La captura del hombre más buscado por Bolivia y Perú

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Martín Belaunde Lossio, empresario y exasesor del presidente de Perú, Ollanta Humala, fue hasta hace unos momentos el hombre más buscado por Bolivia y Perú.

Fue capturado en Beni (noreste de Bolivia) poco después del mediodía, hora local, en una casa particular donde se refugió. No opuso resistencia y de inmediato fue enviado a La Paz, informaron medios bolivianos.

La noticia fue ratificada por la cuenta de Twitter del Ministerio de Gobierno de Bolivia: “Confirmado, la Policía capturó a Belaunde”.

La Fiscalía peruana lo acusa de “conformar una organización criminal, como jefe de organización, por el caso Antalsis”.

Antalsis era una empresa española para la que Belaunde Lossio presuntamente realizó cabildeo con autoridades peruanas con el fin de conseguirle millonarias licitaciones.

Además se le investiga por presuntos delitos contra la administración pública “en la modalidad de colusión, tráfico de influencias y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado”, según el Ministerio Público peruano.

Belaunde Lossio se trasladó en diciembre a La Paz, Bolivia en busca de refugio y desde el pasado domingo desapareció de aquel lugar hasta que fue ubicado después de pasar cinco días en la clandestinidad.

Las autoridades bolivianas, antes del operativo policial que terminó en su captura, anticiparon que sería entregado a la justicia peruana de inmediato.

Búsqueda implacable

La misteriosa desaparición de Belaunde Lossio el domingo 24 de mayo en La Paz, hizo que el presidente de Bolivia, Evo Morales, prescindiera de su ministro de Gobierno y del comandante de la Policía, mientras que en Perú una avalancha de críticas castigó sin piedad al gobierno por no haber logrado la extradición del excolaborador a tiempo.

El escándalo alcanzó, principalmente, a la primera dama peruana, Nadine Heredia. Frente a las críticas, el presidente peruano ofreció el martes una recompensa por la entrega de Belaunde, a quien llamó “delincuente”. El mandatario rechazó, una vez más, que su administración proteja al ahora detenido y calificó de “insensatos” los ataques contra él y su esposa.

Y eso no es todo.

Desde que Belaunde Lossio abandonó la casa en la que guardaba arresto domiciliario a la espera de su entrega a la justicia peruana, 14 personas en Bolivia fueron involucradas en la fuga.

Un día antes de su detención, el ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana, anunció una “búsqueda implacable” en una entrevista radial.

La fuga

Martín Belaunde Lossio solicitó refugio en Bolivia el 16 de diciembre de 2014, después de pasar la frontera de Perú sin que la justicia ni la policía de aquel país lo advirtieran.

Desde enero se quedó en una de las casas de Yuliano Arista y de su prima hermana Cloritza Díaz Belaunde, mejor conocidos como el Curaca Blanco y Zulayda, “curanderos espiritistas expertos en la unión de parejas”.

La justicia boliviana había determinado arresto domiciliario para él mientras se resolvía su pedido de refugio y la solicitud de extradición que se tramitó en Lima.

Su desaparición se produjo en la madrugada del pasado domingo, 14 días después de que el Tribunal Supremo de Justicia de Bolivia determinara que el exasesor de Humala debía ser entregado a la justicia peruana.

Un día después del incidente, Hugo Moldiz renunció a su cargo de ministro de Gobierno en Bolivia y su sucesor, Carlos Romero, anunció cambios en los altos mandos policiales para que no se repitan episodios así.

Evo Morales, en conferencia de prensa, dijo que “corrió mucha plata”, dando a entender que los vigilantes de Belaunde recibieron sobornos para dejarlo huir.

“Seis custodios para una persona y que se les escape, es muy raro, lamento muchísimo ese desempeño policial, ojalá ellos que de alguna manera han permitido esta fuga puedan dar con el paradero y lo traigan al señor Belaunde para rendir cuentas”, afirmó a BBC Mundo el presidente del Senado boliviano, José Alberto Gonzales.

En menos de 48 horas, 14 personas quedaron detenidas, sospechosas de haber colaborado en la fuga.

Edgar Fernández, conocido como el lector de cartas del Tarot Ramsés, fue uno de los detenidos por la desaparición de Belaunde que, después de obtener su libertad, conversó con BBC Mundo.

“Vivimos horas de mucho miedo e incertidumbre. Por el hecho de hablar con Martín o visitar esa casa corríamos peligro de perder la libertad. Nueve familiares quedaron detenidos sólo por el hecho de ser familiares”.

En la década del 90, Ramsés fue uno de los testigos clave de un escándalo por narcotráfico que costó la libertad a importantes líderes políticos bolivianos en aquella época.

Después de someterse a un programa de protección de testigos de la DEA en Costa Rica, Ramsés volvió a Bolivia como lector de cartas del Tarot. Su esposa es hija de una sobrina de Belaunde y aquel parentesco le costó la detención a los tres.

Otro de los detenidos, el empresario y excorredor egipcio boliviano Alí Eid Alí, es acusado de haber prestado uno de los vehículos de su autoventa para que Belaunde escape.

A pesar de la captura de Belaunde, la investigación sobre él persiste y el vehículo fue confiscado.

Los vínculos con la pareja presidencial

A su llegada a Bolivia, Martín Belaunde se declaró perseguido político y dijo que él era “peligroso” para la pareja presidencial de Lima.

La Fiscalía de Perú informó a través de un comunicado que estaba vigente una orden de detención preventiva de 18 meses en contra del exasesor por otro caso conocido como “La Centralita”, una red criminal de desvío de fondos públicos que Belaunde habría cubierto con una de sus empresas.

Además, el pasado febrero, la fiscalía anticorrupción en Lima emitió una resolución en la que dispuso que la primera dama de Perú, Nadine Heredia, y cuatro congresistas también debían ser investigados por el caso de tráfico de influencias conocido como Antalsis.

La relación de Nadine Heredia con Belaunde Lossio se destapó unos años antes, cuando la Unidad de Inteligencia Financiera de Perú halló irregularidades en las cuentas de la pareja de Ollanta Humala y se filtraron los contratos que ella tenía con el exasesor.

Por aquellos vínculos, la primera dama afronta otra investigación por lavado de activos, al no haberse determinado el origen del dinero (US$215.000) depositado a su cuenta de ahorros entre 2006 y 2009.

El periodista Rodrigo Cruz, que sigue el caso para el diario El Comercio de Lima, explicó a BBC Mundo que la relación de Belaunde Lossio con los Humala arranca en la campaña de las elecciones que Ollanta perdió en 2006.

“Ellos necesitaban de alguien que los ayudara a introducir en los medios su proyecto político. Ese fue Martín Belaunde, empresario, joven de familia acomodada y de ideas de izquierda. El lazo se hace más fuerte con el tiempo. Y más aún cuando empiezan a ingresar bastante sumas de dinero a la campaña”.

Cruz añade que, desde entonces, Nadine es investigada por los sospechosos contratos que contrajo con Belaunde y que habrían sido para “blanquear dinero venezolano que llegaba a su cuenta personal”.

Todo ello motivó, desde el domingo, una ola de críticas de todos los partidos de oposición en Perú que acusaron al gobierno de no actuar a tiempo y facilitar la desaparición de su excolaborador.

A pesar de la detención, en ambos países persiste la guerra verbal entre representantes políticos que se responsabilizan los unos a los otros de haber permitido que Belaunde Lossio desaparezca durante cinco días.

El episodio le costó el cargo a un ministro en La Paz y otro está muy cerca de ser interpelado en Lima.

No serán los únicos. Los siguientes episodios del caso del hombre que fue el más buscado por Perú y Bolivia todavía son un misterio.