Brecha de género mundial: el futuro en manos de nuestros gobiernos

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El Global Gender Gap Report 2013

El Global Gender Gap Report (Informe sobre la Brecha de Género) fue presentado por primera vez en el Foro Económico Mundial en el año 2006, como marco de trabajo para medir la magnitud y el alcance, de las disparidades basadas en el género en el mundo, y monitorear cómo éstas evolucionaba.

La herramienta clave de este informe es el Global Gender Gap Index (Índice Global de la Brecha de Género). Este índice hace referencia a diferentes aspectos nacionales en materia de género como lo son: las desigualdades económicas, las diferencias en el acceso a la política, a la educación y a la salud.

El Global Gender Gap Report  2013 está dividido en 2 partes. En la primera parte, Measuring the Global Gap, el informe señala los conceptos utilizados para desarrollar el índice y las metodologías utilizadas para calcularlo. Para ejemplificarlo, se presentan los rankings de países según el índice de 2013, subrayando las tendencias globales y regionales, y las situaciones características de algunos de los países investigados. Seguido, el informe establece de manera general cuáles son los vínculos entre las brechas de género y las políticas económicas de los países estudiados (133 en total). Y finalmente, concluye presentando algunos recogidos por el índice en los últimos 8 años, a fin de permitir al lector realizar comparaciones con años anteriores. En la segunda parte, the Country Profile, el informe ofrece una imagen más detallada de las relativas fortalezas y debilidades en cuanto a la brecha de género, comparado por países.

De esta manera el Global Gender Gap Report  2013 consigue, no sólo hacer una radiografía de la situación actual de la brecha de género en el mundo, sino que además permite a través de indicadores fiables, realizar comparaciones eficaces por regiones y por países, a lo largo del tiempo.

Tendencias globales en la brecha de género 2013

De acuerdo al informe, una buena noticia en cuanto a las tendencias globales, es que en el 86% de los países incluidos en el informe desde el 2006, se han reducido las brechas de género a lo largo de estos 4 años; sin embargo una mala noticia es que en el 14% restante, no sólo no se han mantenido sino que se han profundizado.

De los 133 países cubiertos en el informe este año, casi el 90% ha reducido las desigualdades entre hombres y mujeres en materia de salud y niveles educativos. Sin embargo, la brecha de género en los ámbitos de participación económica y acceso a la política, siguen siendo asignaturas pendientes y que evolucionan muy lentamente.

De acuerdo al nivel económico, en el grupo de países con altos ingresos, destacan los países nórdicos con los mejores resultados; no sorprende sin embargo que sea Arabia Saudí, el país situado en la peor posición de esta categoría. En el grupo de países con ingresos medios, es Cuba el país con los mejores resultados frente a Irán con las peores cifras en cuanto en disparidades de género. En el grupo de países ingresos medio-bajos, es Filipinas quien se sitúa a la cabeza en materia de igualdad de género, mientras que Yemen presenta los peores resultados. Y finalmente, en el grupo de países con ingresos bajos, Burundi presenta un desempeño mejor en los indicadores reportados, mientras Chad se sitúa a la cola.

En cuanto a los ámbitos estudiados, es en el de la educación dónde se presentan los mejores resultados con hasta 25 países que han disminuido las disparidades entre hombres y mujeres en el último año. Presentando el peor desempeño en este ámbito, se sitúa Benín, en el cual sólo tienen acceso a la educación la mitad de mujeres que de hombres.

 

En el ámbito de la salud, 10 países han mejorado su brecha de género. A la cola se sitúan China, Albania, India y Azerbaiyán, los cuáles continúan presentando las peores cifras en acceso a la salud para las mujeres.

En cuanto a participación económica y oportunidad, ningún país ha conseguido cerrar esta brecha en el último año. El mejor desempeño lo presenta Noruega, país que ha cerrado casi el 84% de esta brecha, frente a Siria, país que sólo ha llegado a alcanzar el 25% de su brecha de género en participación económica.

Lo mismo sucede en cuanto a la participación política se refiere. El país con las mejores cifras, Islandia, ha llegado a reducir esta brecha hasta el 75%, mientras que los dos países con el peor desempeño en este ámbito, Timor-Leste y Qatar, no han reducido en nada esta brecha.

Tendencias regionales en la brecha de género 2013

En términos generales, Norte América presenta la primera posición en cuanto a reducción de la brecha de género (casi un 74%), frente a la región MENA (Oriente Medio y Norte de África), que ocupa la peor posición, habiendo reducido sólo el 59% de la brecha. Lo mismo ocurre cuando hablamos de participación económica. De nuevo Norte América se sitúa a la cabeza habiendo cerrado en un 82% la brecha de género, mientras que la región MENA sólo ha reducido el 39% de las desigualdades.

En cuanto al ámbito de la educación, Norte América tiene el mejor desempeño habiendo cerrado por completo su brecha de género, mientras que África Subsahariana, se sitúa en la última posición, alcanzando una disparidad en del 86% entre hombres y mujeres en materia de acceso a la educación.

 

La región de Asia y el Pacífico, ocupa por su parte la última posición en materia de acceso a la salud, convirtiéndose en la peor región del mundo para una mujer en cuanto a salud y supervivencia se refiere.

Finalmente, en cuanto al empoderamiento político, la mayoría de los países incluidos en el informe, se encuentran lejos de conseguir la paridad. Sin embargo destacan de nuevo por su bajo desempeño las regiones de Asia y el Pacífico, habiendo cerrado sólo el 24% de su brecha de género, y la región MENA que tan sólo ha reducido el 7% de disparidades en cuanto a empoderamiento político

Los 4 países con la menor brecha de género del mundo: claves del éxito

Los países Nórdicos se mantienen, al igual que años anteriores, en las mejores posiciones de este ranking. Islandia ocupa el primer lugar por quinto año consecutivo presentando la brecha de género más estrecha del mundo. De hecho, este país ha mejorado su brecha de género en el último año gracias a un sobresaliente  desempeño de sus indicadores de participación económica y de empoderamiento político. Finlandia ocupa el segundo puesto seguida por Noruega que ha reducido ligeramente su brecha de género en el 2013. Suecia ocupa la cuarta posición.

Aunque ningún país ha alcanzado la igualdad de género completa, todos los países nórdicos, a excepción de Dinamarca, han cerrado cerca del 80% de su brecha de género, convirtiéndose así en un modelo de referencia internacional en cuanto a la equidad entre hombres y mujeres. Los países nórdicos son además líderes en participación económica femenina debido a una combinación de factores: la participación de las mujeres en el mercado laboral, que es de las más altas del mundo; las diferencias salariales más bajas del mundo (aunque no inexistentes) entre hombres y mujeres; y, finalmente, la promoción del liderazgo femenino en las empresas y los gobiernos.

Estas tendencias varían dependiendo del país, pero tienen un común denominador: han hecho posible que hombres y mujeres puedan combinar la vida laboral y personal y llegar a compartir las labores domésticas y del cuidado de los hijos, por igual.

Entre algunas de las políticas utilizadas por estos países para reducir la brecha de género destacan: el permiso de paternidad obligatorio (alineado con el materno), coberturas a cargo de la seguridad social, incentivos en los impuestos, y programas de reintegración laboral para las madres después del embarazo. Como resultado de estas políticas se han podido observar incrementos significativos en las tasas de maternidad, y de participación laboral femenina, en comparación con otros países de la OECD.

Para acabar, estos países han llevado a cabo además acciones para promover el liderazgo de las mujeres. En Noruega por ejemplo, los consejos ejecutivos de las compañías han de estar compuestos por un 40% por lo menos, de cada género. Suecia por su parte, presenta a día de hoy la cifra más alta de mujeres en el parlamento (el 44,7%). Los 4 países han alcanzado indicadores similares en cuanto al posicionamiento de mujeres a niveles ministeriales a la cabeza del gobierno.

La brecha de género en el mundo: ¿quién más lo está haciendo bien?

La quinta mejor posición de esta clasificación la ocupa para sorpresa de algunos, Filipinas. Se trata del único país de la región de Asia y el Pacífico que ha alcanzado la igualdad de género en salud y educación. Datos que desgraciadamente empeorarán después del reciente fenómeno natural sufrido por el país. Seguido encontramos a Irlanda. Este país sin embargo, ha bajado a la sexta posición, consecuencia de la crisis económica que ha generado entre otras cosas, una reducción de la participación económica femenina. Nueva Zelanda, por razones similares, baja también a la séptima posición, debido a la disminución de la participación de la mujer en el mercado laboral. Dinamarca por su parte, también desciende una posición, a pesar de su mejor desempeño en materia de empoderamiento político. Suiza sin embargo, sube un escalón gracias al aumento PIB per cápita femeninos en el país. Y finalmente Nicaragua ocupa la décima posición, siendo el único país de Latino América y el Caribe que se cuela en la lista de los 10 mejores países con un mejor desempeño en su brecha de género.

Brechas de género, desempeño económico e implicaciones políticas

Otros de los puntos clave de este informe es su objetivo de probar que la competitividad depende también de las mujeres ya que un factor determinante en la economía de un país, es su capital humano. Teniendo en cuenta que la población femenina conforma la mitad de los habitantes de un estado, cerrar las brechas de género implica, no sólo respetar los derechos humanos y defender la equidad de género, sino también mejorar la eficiencia económica a nivel nacional. De hecho, de acuerdo a los datos del Global Report existe una clara correlación entre equidad de género, competitividad, desarrollo humano y PIB per cápita.

 

El Global Report 2013 remarca así el mensaje de que con el fin de mejorar la competitividad y el desarrollo potencial, todos los países deben trabajar por conseguir la igualdad de género. Ello pasa, desataca el informe, por asegurar a las mujeres los mismos derechos, responsabilidades y oportunidades que a los hombres. La magnitud y las particularidades de las brechas de género en el mundo, son el resultado de procesos tanto culturales como socioeconómicas. Acabar o empeorar estas brechas, está intrínsecamente ligado a las políticas públicas llevadas a cabo por cada país, y por tanto, en manos de los gobiernos nacionales o en el mejor de los casos, de las sociedades a las que estos gobiernos representan .