Brasil y Chile piden acciones contra ingreso ilegal de coca
Parlamentarios de los países vecinos dicen estar preocupados por el ingreso de la hoja en su territorio. Demandan incautarse de la coca en las fronteras y reforzar los controles policiales
Congresistas de Brasil y de Chile expresaron ayer, cada uno por su parte, su inquietud por la importación ilegal de hojas de coca a su territorio y demandaron a sus autoridades más esfuerzo para evitar el ingreso de este producto, porque consideran que es internado a su país para la fabricación de cocaína.
Según el Estudio Integral de la Demanda de la Hoja de Coca en Bolivia, que hizo conocer ayer el Gobierno, en los puntos de frontera se comercializan 1.479 toneladas (t) de la planta que llegan a Argentina, Brasil, Chile y Perú.
Las embajadas de estos países en Bolivia se vieron sorprendidas por la información. Según el Ministerio de Gobierno, 42,56 t circulan al mercado peruano; 4,16 t,al de Chile; 57,70 t, al de Brasi, y 1.374 t, al de Argentina.
“Para Brasil, esto es muy malo. Para los bolivianos la hoja de coca es una costumbre, pero aquí (en Brasil) no. Si viene acá, seguro que es para hacer cocaína”, afirmó a EL DEBER el senador brasileño Cristovam Buarque (Partido Demócrata Laboralista). Propuso a las autoridades competentes “financiar un sistema de control en las fronteras”.
El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado de Brasil, Ricardo Ferraco, expresó “extrema preocupación” y dijo estar actuando en reforzar sus fronteras. Recordó que el consumo y tráfico de cocaína genera violencia en su país y pidió actuar con firmeza al Gobierno brasileño.
Chilenos, sorprendidos
Entretanto, el diputado Jorge Tarud (Partido por la Democracia) dijo que desconocía del ingreso de hojas de coca a su país. “Es la primera noticia que tengo. Pero si la hoja no ha ingresado de forma legal, esta debe ser requisada. Averiguaré con las autoridades de Gobierno cuál es la situación que hay en la frontera”, expresó.
Por su parte, Mónica Zalaquett (del Partido Unión Demócrata Independiente), señaló que será “un desafío enorme” evitar que la hoja de coca ingrese al territorio chileno. Adelantó que pedirá fortalecer el Plan Frontera Norte para evitar el ingreso de droga. “Sabemos que los bolivianos dan otra utilidad a la hoja de coca, pero no sé por qué está entrando a Chile y con qué finalidad”, dijo.
En la embajada de Perú esperan conocer el estudio en su integridad. En la embajada Argentina no se pudo hablar con el embajador Ariel Basteiro. El senador Julio Salazar (MAS) expresó que el Gobierno trabaja para industrializar la hoja y exportarla legalmente
La OEA seguirá EL TEMA CON ATENCIÓN
El secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, manifestó ayer que seguirá con atención el Estudio Integral de la Hoja de Coca presentado el miércoles por el ministro de Gobierno, Carlos Romero. Confesó no haber revisado el informe.
“Creo que es un asunto interno. En la medida que el tema del cultivo de la hoja de coca para consumo en Bolivia quedó registrado ante las Naciones Unidas como un consumo que es válido, y por lo tanto cuánto se produce o cuánto no se produce para abastecer las necesidades del pueblo boliviano es un tema que también nosotros miraremos con mucha atención”, dijo el secretario general de la OEA.
“Se deben poner límites precisos a la exportación”
Armando Loayza – excanciller
Amí me preocupa, por lo que escuchamos desde el norte argentino y de Brasil, que la coca excedentaria está desbordando las fronteras, pero en forma de cocaína. Bolivia, de esta manera, se estaría poniendo en contradicción con las obligaciones que tiene ante la comunidad internacional de poner término y límites precisos a la exportación de coca que se convierte en droga ilegal. Bolivia sigue teniendo ante la comunidad internacional, una vez que fue readmitida en Convención de Viena sobre Estupefacientes, las obligaciones muy rigurosas de un control estricto de la hoja. Bolivia tiene que evitar que la coca excedentaria se convierta en droga ilegal, la cual representa un grave incumplimiento en nuestras relaciones internacionales y nos creará en la esfera vecinal situaciones muy delicadas. Lo que también me preocupa es la inmensa demora que tuvo el Gobierno en realizar y publicar el Estudio del Consumo de la Hoja de Coca. Cuando era canciller, en 2005, ya la Unión europea (UE) había ofrecido su cooperación económica para realizar el estudio. En el Conaltid habíamos dado la aprobación. Me parece importante que Bolivia reafirme ante la comunidad internacional que sigue firme en el respeto a la Convención. Lo principal es mantener los controles de la producción excedentaria