Turquía; restricción a redes sociales para evitar provocaciones

0
483
Foto: EFE

El primer ministro turco ha calificado Twitter como una «fuente permanente de problemas»

ABC.- Ante la oleada de críticas, informaciones y -también- rumores negativos desatada en las redes sociales durante estos últimos días de protestas, el gobierno planea ahora la aprobación de una nueva legislación que restrinja el uso crítico de estas plataformas comunicativas.

«Disponemos de un estudio sobre aquellos que provocan mediante Twitter y Facebook a la ciudadanía con manipulaciones y noticias falsas, que llevan a acciones que podrían poner en peligro la seguridad pública y la propiedad. Pensamos que este asunto necesita una regulación separada», ha asegurado el ministro del Interior,Muammer Güler.

El partido gubernamental AKP se ha mostrado enormemente disgustado por el papel jugado por las redes sociales en las manifestaciones, hasta el punto de que el primer ministro Recep Tayyip Erdogan llegó a calificar a Twitter de «fuente permanente de problemas». Hace dos días, el gobernador de Estambul, Hüseyin Avni Mutlu, ponía como ejemplo una fotografía distribuida por el diputado del partido opositor CHP Hüseyin Aygün, en la que se veía a un manifestante herido en el pecho, bajo la leyenda «La policía fascista del dictador le hizo esto a un manifestante con balas de plástico». Según Mutlu, la foto pertenece en realidad a un hombre herido durante la Primavera Árabe, en otro país.

Arrestos domiciliarios

De acuerdo con el diario «Hürriyet Daily News», un departamento especial dedicado a la lucha contra el crimen informático ha sido puesto al cargo de investigar unos cinco millones de tuits emitidos durante las protestas de las últimas dos semanas. Hace diez días, más de una treintena de personas fueron detenidas en la ciudad de Izmir por «incitar a los disturbios y distribuir propaganda», y si bien fueron liberadas al día siguiente, muchas podrían ser imputadas por estos hechos.

Además, la policía comenzó ayer a arrestar a manifestantes en sus casas: 62 en Estambul, 23 en Ankara y otras 13 en Eskisehir, según el Ministerio del Interior. Más de una veintena han sido acusados de «organizar protestas violentas y llamar a la gente a asistir a manifestaciones ilegales». No obstante, una fuente policial citada por la agencia Reuters asegura que «por ahora, solo los provocadores serán llevados para ser interrogados».