Quintana acusa a los medios de desestabilizar al Gobierno

El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, acusó nuevamente a los medios de comunicación de “desestabilizar” al Gobierno. El país  está atravesando por una “guerra” de la “mentira”, afirmó  ayer al promocionar su libro Bolivia-Leaks.

“Sostuvimos de manera categórica -como lo sostuvo el Vicepresidente y el Gobierno- que el 21 de febrero en Bolivia se produjo un golpe político y mediático y que por ello es que hemos acusado al cártel de la mentira de ser los operadores del golpe político y mediático”, dijo en el programa El Pueblo es noticia que se difunde por la radio gubernamental Patria Nueva.

El 21 de febrero se llevó a cabo el referendo constitucional. Los resultados le negaron a Evo Morales postularse nuevamente a la Presidencia en 2019 y el Gobierno atribuyó la derrota electoral a las denuncias por tráfico de influencias hechas contra el presidente Evo Morales y su expareja Gabriela Zapata, y a la  existencia del hijo de ambos, que un tiempo después murió.

“Esos señores del cártel de la mentira se encargaron de alimentar un proyecto de desestabilización que viene desde el Gobierno norteamericano operado por su encargado de negocios con una larga tradición de injerencia en su calidad de diplomático”, agregó la autoridad.

El “cártel de la mentira”, según Quintana, está compuesto por Página Siete, El Deber, ANF y  ERBOL. Tal información la brindó el 19 de mayo en la Asamblea Legislativa en una interpelación a la que se presentó.

“El pueblo boliviano debe resistir. Así como en Venezuela está resistiendo heroicamente la guerra económica, nosotros debemos resistir la guerra contra la estrategia de la mentira. Todos los días abren los periódicos, escuchan las radios alineadas a la embajada y escuchan a la oposición liderizada por Sánchez Berzaín. Todos tienen como matriz el  discurso lineal y matemático de la mentira. Vamos a resistir y estamos resistiendo”, declaró.

El libro Bolivia-Leaks

El texto, cuya elaboración fue coordinada por el ministro Quintana,  tiene un anexo en el que menciona a varias personas y exfuncionarios que, según un análisis de cables de Wikileaks, facilitaron información a la Embajada norteamericana.

Los cables corresponden al periodo en que el general Luis Trigo, actual embajador de Bolivia en Venezuela,  era Comandante de la Fuerza Aérea. Su nombre se repite en cuatro documentos mencionados en el libro. En uno de esos cables se informa que el General boliviano “ha mantenido una relación cordial y una línea abierta” con el Agregado de Defensa de EEUU.

“A pesar de sus declaraciones públicas abiertamente a favor del Gobierno y las apariencias, la seguridad laboral de Trigo sigue siendo tenue a raíz de la serie de acusaciones de corrupción en su contra”, agrega el documento.

Volteo de droga

Un segundo caso involucra al actual viceministro de Defensa Social, Felipe Cáceres, con un caso delictivo de intento de intercambio de cocaína (volteo de droga). En la página 270 del citado libro se hace un resumen de un cable enviado por la legación diplomática de Estados Unidos en Bolivia a Washington, en el que se resume una conversación con el teniente coronel José Cuevas, entonces jefe de la Unidad Móvil de Patrullaje Rural (Umopar), quien se refiere al supuesto pedido que Cáceres le hiciera para intercambiar clorhidrato de cocaína (de alto valor) por pasta base (de valor menor).

Juan Ramón Quintana, durante todo el programa,  no se refirió a estos dos funcionarios de Gobierno que aparecen en su libro. Los periodistas tampoco le preguntaron sobre estas personas.

El ministro de Gobierno, Carlos Romero, rechazó la pasada semana que el viceministro Cáceres haya estado involucrado en un volteo.