi 61.000 millones de dólares para Ucrania son el componente más importante y marcarán la mayor diferencia en el corto plazo.

El nuevo paquete ayudará a Ucrania a pagar municiones de defensa aérea, proyectiles de artillería, drones, armas contra drones y misiles Patriot que pueden dispararse desde aviones de combate. Es la primera inyección de efectivo que el Congreso ha autorizado desde diciembre de 2022, y es el paquete de ayuda más grande que Kiev habrá recibido desde el estallido de la guerra.

Aun así, Estados Unidos también ha estado ayudando de otras maneras. Incluso antes de que se aprobara el último paquete de ayuda, el Pentágono había enviado silenciosamente un nuevo sistema de misiles de largo alcance a Ucrania, cuyas tropas lo utilizaron inmediatamente contra un aeródromo ruso en Crimea y tropas rusas en la región de Donbas.

Se habla menos de una característica del nuevo paquete que ayuda a Ucrania y perjudica financieramente a Rusia. Según la Ley de Reconstrucción de Oportunidades y Prosperidad Económica para los ucranianos, la administración Biden está autorizada a confiscar activos estatales rusos congelados en Estados Unidos y utilizarlos para ayudar a Ucrania.

Antes de hacerlo, el presidente estadounidense, quiere asegurarse de que los aliados europeos y otros aliados del G7 de Estados Unidos estén de acuerdo con el plan. Si están de acuerdo, la medida proporcionaría otros 5.000 millones de dólares a Ucrania, cuyos fondos se obtendrían directamente de los activos del banco central ruso. Mientras tanto, la Unión Europea ya está reservando ganancias inesperadas generadas por los activos del banco central ruso congelados en Europa. Estos ingresos podrían darle a Ucrania otros 3.000 millones de euros (3.200 millones de dólares) al año.

Ucrania necesitaba esta ayuda

Dieciséis meses de inacción del Congreso han dejado a sus fuerzas exhaustas sin la artillería y municiones de defensa aérea necesarias para detener los recientes avances de Rusia a lo largo del frente, así como sus ataques con drones y misiles contra ciudades e infraestructura crítica de Ucrania. Este déficit permitió a las fuerzas rusas apoderarse de más dw 135 millas cuadradas de territorio ucraniano en los últimos cuatro meses, incluida la ciudad estratégicamente valiosa de Avdiivka en febrero.

Los temores de que Rusia estuviera preparando una importante campaña de verano para apoderarse de más tierras ucranianas hicieron surgir el espectro –en Kiev y en Washington, DC– de que un gran avance podría dejar a Ucrania al borde de una derrota militar a finales de este año. El último aumento del apoyo material estadounidense hace que eso sea ahora mucho menos probable. Si Ucrania puede construir nuevas fortificaciones a lo largo de la línea del frente y asegurar los sistemas de defensa aérea que necesita para proteger sus ciudades y su infraestructura energética (a pesar de la escasez de estos suministros creada por la guerra en Medio Oriente), podrá estabilizar sus posiciones defensivas hasta 2025.

La escasez de soldados

Según una nueva ley que el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky firmó a regañadientes a principios de este año, la edad de movilización militar se redujo de 27 a 25 años, se redujo el número de excenciones del servicio y se puede ordenar a los soldados que sirvan por períodos más largos. Todo eso ayudará si las nuevas tropas pueden ser entrenadas eficazmente y desplegadas rápidamente. Pero la ley, por sí sola, no cambiará el juego a favor de Ucrania.

Además, este es probablemente el último paquete que Ucrania puede esperar de Estados Unidos hasta después de las elecciones presidenciales de noviembre. Si gana Donald Trump, los ucranianos podrían verse completamente privados de ayuda futura. E incluso si gana Biden, la disposición del público estadounidense a proporcionar futuros paquetes de ayuda de 61.000 millones de dólares será limitada.

Por lo tanto, el paquete de ayuda de Estados Unidos proporciona un salvavidas que puede mantener a los ucranianos en la lucha hasta finales de 2024. Eso dará a los amigos de Ucrania en Europa más tiempo para producir y entregar más armas y municiones, y podría darle a Zelensky una mano más fuerte en el futuro para poner fin a la guerra.

Pero es poco probable que ayude a Ucrania a evitar una eventual partición del territorio. Después de más de dos años de guerra brutal, esa es la dolorosa realidad que enfrenta Ucrania hoy.