Bolivia ratifica rechazo a la legalización de drogas
El ministro de Gobierno, Carlos Romero, ratificó ayer que Bolivia rechaza toda posibilidad de despenalizar el consumo de drogas y se alinea al criterio de muchos países que también negaron esa propuesta durante las sesiones de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en Viena el 13 y 14 de marzo pasado.
Romero dijo que “el criterio mayoritario ha sido que la despenalización responde a contextos muy específicos y casi la totalidad nos hemos expresado en contra de cualquier legalización de las drogas. No creemos que se trata de regular los mercados de estupefacientes sino más bien de eliminarlos”, explicó.
En el encuentro de Viena, Bolivia explicó que su estrategia de lucha contra el narcotráfico se basa en interdicción, erradicación y respeto a los derechos humanos.
“Nosotros nos hemos ratificado en esta decisión de intervención estatal drástica contra las drogas, frente a otras corrientes que hablan de regulaciones del Estado o la despenalización del consumo de algunas drogas como el caso de la marihuana en Uruguay”, dijo ayer, en Cochabamba, el ministro de Gobierno, Carlos Romero.
En la reunión que se realizó el 13 y 14 de marzo de 2014 en la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de la ONU, un documento de esa organización propuso la despenalización del consumo de estupefacientes, como una forma de lucha contra las drogas.
“La despenalización del consumo de drogas puede ser una forma eficaz de descongestionar las cárceles, redistribuir recursos para asignarlos al tratamiento y facilitar la rehabilitación”, dice parte del informe de 22 páginas de la oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito presentado en Viena.
El ministro Romero explicó que el criterio mayoritario de los países presentes en esa reunión fue que la despenalización responde a contextos muy específicos de cada nación.
“Pero casi la totalidad nos hemos expresado en contra de cualquier posibilidad de legalización de las drogas, no creemos que se trata de regular mercados de droga sino de más bien de eliminarlos”, aseguró Romero.
El Ministro calificó de positivas las distintas estrategias de lucha que los gobiernos bolivianos fueron asumiendo a lo largo de su historia, “en la década de los años 80 se tenía 60 mil hectáreas, Bolivia era catalogada el primer país en la región con mayor superficie de plantación de coca, ahora nos encontramos en tercer lugar, un avance significativo”, dijo.
Para el Gobierno boliviano, la autorregulación, junto con el control social dieron como resultado la reducción “considerable” de las plantaciones de coca en el país que reporta hasta el 2012 un total de 25 mil hectáreas de hoja de coca, el tercer país productor de hoja de coca, después Colombia que tiene más de 48 mil hectáreas y Perú con más de 62 mil hectáreas.
En los últimos años el Estado aumentó como 18 veces su presupuesto con relación a los años de los “gobiernos liberales”.
El caso de Uruguay
El 10 de diciembre de 2013 Uruguay se convirtió en el primer país del mundo en legalizar la producción, tenencia y uso de marihuana, logrando de esta forma que sea 100 por ciento legal. La marihuana se vende en farmacias a mayores de 18 años que pueden adquirir hasta 40 gramos de la misma por persona. En un debate legislativo con 16 votos a favor el Senado aprobó la iniciativa promovida por el presidente José Mujica en 2012, como una alternativa para poner fin al narcotráfico.