El Estado adjudica grandes proyectos a compañías extranjeras

De 40 proyectos millonarios, en los que el Gobierno ha destinado alrededor de $us 5.623 millones, desde sus distintas carteras de Estado, un 85% ha sido adjudicado por licitación o de forma directa a empresas extranjeras, según un recuento de proyectos realizado por Dinero.

Estos grandes proyectos del Estado en los que se invierte entre $us 12 y $us 862 millones se encuentran en los sectores de hidrocarburos, energía eléctrica, construcción y minería.

Es notorio que varias de estas obras estatales fueron adjudicadas a compañías chinas. Por ejemplo, la empresa china Camce Engineering se adjudicó la construcción del ingenio azucarero San Buenaventura (Easba), en Tarija, por un monto de $us 263 millones, así como la construcción de la presa, vertedero y obras subterráneas, además de instrumentación para la represa de Misicuni ($us 56,7 millones).

Anteriormente, este consorcio chino se hizo cargo de la construcción de la planta de estaño de Huanuni ($us 50 millones).

La empresa china Sinohydro se encargará de la construcción, en Cochabamba, del proyecto hidroeléctrico San José, que aportará 124 megavatios (MW). Este proyecto costará $us 235 millones.

Para Roberto Laserna, presidente de la Fundación Milenio, en Asia se encuentran las economías emergentes más dinámicas y sus empresas son, por ello, de las más agresivas. “Muchas aprovechan que sus técnicos e ingenieros son comparativamente baratos, pese a estar muy bien formados. Por ello, pueden ofrecer servicios y productos a precios bajos, logrando muy buenos contratos”, manifestó Laserna.

Empresas españolas

La empresa española TSK Electrónica y Electricidad SA tiene a su cargo el montaje de la segunda fase de un parque eólico en el centro del país que aportará 24 megavatios (MW) al SIN, por un monto de $us 64,5 millones.

La española Isotron, del grupo Isastur, se encargó de la fase inicial de la planta solar construida en Cobija (Pando) por un monto de casi $us 12 millones.

Pero, sin lugar a dudas, el proyecto más grande ($us 398 millones), adjudicado a la firma española Corsán Corviam, es la construcción del proyecto hidroeléctrico Miguillas, que generará 200 MW de electricidad.

En los próximos cinco años, el Gobierno dispondrá de al menos $us 1.100 millones para fortalecer la capacidad de generación de electricidad que tiene el Estado, anunció la viceministra de Electricidad, Hortensia Jiménez.

Firmas bolivianas destacadas

Una de las firmas bolivianas que se adjudican grandes obras, sobre todo como subcontratista, es la empresa Carlos Caballero SRL. Su gerente general corporativo, Diego Caballero, expresó que han desarrollado trabajos para los sectores petrolero, minero, energético, de infraestructura, industrial y de telecomunicaciones en casi 16 años de operaciones.

Por ejemplo, en la planta separadora de líquidos de Gran Chaco realizaron el montaje de siete tanques esféricos para almacenamiento de GLP e isopentano. Para la planta separadora de líquidos de Río Grande fabricaron seis tanques a presión tipo bullet con dimensiones de 40 m de largo por 3,80 m de alto. Serpetbol se encargó del montaje de esta planta en Santa Cruz

Destacan auge de construcción

The Wall Street Journal (WSJ), un periódico estadounidense internacional con énfasis especial en noticias de negocios y economía, analizó el auge de la construcción en Bolivia. Además, puso de manifiesto que la expansión en el sector comienza a preocupar a algunos inversionistas, que temen que la demanda pudiera no seguirle el ritmo a la oferta, especialmente en momentos en que la industria energética global se desacelera.

Bienes raíces

“Bolivia, uno de los países más pobres de América Latina, experimenta un repentino crecimiento de su economía que también ha provocado un auge en su sector de bienes raíces”, revela el periodista Martín Arostegui.

Entre los proyectos inmobiliarios que destacan está el hotel Marriott, que se construye al costado de la Torre de La Riviera Beauty Center, un edificio de 122 metros, que es el más alto de la ciudad.

Hay más de 60 proyectos de construcción en marcha en Santa Cruz, según Cadecocruz.

A algunos analistas, según WSJ, les preocupa que el mercado no pueda absorber todas las nuevas construcciones.

“Bolivia se ve afectada por la caída en los precios globales del petróleo y de las materias primas”, dijo Nabila Dabdoub, quien sigue el país para Latin America Invest Inc., una firma de gestión de riqueza con sede en Miami. Dabdoub dice que cree que el mercado de bienes raíces boliviano ha llegado a su pico.