1.284 nuevos mundos de una tacada. Es el mayor anuncio de exoplanetas jamás realizado hasta ahora y duplica, de un solo golpe, el número de planetas más allá del Sistema Solar confirmados por la sonda Kepler, un telescopio espacial especialmente dedicado a la “caza” de exoplanetas y que será jubilado dentro de apenas unos meses. En palabras de Ellen Stofan, científico jefe de la NASA en Washington, «esto nos da nuevas esperanzas de que ahí fuera, en alguna parte, alrededor de un sol parecido al nuestro podamos descubrir una nueva Tierra».
El anuncio es el resultado del análisis del catálogo de candidatos a planetas de Kepler en 2015, que incluía 4.302 mundos potenciales. El resultado es que, de todos ellos, 1.284 tienen más del 99% de posibilidades de ser realmente planetas, que es el porcentaje mínimo que se requiere para poder decir que un nuevo planeta existe de verdad. Otros 1.327 candidatos podrían, también, ser planetas, pero no alcanzan el 99% de probabilidades y requieren, por lo tanto, de más estudios antes de ser confirmados. Los 707 candidatos restantes no han sido confirmados y probablemente se trate de otra clase defenómenos astrofísicos. El análisis también validó otros 984 mundos que habían sido verificados previamente con otros métodos.
«Antes del lanzamiento del telescopio espacial Kepler -afirma Paul Hertz, director de la División de Astrofísica de la NASA-, no sabíamos aún si los exoplanetas eran raros o algo muy común en nuestra galaxia. Gracias a Kepler y a la comunidad de investigadores, ahora sabemos que podría habermás planetas que estrellas. Y este conocimiento servirá para configurar futuras misiones que nos lleven cada vez más cerca de averiguar si estamos solos en el Universo».
La forma en la que Kepler descubre nuevos mundos es midiendo las pequeñas variaciones en la luminosidad de las estrellas que se dan cuando un planeta pasa por delante de ellas, un tránsito muy parecido al que acabamos de ver con Mercurio cruzando por delante del Sol el pasado 9 de mayo. Esas señales son analizadas después por un equipo de expertos, que se encarga de confirmar o desestimar la existencia de nuevos planetas.
Entre los 1.284 nuevos planetas confirmados, cerca de 550 podrían ser rocosos, como la Tierra, basándose en su tamaño. Y nueve de ellos, además orbitan justo en las zonas habitables de sus estrellas. Es decir, a la distancia justa, ni demasiado cerca ni demasiado lejos, para que pueda existir agua líquida en su superficie. Estos nueve mundos, por lo tanto, se añaden al selecto club de los otros 21 descubiertos hasta ahora en zonas donde, en teoría, la vida podría desarrollarse.
De los más de 5.000 candidatos a planetas encontrados hasta el momento tanto por Kepler como por otros instrumentos científicos, 3.200 han sido ya verificados. Y 2.235 de ellos fueron descubiertos, precisamente, por Kepler, que fue puesto en órbita en marzo de 2009 con la exclusiva misión de buscar mundos parecidos a la Tierra. Desde entonces, el telescopio espacial ha estudiado sistemáticamente 150.000 estrellas en una región muy concreta de cielo, midiendo con todo detalle y de forma sistemática las ligeras variaciones de brillo de cada una de ellas. A partir de 2018, un nuevo instrumento de la NASA, el Transiting Exoplanet Survey Satellite usará el mismo método para monitorizar otras 200.000 estrellas en otra franja de cielo. Y con el mismo objetivo, encontrar mundos qtan afortunados como el que nosotros ocupamos.
Podrían albergar agua
«Este anuncio dobla el número de planetas confirmados por Kepler», anunció en una rueda de prensa Ellen Stofan, científica jefe de la sede de la NASA en Washington. Nueve de los planetas confirmados orbitan a una estrella en la zona habitable, por lo que serían candidatos a albergar agua líquida y, por lo tanto, vida.
Con la suma de estos nueve planetas, el número de candidatos a ser habitables descubiertos gracias al telescopio espacial Kepler, que operó hasta 2013, asciende a 21. Cerca de 550 podrían ser planetas rocosos como la Tierra, si se tiene en cuenta su tamaño.
Los datos recopilados por el telescopio Kepler permiten analizar el espectro de más de 150.000 estrellas y detectar ligeras variaciones del brillo, lo que indica el paso de un planeta por la órbita del astro.
Esa técnica ha permitido que, por primera vez en la historia, se haya podido confirmar la existencia de más de 2.300 planetas fuera de nuestro sistema solar, aunque de ellos solo una pequeña fracción pueden ser similares a la Tierra.
La nueva técnica que ha permitido acelerar de manera exponencial los hallazgos de planetas fue desarrollada por científicos de la Universidad de Princeton (EE.UU.), que, gracias un software abierto y algoritmos, han conseguido automatizar las detecciones.
El sistema clasifica aquellas variaciones de brillo estelar que permiten adelantar la existencia de planetas potenciales. La técnica ha identificado4.300 potenciales planetas, pero 1.327 de ellos, pese a ser probablemente planetas, no llegan al 99% de certeza que marcan los científicos para confirmar el hecho.
Además, 707 han sido clasificados como otro tipo de fenómeno astronómico y 984 candidatos a planetas que no habían podido ser identificados previamente han sido confirmados con las nuevas técnicas