14 municipios declarados como zona de desastre

Al menos 14 municipios se encuentran declarados como zona de desastre y otros 20 se mantienen en estado de emergencia debido a las lluvias que persisten en el país, informó el ministro de Defensa, Javier Zavaleta, quien, además, dijo que hasta el momento se registraron 8.224 familias afectadas.

“De acuerdo al reporte que se ha elaborado (hasta el día de hoy), hay aún 20 municipios declarados en emergencia y 14 municipios están declarados en desastre”, explicó la autoridad gubernamental.

Según informe oficial, cuatro municipios del departamento de Santa Cruz son considerados como zona de desastre, uno de La Paz, dos de Tarija, otros dos de Potosí, uno del Beni, tres de Chuquisaca y uno de Cochabamba.

Entre tanto, en emergencia se encuentran dos municipios del departamento de La Paz, cuatro de Santa Cruz, uno de Tarija, otro de Potosí, cuatro del Beni, cinco de Chuquisaca y tres de Cochabamba.

EMERGENCIA NACIONAL

El ministro Javier Zavaleta recordó que desde el miércoles, el país está declarado en emergencia nacional por efecto de un decreto supremo aprobado por el Gabinete de Ministerios, que es una respuesta a una declaración departamental de emergencia emitida por Potosí, Beni, Chuquisaca y Cochabamba, lo cual impulsó a una movilización nacional.

Explicó que la declaratoria permitirá movilizar recursos económicos propios y adicionales, para atender a los 20 municipios declarados en emergencia y 14 declarados en situación de desastre, entre ellos el municipio de Tiwanaku en La Paz, 4 en Santa Cruz, 2 en Tarija, 2 en Potosí, 1 en Beni, 3 en Chuquisaca y 1 en Cochabamba.

Cada municipio coordina asistencia con los comités de emergencia departamentales y luego se produce la primera respuesta de Defensa Civil, que se produce cuando el municipio o la gobernación no pueden atender. Sostuvo que de acuerdo con el reporte de Senamhi, se estima que la época de lluvias se extenderá por cuatro semanas más y las lluvias que caerán en los departamentos de Santa Cruz, Cochabamba y La Paz incrementarán los caudales en los ríos del departamento del Beni y también en el sur de Tarija, pero con la misma intensidad en el Beni.

Se prevé que el “golpe de agua” en el Beni por causa del río Mamoré, llegará la subsiguiente semana para lo cual se han tomado previsiones con Defensa Civil y las Fuerzas Armadas. Aclaró que no existen municipios declarados en alerta roja, aunque eso no significa que los sistemas de alertan estén tranquilos, comentó.

TIQUIPAYA

En relación al desastre de Tiquipaya, informó que unos 400 soldados respaldan los trabajos de reencauce del río y la asistencia a los pobladores afectados. Indicó que por ahora no faltan alimentos ni espacios para albergar a la gente.

Zavaleta informó que respecto al número de personas fallecidas, se tiene la confirmación de un niño fallecido y tres permanecen en calidad de personas desaparecidas. Los equipos del SAR de la FAB y Bomberos continúan en la búsqueda de los cuerpos por una obligación del Gobierno y una necesidad de sus familiares.

Los casos más graves que se han presentado en Tupiza, donde una riada se llevó todo a su paso y dejó a decenas de familias sin vivienda, y en Tiquipaya, donde una mazamorra ingresó a la población rural sepultando casas, vehículos e incluso personas.

En total, a nivel nacional, hasta el momento se registraron 8.224 familias afectadas y 86 damnificadas.

REENCAUZAMIENTO

Por otro lado, el ministro de Obras Públicas, Milton Claros, dijo que, junto con la Gobernación de Cochabamba y la Alcaldía de Tiquipaya, se coordinan acciones para reencauzar el río Taquiña, controlar así el flujo del agua y evitar un nuevo desborde con mazamorra.

“Estamos ahora en la Alcaldía, para ordenar el equipo e ingresar por la parte inferior y superior precautelando también que no se generen problemas. Lo que necesitamos es encausar alrededor de un kilómetro el río y de esa manera vamos a controlar el curso y flujo del agua”, manifestó.

La autoridad explicó que, después de realizar una inspección aérea por el lugar, se concluyó que el desborde de río Taquiña ocurrió porque “hubo una acumulación bastante importante de material suelto debido a un desprendimiento de la parte superior de la cabecera de la cordillera”.

Ese desborde con mazamorra afectó a dos puentes, uno en construcción y otro que se encontraba habilitado.