Pando denuncia veto informativo y dice que será la primera liquidada

La periodista Amalia Pando denunció que sufre actualmente un “veto informativo” de parte del Gobierno que imposibilita que ministros y otras autoridades del Ejecutivo asistan a su programa para hablar de algún tema en particular, de ahí que la ministra de Salud, Ariana Campero, no asiste a su programa para cumplir con un fallo del Tribunal Nacional de Ética Periodística, pese a que ya se hizo una invitación formal.

“¿Por qué no llamo a la ministra? ¿Por qué no llamo todos los días? Porque el Gobierno me ha vetado informativamente, entonces es ocioso llamar a los ministros, porque nunca me atienden, nunca vienen, no sólo los ministros, los viceministros, el chofer, ni el portero de un ministerio viene a este programa, porque hay veto informativo y eso es inconstitucional y antidemocrático”, dijo la periodista hoy en su programa radial Cabildeo.

Pando mencionó que este contexto imposibilitó que en su momento se comunique con la ministra para conocer la contraparte del supuesto embarazo que motivó a Campero a denunciar a la periodista ante el Tribunal de Ética. “Reconozco el error, igual debí haber llamado y registrado la llamada para tenerlo como archivo”, expresó Pando.

“Soy la primera a ser liquidada”

Ayer, la ministra de Salud dijo que no descarta iniciar un proceso penal contra Amalia Pando por el comentario sobre su embarazo. En lo referido a sus disculpas, Campero dijo que Pando sólo lanzó una palabra “disculpe”, acompañada de frases en tono “sarcástico y burlesco”.

Ante esas palabras, Pando dijo hoy que lo que busca el Gobierno, en realidad, es mandar a la cárcel a los periodistas que no comparten su línea y dijo que ella será la primera liquidada.

“Soy la primera a ser liquidada, estos son los que vamos a ser liquidados, la primera es Amalia Pando, no están sabiendo cómo hacerlo”, dijo la periodista y acotó que buscan que su persona deje el periodismo.

El miércoles se conoció un fallo del Tribunal Nacional de Ética Periodística que dio por probada, en parte, la denuncia de la ministra contra Pando y la periodista Roxana Lizárraga, quienes el 23 de marzo comentaron que la Ministra estaba embarazada presuntamente de un ministro, cuya esposa -al enterarse- hizo escándalo.