Juan Guaidó: Hay un gran descontento dentro de la familia militar y muchos indicadores de que está del lado de la Constitución
Juan Guaidó mantiene su pulso.
Cinco días después de haberse declarado “presidente encargado” de Venezuela ante el “usurpador” Nicolás Maduro, el líder de la oposición prosigue con su agenda para hacerse con el poder en Venezuela.
El gobierno de Estados Unidos y otros 20 países lo reconocen como presidente interino del país, mientras que Maduro y sus seguidores tachan lo sucedido de intento de golpe de Estado.
En este contexto, la Casa Blanca ordenó este lunes la congelación de los activos de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), y prohibió, aunque con excepciones, que ciudadanos y empresas de su país tengan negocios con la petrolera venezolana.
“Esperamos que las medidas de este lunes bloqueen US$7.000 millones en activos además de más de US$11.000 millones por exportaciones perdidas a lo largo del próximo año”, dijo el asesor de Seguridad Nacional estadounidense, John Bolton.
Además, Bolton les pidió a los militares venezolanos que acepten la transición impulsada por el líder opositor.
A los pocos minutos de conocerse este anuncio, Guaidó conversó con BBC Mundo en Caracas.
Asegura ser el presidente legítimo de Venezuela. Pero nunca se ha presentado como candidato. Sin embargo, Nicolás Maduro sí ha ganado elecciones presidenciales. ¿Por qué tiene usted más derecho que él?
En Venezuela se ha desmantelado el estado de derecho. La elección de 2018 no fue válida y a Maduro se le venció el periodo en enero de 2019.
El artículo 233 de la Constitución dice que el presidente de la Asamblea Nacional debe encargarse de la presidencia de la República en caso de una ausencia absoluta del presidente para convocar unas elecciones libres.
Por eso, hemos determinado que hay una usurpación y una dictadura.
Perdieron la legitimidad de origen y ahora han perdido la legitimidad de ejercicio, porque están asesinando a los jóvenes que acuden a las manifestaciones y están obligando a los venezolanos a vivir en la pobreza.
¿Hay alguna posibilidad de que Nicolás Maduro salga del poder sin que haya un derramamiento de sangre en Venezuela?
Sí. Será gracias a la presión social, la movilización, las Fuerzas Armadas poniéndose del lado de la Constitución y el apoyo de la comunidad internacional.
Nosotros tenemos la hoja de ruta lista. Será el fin de la usurpación y la convocatoria de una elección libre. Es factible lograr una transición pacífica.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, asegura que todas las opciones están sobre la mesa. ¿Está dispuesto a pagar el precio de una intervención militar estadounidense para sacar a Nicolás Maduro del poder?
Venezuela es un país soberano. Los que han irrumpido en la soberanía de Venezuela son, por ejemplo, el ELN (Ejército de Liberación Nacional, grupo guerrillero colombiano), un grupo irregular que incursiona en Venezuela para extraer oro y cambiarlo por armas.
Todo eso lo creó el gobierno de Nicolás Maduro.
¿Qué opina de las sanciones anunciadas por Washington contra PDVSA, la petrolera estatal? ¿Puede esto decantar la balanza de su pulso con Nicolás Maduro?
Nosotros solicitamos desde el Parlamento la protección de activos afectados por la corrupción. Han robado US$400.000 millones, cuatro veces el PIB de Venezuela.
Esto forma parte de la protección de los activos de la nación para poder dedicarlos a la atención de la emergencia humanitaria.
Pero ¿no equivale esto a un embargo petrolero al país?
El embargo petrolero fue que Venezuela invirtió US$300 mil millones en los últimos diez años en su industria petrolera y pasamos de producir 3 millones y medio de barriles a solo 2.
Ese fue un embargo por la vía de los hechos. Endeudaron a la nación y el tesorero de la República se declaró culpable por todos estos hechos. Fueron US$1.200 millones en sobornos. ¿Cuánto perdimos nosotros por esto?
¿Tiene algún indicio de que los altos mandos militares van a pasarse a su bando? Hasta ahora han dicho que se mantienen leales a Nicolás Maduro.
Se detuvo a 27 sargentos que decidieron manifestar su descontento, hay 160 militares presos y los hay que están recibiendo la ley de Amnistía.
Hay un gran descontento dentro de la familia militar y muchos indicadores de que está del lado de la Constitución.
¿Qué contactos tiene en el alto mando militar? No hemos visto ninguna garantía de que vayan a pasarse a su bando.
En Venezuela hay una dictadura. El chavismo que se atreve a alzar la voz es encarcelado, asesinado o desterrado.
Hablo de Miguel Rodríguez Torres, que fue ministro de Chávez; de Nelson Martínez, que fue ministro de Petróleo y murió en una cárcel; de Luisa Ortega Díaz, que está en el exilio.
Ha vuelto a convocar protestas esta semana. ¿No es una estrategia muy peligrosa, teniendo en cuenta todo lo que está en juego y toda la tensión?
Sin presión ciudadana no se derrota a una dictadura. El usurpador Maduro ha asesinado ya a 40 jóvenes que regresaban a sus casas en zonas muy populares.
Hoy vivir en Venezuela ya es un peligro. No podemos permitir que se convierta en solo sobrevivir. La movilización del pueblo es un riesgo necesario y nuestra protesta es siempre pacífica.